Este martes, se confirmó el fallecimiento de un niño de 1 año y seis meses de nacionalidad paraguaya, que quedó bajo resguardo de autoridades de Brasil, luego de que su padres fueron detenidos con un cargamento de drogas. La tía denunció que le entregaron a su sobrino en una bolsa negra y sin órganos.

La familia de escasos recursos decidió ir al vecino país para que el pequeño pueda acceder a un tratamiento ya que sufría de crisis de epilepsias. Con lo poco que tenían fueron hasta Ciudad del Este y ahí un hombre les ofreció ayuda para llegar hasta Brasil totalmente gratis. Sin embargo, por el camino el conductor chocó y la policía encontró droga oculta en la camioneta.

Tanto los padres como el conductor fueron detenidos y llevados hasta una prisión de la ciudad de Cascabel por presunto tráfico de drogas, mientras que el niño de un año y su hermana de 5 años fueron llevados hasta un hogar, quedando bajo guarda judicial mientras sus padres eran sometidos a la justicia.

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El viernes 20 de setiembre, la madre Jésica Frutos, fue liberada y fue hasta la casa donde estaban sus hijos para recuperarlos, pero le negaron y solo pudo verlos, grabó un vídeo en el que se ve a los hermanos jugando con buen estado de salud. El domingo, le dieron la noticia de que su hijo falleció y recién ayer le entregaron el cuerpo.

“Es una injusticia lo que nos hicieron. Me entregaron en una bolsa negra y sin sus órganos, porque supuestamente una jueza ordenó que se los retirara para una autopsia, pero jamás llegaron los papeles. Solo queremos justicia por mi sobrino”, confirmó la tía del bebé, en entrevista con la 1080 AM.

Explicó que le dijeron a su hermana que gestione desde Paraguay la solicitud de deportación del niño. “Nos prometieron que los iban a cuidar y que le iban a dar su medicación como había indicado su madre. A mí desde la casa hogar nunca nos llamaron e hicimos de todo para intentar contactar con ellos”, puntualizó.

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Con experiencias, buena preparación, se enfoca en Hawái, en la mayor competencia internacional de la disciplina.

Los grandes éxitos se alcanzan con el compromiso, la buena preparación, la disciplina, la consistencia, más la motivación. Así lo hizo el triatleta Alfredo Ramírez Pinho, quien emocionó a todo Paraguay con su victoria en el Ironman de Wisconsin, Estados Unidos, hace 15 días. Ahora, tras recuperar sus energías, ya se prepara para el próximo gran desafío, el Mundial de Hawái, en donde se presentará para ganar llevando la tricolor bandera. El oriundo de Ybycuí, departamento de Paraguarí, el futbolista convertido a atleta de resistencia, conversó con Versus Arena de Nación Media y contó las exigencias de las pruebas, su día a día compaginando trabajo, entrenamiento, familia y sus grandes sueños.

El atleta guaraní contó que la carrera de Wisconsin fue especial y tenía que ganarla por varios motivos. “Llegó mi tercer hijo, el sábado anterior a la prueba le dieron el alta y al día siguiente fui a competir con el empuje de él”, contó Alfredo Ramírez. ”Fue una carrera A para mí, tenía que ganar. Tuve una preparación intensa. Para ganarla tuve que empujar mi cuerpo y mente al máximo nivel. Antes de la carrera me sentí muy confiado, aunque cualquier cosa puede pasar durante la competencia, pero controlé la carrera muy temprano. La prueba de bicicleta fue la más dura, paré 5 veces, porque se cayó mi nutrición, y ese tiempo suma, pero igual fui segundo en el circuito, en donde tengo el actual récord del maratón 2019. Toda la corrida tuve bien controlada, reservando energías en caso de que tenía que empujar en el último tramo y controlé hasta el punto final. La emoción que tuve cuando agarré la bandera paraguaya y estar en la pantalla, ante las cámaras, fue única”, sintetizó el atleta.

“Mi vida es muy difícil. Para mí es complicado terminar un entrenamiento diario, porque trabajo 45 a 50 horas por semana. Soy asistente cirujano en un sanatorio de oftalmología. Me tengo que acostar a las 20:00 para poder despertarme temprano, a las 4, entrenar dos horas antes de irme al trabajo. Mi señora lleva a los chicos a la guardería. Si salgo primero del trabajo retiro a los chicos, preparo la cena y realizo mi segunda sesión de entrenamiento”, contó Alfredo, quien valora el apoyo para mantener un ritmo tan exigente. “Mi esposa, su familia, la mía, los amigos siempre me soportan. Mi preparación de tiempo completo no es posible, por lo que tengo que mejorar bastante. Es difícil por mi trabajo, pero es la vida que escogí. Todo es posible si está comprometido con el deporte, solo tenés que tener disciplina y consistencia”, tiró seguro el triatleta.

“Tenía un entrenador profesional con quien trabajé por 4 años, luego me independicé. Ahora hago todos los planes solo y tengo además 20 atletas a quienes ayudo a prepararse. En cuando a mi dieta, no como afuera. Preparo todo lo que como. Mi entrenamiento es extremo, siempre se tiene hambre y hay que comer y comer. Hay día que debo levantarme a la medianoche del hambre para comer, porque el cuerpo necesita más caloría. Por supuesto que no salgo, no consumo bebidas alcohólicas. Me dedicación es 100 % al deporte, porque tengo que ser ejemplo de mis atletas, la comunidad y Paraguay”, se motiva.

Encarar una preparación tan exigente sin la ayuda real es casi imposible, pero Alfredo se ingenia para seguir adelante, nada lo detiene, siempre da más.”Recibo mensaje de todo el mundo, y el apoyo de triatletas de Paraguay como la señora Carmen Castillo, quien me ayuda en cualquier necesidad, ella es una de las mejores que conozco y Belén Valdovinos, que vive en Texas, entre otras personas, pero nada del Comité Olímpico Paraguayo hasta el momento, pero puede darse más adelante”, confesó.

“El próximo desafío para mí es el Campeonato Mundial de Hawái, el 26 de octubre, la competencia internacional más importante. Ahora estoy recuperándome para estar óptimo en la carrera. Estuve allí en varias ocasiones, pero hora sé el secreto de cómo entrenar y cómo llegar y representar a nuestro país lo más alto posible. Mi meta para esta carrera es ganar en la categoría de mi edad o el general. Yo creo que puedo”, confío Ramírez. Después de Hawái quiere tomar su carta profesional, para competir profesionalmente llevando la bandera tricolor y eso sería para el 2025.

“Cada disciplina tiene su dolor, pero el dolor es temporal. Usualmente la natación es el 80 %, pero el más difícil son los 10 últimos kilómetros de la maratón, te vas avanzando paso a paso”, explicó Alfredo sobre las dificultades que se encuentran en una competencia extrema.”No tengan miedo de explorar cosas nuevas, no necesariamente triatlón, y uno nunca sabe, qué puede hacer el cuerpo. Quiero agradecer a la gente que me envío mensaje de apoyo. Siempre estaré representando a Paraguay”, destacó el triatleta ybycuiense.

• Por Karina Ríos
• karina.rios@nacionmedia.com

Hace 14 años, el com­patriota Ernesto Estigarribia Mussi se embarcó hacia Estados Unidos para iniciar su carrera musical, pero con el anhelo de ser direc­tor de orquesta. Actualmente, dirige dos de las orquestas más importantes del país nortea­mericano y con frecuencia visita Paraguay para dar con­ciertos y talleres.

En entrevista con La Nación/Nación Media, Ernesto, de 33 años, explicó que desde que tiene uso de razón la música lo acompañó y lo motivó para seguir una carrera musical. Hoy reside en Estados Unidos, pero aclara que todos los días escucha música paraguaya para no olvidar sus raíces. Estudió en el Pittsburg State University en Kansas y viajó becado a través del programa Paraguay-Kan­sas. Posteriormente, se instaló en el University of Minnesota para realizar sus estudios de posgrado mediante una beca y tras concluir se convirtió en doctor de Musical Arts.

“La música es una vida en bús­queda de la belleza y la verdad”, dijo Estigarribia y reveló que en noviembre dirigirá nue­vamente un concierto de la película de Harry Potter, con orquesta en vivo. Además, va a reencontrarse con dos obras magníficas como “Mesías” de Handel y “Réquiem” de Mozart. “La música, ya que transcurre en el tiempo, es imposible de ser replicada, por lo tanto solo ocurre una vez, por eso la música paraguaya está siempre presente en mi vida. Tengo la dicha de ir a Paraguay varias veces al año, para traba­jar con las principales orques­tas y visito orquestas estudian­tiles para trabajar con músicos jóvenes en formación”, expresó.

El joven indicó que en su fami­lia la música es fundamental, por lo que no puede determi­nar en qué momento empezó su pasión. “Tal vez fue cuando escuché las canciones de cuna en la voz de mi mamá, o la primera vez que escuché la Novena de Beethoven o Eine Kleine Nachtmusik de Mozart en algún CD. La música siem­pre fue parte integral de mi vida”, refirió. Ernesto expresó que su virtud principal es saber socializar con las personas y también demostrar su amor por la música. “Siempre tuve el anhelo de liderar al hacer música. Me apasiona el arte de hacer música y el arte de socia­lizar con las personas. Dirigir orquestas me brinda la oportu­nidad de combinar ambas cosas al mismo tiempo”, resaltó.

“Pienso que cuanto más grande es la isla del conocimiento más larga es la ribera de la ignoran­cia. Esta es una vida inmersa en la búsqueda de la belleza y la verdad”, manifestó. Agregó que por eso busca una constante capacitación y ayudar a aquellas personas que como él viven del arte. Ernesto actualmente es director titular de dos orques­tas profesionales: la Sheboygan Symphony Orchestra en Wis­consin y la Mankato Symphony Orchestra en Minnesota. “Al mismo tiempo soy director de orquesta y profesor de dirección orquestal en Vanderbilt Univer­sity en Nashville, Tennessee”, puntualizó.

Instó a los jóvenes a prepararse si sueñan con estudiar en el exterior mediante una beca. “Aprender idiomas es suma­mente importante, no sola­mente para poder desenvol­verse en el exterior, sino para poder absorber cultura en otros idiomas, en formato de libros, ópera, canciones, filmes, pod­cast, etc. Viajar y tener expe­riencia en otro país, en otra cultura, enriquece la vida de uno, hace que nuestro mundo sea más grande”, detalló a La Nación.

Así también, Ernesto invitó a participar de un concierto orquestal y a disfrutarlo con los ojos cerrados. “Si nunca han tenido la oportunidad de pre­senciar un concierto orquestal en vivo ¡vayan! Hay muy buenas orquestas en nuestro país. No se requiere conocimiento previo o de vestirse de traje. Tan solo se requiere percibir el sonido y dejar que la mente vaya a luga­res inimaginables”, concluyó.

Llega una emocionante edición más de la Mar­cha Criolla que sacu­dirá el corazón del Chaco paraguayo, desde este jue­ves 8 hasta el domingo 11 de agosto, en Loma Plata, depar­tamento de Boquerón. Se trata de una competencia que pondrá en escena la docilidad y resistencia de los caballos de la raza criolla.

La actividad es organizada por la Ganadera Sofía y Cha­jha, ya por su quinta edición en este 2024, a ser realizada en el predio de Expo Rodeo Trebol, de donde partirán los competidores a las 5:00 para adentrarse al circuito de 40 km diarios de tierra en el ecosistema chaqueño. La carrera contempla un total de 160 km en 4 días; son 40 km cada jornada, 20 km ida y otros 20 km a la vuelta a trote durante los 3 primeros días y ya en la última jornada los competidores vuelven a carrera de velocidad para definir al mejor.

La marcha criolla ya es con­siderada un ícono para la zona, muy esperada por los propietarios de los caballos de la región, por los colonos y otros productores de diversos puntos del país que se apues­tan hasta el árido Chaco para ser parte de la competencia. Hasta el martes último ya estaban inscriptos al menos 25 caballos criollos para la competencia, que junto con sus jinetes pujarán por ser los primeros en culminar 160 km de carrera. Los cuatro mejo­res competidores se alzarán con interesantes premios en efectivo así como insumos ali­menticios para los animales. La inscripción es hasta este miércoles con las ganaderas.

Como cada año la compe­tencia va evolucionando en cantidad y calidad de parti­cipantes, los organizadores pretenden además incenti­var la cultura del caballo en los más pequeños, para lo cual preparan también una competencia especial para los más chicos. Esta actividad se realizará luego de la carrera de la marcha, los días sábado 10 y domingo 11 en el mismo predio. Los niños tendrán la oportunidad de participar en pruebas de lazo en equino con ovejas, lazo en vaca mecánica, el aguatero, del dormido y la prueba de los tambores.

En el marco de la marcha, como cada año se realizará también el Gran Remate de Caballos Criollos de la Gana­dera, el día lunes 12 de agosto a las 19:00. El remate es una oportunidad para acceder a ejemplares de los mejores linajes, muchos de padres campeones incluso.

Estarán en remate 25 caba­llos castrados, 1 padrillo y 18 yeguas de las estancias Ka’avy Porã, Sofía y San Fran­cisco.

El objetivo del remate es poner a disposición los caba­llos como una herramienta de trabajo para la ganade­ría, demostrando desde la marcha las destrezas, doci­lidad, resistencia y man­sedumbre de la raza, apta igualmente para las com­petencias ecuestres.