El Indicador Mensual de la Actividad Eco­nómica del Paraguay (IMAEP) registró un creci­miento de 3,3 % en abril, en comparación con el mismo mes del año anterior. En cuanto al acumulado, se observó un crecimiento del 4,9 % al cierre del primer cua­trimestre de 2025, informó el Banco Central del Paraguay (BCP).

La banca matriz atribuye los resultados positivos a los ser­vicios, las manufacturas, la generación de energía eléc­trica y la construcción. Sin embargo, el resultado inte­ranual negativo de la agricul­tura y la ganadería atenuó el dinamismo favorable de la actividad económica.

Según explicaron, en el buen desempeño de los servicios, tuvieron una incidencia inte­ranual positiva los servicios de intermediación financiera, la actividad comercial, servi­cios a los hogares, transpor­tes, servicios inmobiliarios, restaurantes y hoteles, tele­comunicaciones y servicios de información y servicios a las empresas. Sin embargo, mostraron resultados nega­tivos los servicios guberna­mentales.

Dentro de las manufacturas, las actividades que incidie­ron positivamente fueron la producción de aceites, moli­nerías y panaderías, azúcar, bebidas y tabacos, químicos, textiles y prendas de vestir, cueros y calzados, papel y productos del papel, mine­rales no metálicos, metales comunes, productos metáli­cos y maquinarias y equipos. No obstante, estos resultados favorables fueron atenuados por las variaciones negativas en la producción de carnes, lácteos y maderas.

Asimismo, el documento explicó que la generación de energía eléctrica de las bina­cionales presentó un creci­miento interanual positivo en el mes de abril; la distribución de energía eléctrica verificó nuevamente un desenvolvi­miento favorable.

Por su parte, la construc­ción mostró un aumento interanual explicado por el mayor ritmo en la ejecución de las obras tanto privadas como públicas.

En contrapartida, la agri­cultura, conforme a las últimas estimaciones de la zafra 2024/2025, regis­tró una caída interanual en marzo. Esto se debe princi­palmente por el menor nivel de producción de soja, que fue afectada por la sequía.

En cuanto a la ganadería, se observó un comporta­miento interanual nega­tivo, debido al menor nivel de faenamiento de vacunos, aves y también por la caída en la producción de leche cruda y de huevos. La baja cantidad de faenamiento se debe principalmente a las inundaciones en el Chaco que imposibilitaron trasla­dar a los animales a los fri­goríficos.

Sin embargo, este resultado fue atenuado por el mayor faenamiento de cerdos, que cada día gana terreno a nivel internacional. Finalmente, el IMAEP sin agricultura ni binacionales, registró un crecimiento interanual de 3,8 % y, con este resultado, acumula un crecimiento de 6,1 % en lo que va del año.