Desde la Cámara Paraguaya de la Primera Vivienda (Caprivi) afirman que en Paraguay el déficit habitacional es superior al millón de viviendas por lo que piden trabajar para poder reducirla. Indicaron que una de las estrategias que contribuiría a reducir la brecha sería la flexibilización de créditos orientados al segmento de primera vivienda. Enrique Arrúa, actual tesorero de la Caprivi, habló acerca de la realidad habitacional del Paraguay y compartió que pese a los proyectos desarrollados, el país sigue sin poder incluso cubrir las nuevas necesidades de vivienda anual que se generan.

Explicó que el déficit habitacional del país es superior al millón de viviendas mientras que año tras año se precisan de otras 8.000, ampliando la brecha ya existente, lo que evidencia una batalla prácticamente perdida por el Estado, debido a que hoy existe una capacidad de financiar 4.000 viviendas por año. El escenario es bastante desafiante para todos los actores de este sector por lo que consideran importante empezar a encarar nuevas estrategias a fin de lograr generar un enfrentamiento equilibrado. Arrúa indicó que la flexibilización del crédito de la primera vivienda es fundamental para empezar a al menos cubrir las 8.000 nuevas viviendas que se necesitan por año.

Aseguró que de 100 carpetas de solicitud de créditos para vivienda presentadas en los bancos, al menos 90 son rechazadas de forma directa, mientras que solo 10 podrían iniciar el proceso de análisis. “No tienen la visión sobre la primera vivienda, tienen que tener en cuenta otras variables. Si uno está pagando un alquiler desde hace 3 años, puede pagar su casa”, aseguró. A su criterio, se debe tener en cuenta la realidad del país, en donde existe un amplio porcentaje de personas que si bien no tienen altos ingresos debería tener la posibilidad de acceder a créditos de vivienda. “Necesitamos que desde el gobierno se articulen medios necesarios para que más gente pueda acceder al financiamiento para la vivienda”, añadió.

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Indicó que existen dudas sobre lo que podría ser el financiamiento para las nuevas viviendas de hoy en adelante, específicamente, respecto a la disponibilidad de los fondos. La Agencia Financiera de Desarrollo (AFD) lleva financiando una media de 4.000 viviendas año, por lo que buscan una reunión con las nuevas autoridades a fin de determinar cuáles son los números para estos próximos años, cómo también, si existen esos fondos.

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