El gobierno italiano introdujo más restricciones en varias regiones, incluida Lombardía (norte), como parte de la lucha contra el COVID-19, levantando al mismo tiempo casi todas las restricciones en Cerdeña, según un portavoz del Ministerio de Salud.

Las 20 regiones italianas se dividen en zonas amarillas (riesgo moderado), naranjas (riesgo medio) y rojas (riesgo alto). Por primera vez, una región, Cerdeña, pasa a ser zona blanca, donde se levantan la gran mayoría de las restricciones, excepto las de llevar mascarilla en cualquier circunstancia y el distanciamiento social.

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Durante tres semanas consecutivas, Cerdeña ha registrado menos de 50 nuevos casos de COVID-19 por cada 100.000 habitantes, el principal criterio para pasar a la zona blanca, donde los restaurantes también abren por la noche y los cines, teatros, gimnasios y piscinas también pueden reabrir.

Sin embargo, ante el recrudecimiento de nuevos casos y de nuevas variantes más contagiosas en el resto de Italia, Cerdeña ha decidido abrir sus actividades con cautela, “bajo vigilancia”, dijo el responsable sanitario sardo Mario Nieddu a la agencia AGI.

Se está celebrando una reunión entre las autoridades sardas, el Ministerio de Sanidad y el Instituto Superior de Sanidad (ISS) para definir las modalidades de este paso a la zona blanca, que será válido a partir del lunes 1 de marzo.

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Ese mismo día, Lombardía, pulmón económico de Italia, pasará, junto con el Piamonte y las Marcas, del amarillo al naranja. Italia ha registrado casi 100.000 muertes desde el inicio de la pandemia y su economía se ha hundido, con la peor recesión desde la Segunda Guerra Mundial.

Fuente: AFP.

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