La sesión inaugural de la Convención Constitucional de Chile fue suspendida temporalmente este domingo luego de que un grupo de constituyentes, activistas en las protestas sociales de 2019, interrumpieron la ceremonia acusando “represión” de la policía que se enfrentaba a un grupo minoritario de personas afuera del excongreso de Santiago.
“Queremos hacer una fiesta de la democracia y no un problema, vamos a suspender la sesión por breves minutos”, afirmó la relatora del Tribunal Calificador de Elecciones, Carmen Gloria Valladares. Un grupo de los 155 constituyentes -que deben juramentar en la jornada histórica para este país-, salieron a la calle a exigir que las fuerzas especiales se retiraran de esa zona del centro de la capital.
Lea también: Chile se dispone a escribir su primera Constitución inclusiva
Tras una larga crisis de deslegitimidad de sus instituciones y políticos, Chile abre este domingo el proceso para escribir una nueva Constitución, la primera mediante un proceso inclusivo y democrático, un experimento social que empieza con la esperanza en alto.
El inédito proceso no sólo representa una oportunidad histórica para salir de una dura crisis social, también pretende enterrar la Constitución redactada durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y que es señalada como la base de un Estado ausente, “subsidiario” del sector privado en un marco de una economía ultraliberal, y promotor de desigualdad.
Fuente: AFP.