Ciudad del Este. Agencia Regional.

El sábado pasado se abrió al público el Centro Interpretativo del Circuito Vivencial Mundo Guaraní ubicado en la zona de influencia del Lago Yguazú en el distrito del mismo nombre. En su día de apertura recibió a 32 visitantes, según Kazonuri Sato, presidente de la Asociación de Turismo Sustentable de Yguazú (Asystur), organización responsable de su administración. Está habilitado de jueves a domingos, de 10:00 a 16:00, y los gestores están considerado la posibilidad de abrir también los feriados, con el objetivo de ser una opción para esos días. Las tarifas de ingreso para los nacionales oscilan entre 8 y 25 mil guaraníes.

El Circuito Vivencial del Mundo Guaraní está ubicado en una parte de los últimos remanentes del Bosque Atlántico del Alto Paraná, en el Área Silvestre Protegida de la Reserva Natural Yguazú, propiedad de la Ande, en el distrito del mismo nombre, del Alto Paraná. El complejo consta de un sendero de 800 metros por ese bosque, con lugares de descanso en el trayecto para luego llegar al edificio donde funciona la Museografía, sala de exhibiciones audiovisuales y áreas para ferias de los nativos guaraní y un espacio para un futuro patio de comidas.

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Un sendero de 800 metros en medio de restos del Bosque Atlántico es uno de sus atractivos. Foto: Dolly Galeano.

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El edificio tiene 1.400 metros cuadrados dentro de un área de intervención de 16 hectáreas dentro de la reserva de la Ande, que cuenta con una vista al Lago Yguazú y dispone de un puerto flotante para eventuales circuitos turísticos fluviales que están siendo proyectados para más adelante, según Kazouri Sato.

Tres nativos de la comunidad Remanso Toro, muy cercana al Centro de Interpretación, son los guías en el Circuito Vivencial Mundo Guaraní, y para ello fueron capacitados. Ellos son contratados por la Asystur y “con eso se visibiliza la verdadera inclusión social de la que tanto se habla, haciendo que los pueblos originarios sean el centro de este lugar”, dijo la titular de la Senatur, Sofía Montiel de Afara, durante la inauguración de la Museografía el pasado 2 de diciembre.

“La obra transmite la cultura ancestral de los pueblos originarios que habitaron y habitan la región oriental del país, que nos permite poder conectarnos en medio de una reserva natural a través de una simbiosis lograda, mostrando la riqueza de nuestra cultura guaraní en absoluta conexión con la cultura japonesa”, señaló la ministra de Turismo. El distrito Yguazú se formó con la presencia de inmigrantes japoneses y cuya población sigue siendo determinante.

El lugar cuenta con sala de exhibiciones audiovisuales y áreas para ferias de los nativos guaraní y un espacio para un futuro patio de comidas. Foto: Dolly Galeano.

Construcción por etapas

La obra nació como concepto en el 2012, la construcción se inició en el 2017 y la infraestructura edilicia fue inaugurada en julio del 2019 para finalizar con la museografía, habilitada desde el sábado último. Las obras civiles costaron 10 mil millones de guaraníes y la museografía más de 2,5 millones de dólares, según Montiel. La misma destacó que se trata de una política de Estado, ya que pasaron los gobiernos y la obra tuvo continuidad igual. El diseño arquitectónico estuvo a cargo de un consorcio de arquitectos liderado por el italiano Ettore Piras.

“Se logró una mancomunidad entre todos los municipios que forman parte de la multisectorial entre las poblaciones que lindan con el río Yguazú y cada una de ellas irá viendo el beneficio de este atractivo que abre sus puertas al público nacional, y estimamos que en corto tiempo los turistas del exterior podrán visitar el Mundo Guaraní”, expresó la titular de la Senatur.

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