- Caracas, Venezuela. AFP.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y su principal rival en las presidenciales del domingo, Edmundo González Urrutia, cerraron sus campañas en medio de advertencias del mandatario sobre un “baño de sangre” si pierde y fuerte presión internacional por elecciones transparentes.
Empuñando un sable del prócer Simón Bolívar, Maduro encabezó un primer acto en Maracaibo, capital del petrolero estado Zulia (oeste) y muy golpeado por la crisis que ha acompañado sus casi 12 años en el poder, donde prometió una “victoria por paliza”. González Urrutia puso broche final a su campaña con una concentración en Las Mercedes, un barrio acomodado en el sureste de Caracas.
El diplomático de 74 años estuvo acompañado, como es habitual, por la exdiputada María Corina Machado, originalmente candidata de la alianza opositora Plataforma Unitaria, pero vetada por una inhabilitación administrativa. “Nosotros no venimos a perseguir a nadie”, dijo el opositor en una rueda de prensa con corresponsales extranjeros, en la que aseveró que buscará un gobierno de unidad si sale airoso en las urnas y negó una cuzada contra el chavismo.
ADVERTENCIA DE EE. UU.
Estados Unidos advirtió que “cualquier represión política y la violencia es inaceptable”, según John Kirby, portavoz de Seguridad Nacional, quien dijo esperar que las votaciones “reflejen la voluntad y las aspiraciones del pueblo”. Recientes declaraciones de Maduro sobre “un baño de sangre” en caso de triunfo opositor despertaron preocupación en América Latina.