La balanza comercial deficitaria, debido a la caída en las exportaciones del sector agro, se tradujo en menores ingresos de divisas y su efecto se observó en la depreciación de casi el 2 % de la moneda nacional frente al dólar, a diferencia de otras economías de la región que muestran una apreciación frente a la moneda estadounidense.
El economista Jorge Garicoche explicó a La Nación/Nación Media que Paraguay, por su déficit en su balanza comercial, no pudo alinearse a la tendencia de debilitamiento del dólar, causado por los conflictos comerciales de EE. UU. contra China y Europa, que provocó una caída del tipo de cambio en varios países de la región. En Paraguay siguen saliendo más dólares de los que entran. En términos concretos, nuestra balanza comercial sigue siendo deficitaria, con un poco de recuperación en algún momento, pero Paraguay hoy está vendiendo mucho menos de lo que vendía en años anteriores. Tiene que ver un poco con las cuestiones climáticas, con la expectativa que se tenía de la soja, que finalmente todavía no se cumplió en su totalidad, comentó.
Recordó que el guaraní tiene una depreciación natural de cerca del 4 % frente al dólar, pero que las tensiones en Medio Oriente podrían agudizar dicho comportamiento, dependiendo de cuánto suba el petróleo. La eventual suba tendría impacto en la balanza comercial, pues los combustibles representan el rubro más importado por nuestro país. “Eso podría terminar también afectando a ese mercado de combustible. Y una de las incidencias que podría tener es que eso valorice todavía por encima las importaciones que tenemos. El principal producto importado de Paraguay es el derivado de petróleo, así que eso podría tener su impacto en la cotización del dólar“, explicó.
INFLACIÓN
Consultado sobre la repercusión de la depreciación del guaraní frente al dólar en la inflación, el economista afirmó que no necesariamente se traduciría en mayores precios en el corto plazo. Acotó que entre 2015 y 2016 se observó una alta depreciación de la moneda nacional, pero que la inflación se mantuvo en niveles habituales. “Generalmente la depreciación del tipo de cambio tiene un traslado muy leve o muy lento en la inflación en Paraguay. De algún modo, los productos al transformarse al guaraní, se van adaptando también al mercado. No necesariamente porque tengamos una mayor depreciación de la esperada eso va terminar impactando considerablemente en la inflación”, sostuvo.
En el caso de los combustibles, dijo que tampoco una suba repentina impacta de inmediato en la inflación, pero que luego por cuestiones de transporte ese aumento de precio se traslada a los precios.
CONFLICTOS DE MEDIO ORIENTE
Sobre el eventual comportamiento que podría mostrar el dólar en un escenario de conflicto internacional como el de Medio Oriente, Garicoche reconoció que es difícil anticiparlo porque dependería del comportamiento de los inversores, que por lo general buscan refugiarse en activos más seguros, como lo eran, tanto la moneda estadounidense, como el oro y los bonos americanos. Pero con las políticas que desarrolla el actual gobierno estadounidense y las tensiones comerciales, se redujeron los flujos de inversión en ese país. Agregó que también la cuestión geopolítica, dependiendo de la fuerza con la que EE. UU.
Paraguay mantiene un dólar estable, según economista
Tasas de interés local resultan hoy menos atractivas que las de EE. UU., lo que impulsa a los agentes a convertir guaraníes en dólares.
El economista Manuel Ferreira analizó la actual coyuntura económica de Paraguay, resaltando el dinamismo incipiente que comienza a observarse en sectores como el de la construcción, impulsado principalmente por las inversiones del sector público. Uno de los focos de su análisis fue el tipo de cambio, que si bien se mantiene relativamente estable en este momento, podría verse presionado a partir del segundo trimestre. Expuso que Paraguay muestra un comportamiento inusual en comparación con otros países, ya que mientras la tendencia internacional apunta a un dólar más bajo, localmente la moneda estadounidense subió más de 800 puntos desde finales de 2024.
“Lo llamativo es que Paraguay ha tenido un comportamiento cambiario que va a contramano del resto del mundo. Mientras que en otros países el tipo de cambio bajaba, en Paraguay subía. Vimos cómo la cotización del dólar aumentó considerablemente desde el cierre del año pasado, cuando estaba en torno a G. 7.675, hasta hoy, con un dólar cerca de G. 7.985”, expresó a la 1000 AM.
Dijo que este fenómeno se debe, en gran parte, a que las tasas de interés en Paraguay resultan hoy menos atractivas que las de EE. UU., lo que impulsa a los agentes económicos a convertir guaraníes en dólares. Agregó que esta dinámica obligó al Banco Central del Paraguay a intervenir con fuerza para evitar una depreciación excesiva de la moneda local.
Con una mayor concentración de dólares prevista para el segundo semestre del año, el comportamiento del tipo de cambio será clave para evaluar la estabilidad macroeconómica y la efectividad de las políticas monetarias aplicadas, remarcó.
Abordó la evolución reciente de la inflación. En mayo, se registraron subas en productos cárnicos, aunque fueron contrarrestadas por bajas en rubros hortícolas y tubérculos, cuyos precios habían aumentado a inicios de año por escasez.
Sin embargo, la percepción ciudadana sobre la inflación muchas veces no coincide con los datos oficiales, lo cual genera una brecha de entendimiento sobre la situación real de los precios. Habló sobre el potencial que podría tener la escalada del conflicto entre Israel e Irán en los precios internacionales del petróleo. “Una suba del crudo en el mercado global podría trasladarse rápidamente al consumidor paraguayo, generando presión adicional sobre la inflación local y encareciendo los costos logísticos en distintos sectores de la economía”, dijo.