Al menos 26 policías resultaron heridos este lunes por el lanzamiento de cohetes pirotécnicos por parte de estudiantes de la escuela de maestros Ayotzinapa que protestaban frente al palacio presidencial, en Ciudad de México, por la desaparición de 43 alumnos de esa institución en 2014. La Secretaría de Seguridad Ciudadana de la capital dijo en un comunicado que los policías resultaron heridos por esquirlas de los cohetones.

Paramédicos atendieron a 26 uniformados que presentaban heridas en su mayoría en las piernas, los brazos y los glúteos. Todos fueron trasladados a distintos hospitales para que reciban la atención médica especializada que requieren”, dijo.

La dependencia añadió que los manifestantes se retiraron del lugar tras la manifestación. Imágenes de la prensa mexicana muestran a los manifestantes lanzando cohetes pirotécnicos a una de las puertas del palacio presidencial mientras policías con equipo antimotines intentan protegerse.

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La manifestación ocurrió luego de que ocho militares presuntamente implicados en la desaparición de 43 estudiantes de esa escuela del estado de Guerrero (sur) en 2014 salieran de prisión para seguir su proceso en libertad. A inicios de marzo, un grupo de manifestantes de Ayotzinapa irrumpió por la fuerza en la sede presidencial para exigir justicia por la desaparición de los estudiantes.

Ese día, los manifestantes derribaron una puerta del palacio con una camioneta para después ingresar al mostrador donde se registran los visitantes mientras el presidente Andrés Manuel López Obrador ofrecía su habitual rueda de prensa matutina. Los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecieron entre la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre de 2014. Solo fueron identificados restos de tres de ellos.

La pesquisa del anterior gobierno (2012-2018) -conocida como “verdad histórica”- apuntaba a que fueron detenidos por policías municipales en colusión con narcotraficantes del cártel Guerreros Unidos que los confundieron con enemigos.

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Tras asesinarlos los incineraron y arrojaron las cenizas a un río, según esa versión, rechazada por las familias y expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que investigaron el caso. Una vez asumió el poder en 2018, López Obrador creó la Comisión para la Verdad (COVAJ) a fin de realizar una nueva pesquisa.

En ese marco, la Fiscalía ordenó el arresto de 132 personas, incluidos 14 militares y el exfiscal general Jesús Murillo Karam, responsable de la “verdad histórica”, quien fue trasladado a prisión domiciliaria a mediados de abril. La COVAJ aseguró en octubre pasado que el Ejército estuvo al tanto del secuestro y la desaparición, y reiteró que fue un “crimen de Estado”.

Fuente: AFP

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