Montevideo, Uruguay. AFP.

Las autoridades uru­guayas comenzaron este martes a vacu­nar contra el covid-19, con dosis de Pfizer, a tripulantes de barcos pesqueros extran­jeros que están atracados en el puerto de Montevideo. “Es una acción humanitaria y un gesto de solidaridad para tri­pulantes de barcos pesqueros extranjeros que están ope­rando en aguas territoriales nacionales”, dijo el minis­tro de Salud, Daniel Salinas, en rueda de prensa tras una recorrida por el vacunatorio móvil instalado en la termi­nal de pasajeros del puerto capitalino.

En esta primera jornada serán inoculados 246 trabajadores de buques que están en Uru­guay por una estadía prolon­gada, de al menos un par de meses, con lo cual podrán recibir las dos dosis del inmu­nizante del laboratorio esta­dounidense.

Los tripulantes, naciona­les de países como Noruega, Vietnam, Corea, Filipinas, China e Indonesia, bajan de las embarcaciones y viajan en lancha hasta el vacuna­torio sin romper su burbuja para evitar posibles conta­gios. El proceso total de ino­culación abarcará a unos 900 trabajadores que accedieron a vacunarse, indicó Salinas. “Es un signo de humanidad más que da Uruguay a estas poblaciones que corren riesgo, que deben estar embarcadas durante varios días y no tie­nen tanta asistencia”, dijo el ministro.

El país de 3,5 millones de habi­tantes cuenta con el 76% de su población inoculada con al menos una dosis contra el covid-19, mientras que el 71% tiene el esquema completo. Las autoridades sanitarias aprobaron incluso una dosis de refuerzo de Pfizer para todos los que recibieron dos inyecciones de Coronavac, del laboratorio chino Sinovac. Más de medio millón de perso­nas –el 16% de la población– ya recibió su tercera dosis.

Los altos índices de inmuniza­ción han provocado un relativo control de la pandemia, con una abrupta caída de los con­tagios, muertes e internaciones en terapia intensiva por covid desde junio. Uruguay encadenó el lunes su cuarto día conse­cutivo sin registro de falleci­mientos con diagnóstico de SARS CoV2. Desde el inicio de la pandemia, acumula 6.034 defunciones y 385.780 casos del nuevo coronavirus.

El Congreso de Guatemala bloqueó nuevamente las medidas del presidente Alejandro Giammattei para contener la expansión del covid-19, al derogar un decreto de estado de calamidad que restringía la libre circulación y que según la oposición carece de transparencia en la compra de insumos.

“Con 81 votos a favor, 69 en contra y 10 ausentes quedó improbado (derogado) el estado de calamidad”, dijo el secretario del Legislativo al leer el resul­tado del tablero electrónico la noche del lunes. Es el segundo revés en 22 días para las políticas de Giammattei en la lucha con­tra el virus. Un estado de calamidad decretado el 13 de agosto fue derogado por el Parlamento once días después, citando razones similares. En el nuevo decreto, del 2 de setiembre, el mandatario había ordenado por un mes el estado de calamidad con el obje­tivo de frenar el incremento de casos y muertos.