El empresario Cristian Turrini fue condenado a 20 años de prisión tras ser hallado culpable por los delitos de narcotráfico y asociación criminal en la causa que investigó la importante carga de cocaína, 2.331 kilos, hallada en bolsas de carbón vegetal en el Puerto Terport, Villeta, en octubre del 2020.
El tribunal de sentencia que juzgó al acusado está integrado por los jueces Víctor Alfieri, Alba González y Dina Marchuk.
El pasado 17 de octubre, la fiscal de la Unidad Antidrogas, Elva Cáceres, solicitó 15 años de cárcel para el exdirector de TV Pública, Turrini, luego de sostener la acusación por los delitos de tenencia, tráfico internacional de sustancias estupefacientes y asociación criminal.
Te puede interesar: Temporal: dos militares desaparecidos, inundaciones y daños materiales
De acuerdo al Ministerio Público, durante la audiencia oral se han producido varias pruebas que ratifican la acusación, como por ejemplo la intercepción de comunicaciones, que luego fueron acreditadas con declaraciones testimoniales de los agentes involucrados, extracción de datos de celulares y otros.
Para la Fiscalía, Turrini formaba parte de una red que traficaba cocaína, mimetizando la sustancia estupefaciente en paquetes de carbón vegetal.
En la misma causa están procesados Marcos Julián Mercado Gómez, Andrés Mauricio Fernández Acevedo y Ricardo Ariel Aquino, presuntos implicados en el esquema.
Leé también: Asesinan a menor de 15 años en aparente ajuste de cuentas
Dejanos tu comentario
Condenan a dos personas a 10 años de cárcel por robar un camión Scania
Un tribunal de sentencia condenó a 10 años de cárcel a dos personas luego de ser encontrados culpables por robo agravado. Los condenados son Jorge Pavón Cohene y Cristhian Jara Coronel. La fiscala que probó la responsabilidad de los dos acusados fue Alejandra Vera. El colegiado sostuvo que el Ministerio Público pudo probar la responsabilidad de los dos acusados en el grave hecho registrado.
La investigación, llevada adelante por la representante del Ministerio Público, logró llegar hasta los responsables de un violento hecho ocurrido el 2 de agosto de 2021, cuando Adelio Giménez y Fernando Giménez se dirigieron a la compañía Curupicayty de la ciudad de Itá con la intención de mostrar y vender su camión Scania a un supuesto comprador. Una vez en el lugar, fueron interceptados por Pavón Cohene y Jara Coronel, quienes los redujeron con un arma de fuego, maniatando y amordazando a sus víctimas, manteniéndolas retenidas en la cabina del vehículo de gran porte.
Te puede interesar: Corte declaró asueto judicial el miércoles 16 de abril por Semana Santa
Luego fueron trasladados a otro sitio y obligados a abordar otro vehículo en compañía de personas hasta ese entonces no identificadas. Finalmente, Adelio y Fernando Giménez fueron abandonados en el Km 15, calle Quintana, de la compañía Takuara de la ciudad de Nueva Italia, y los ahora sentenciados se dieron a la fuga en el camión Scania.
Ahora la defensa de los dos condenados tiene la opción de apelar el presente fallo judicial y en caso de que sea así, un tribunal de apelación tendrá la última palabra sobre si confirma la sentencia de primera instancia o si se ordena la realización de nuevo juicio oral y púbico.
Podes leer: Aprehenden a un hombre que amenazó a su madre y la tomó del cuello, según denuncia
Dejanos tu comentario
Freddy Krueger, Peaky Blinders, El Cuartel de la Feas: las mafias narco en Ecuador
- Guayaquil, Ecuador. AFP.
Disputas a muerte y frágiles alianzas. Una explosión de bandas de curiosos nombres componen el nuevo mapa del crimen en Ecuador, un país acorralado por las mafias y ante el desafío de elegir a un presidente capaz de doblegarlas. Los Freddy Krueger provocan pesadillas en las calles, los sofisticados Peaky Blinders se disputan el dominio del golfo de Guayaquil y El Cuartel de la Feas controla las prisiones. Estos se suman a los ya famosos Choneros, Lobos y Tiguerones.
La misma violencia cambia de nombre cada tanto debido a una atomización de los grupos armados y a un cóctel perfecto que allanó el terreno de la guerra: puertos estratégicos para la salida de droga, vecindad con Colombia y Perú -los mayores productores de cocaína-, una economía dolarizada y entidades corruptas.
Y en el medio, la gente. Una comerciante extorsionada recuerda el día en que explotó una bomba en su restaurante en Guayaquil, capital económica y del crimen del país. “Decían que eran de la mafia, pedían 15.000 dólares para no matarnos”, cuenta a la AFP la mujer que mantiene su identidad bajo reserva.
Los tentáculos de las organizaciones no conocen fronteras. Se engendran en la costa del Pacífico con apoyo de carteles de México y Colombia, así como de la mafia albanesa. Luego cruzan la cordillera andina hasta ciudades como Quito, Ambato o la minera Ponce Enríquez (sur ecuatoriano), según expertos. La seguridad está en el centro de las campañas presidenciales de cara al balotaje del domingo que enfrenta al mandatario Daniel Noboa y la candidata izquierdista Luisa González.
Lea más: “Don Neto” termina pena de 40 años por crimen de agente Camarena
Sin grandes capos
En enero y febrero Ecuador registró un muerto cada hora, según cifras del ministerio del Interior. Es el inicio de año más sangriento desde que se tiene registros. “La guerra es por territorio. Ya no hay cabezas conocidas como antes, cada quien quiere su independencia”, señala bajo reserva el cabecilla de una agrupación.
Esta fragmentación dificulta el control de las bandas por parte de las autoridades. “Vemos una asociación de pequeños grupos y menos rígidos. Esto ya pasó en la Colombia de los 1990 tras la muerte de Pablo Escobar”, sostiene la experta en seguridad Carla Álvarez.
Las jerarquías empezaron a romperse en 2018, cuando se dividió una de las mayores organizaciones. La muerte en 2020 del líder de los Choneros, Jorge Luis Zambrano, alias Rasquiña, ahondó las pugnas. En Quito, Marianela recibe amenazas e intentos de extorsión por WhatsApp. “Los bloqueo”, dice bajo reserva esta empleada de un restaurante.
La angustia se instaló en el convulso barrio Martha Bucaram de la capital, donde policías y militares suelen realizar operativos en busca de armas y droga. “Acá a la vuelta hubo como dos muertos” durante una balacera, recuerda. Apenas suenan los disparos, los negocios cierran.
Lea también: Empresa de comercio electrónico expande inversiones en la región
Bandas especializadas
De los 1.300 barrios de Quito, unos 100 son considerados conflictivos. Para las mafias, la ciudad es “un mercado de consumo de drogas, como sucede en diferentes capitales latinoamericanas”, explica Carolina Andrade, secretaria de Seguridad municipal. Quito, enclavada en los Andes, también se percibe “como un espacio seguro para venir a esconderse”, pues no tiene el mismo control policial o militar de la costa.
Renato Rivera, del Observatorio Ecuatoriano de Crimen Organizado, explica que los grupos tienen ciertas especialidades. El Cuartel de las Feas, por ejemplo, opera en las prisiones con extorsiones y microtráfico. Esta banda desató enfrentamientos entre los reos por la alimentación. El preso que no pagaba la “vacuna” (extorsión), no comía, comenta. Y en el puerto de Guayaquil, los Peaky Blinders, Choneros y Tiguerones chocan por las rutas de la droga, a veces camuflada en contenedores de banano o camarón.
Fusiones
En Quito pequeñas pandillas buscan entrar a “organizaciones más grandes para tener mayor presencia, mayor legitimidad y mayor control” territorial, señala Andrade. En la cima de la pirámide criminal de la capital están los Lobos y Latin Kings. Las mafias “han ido ganando espacio, es complejo combatirlas”, admite el comandante policial de Guayaquil, Pablo Dávila.
“Los ruidos de las balas no nos dejan dormir”, dice una líder de un empobrecido barrio guayaquileño, donde solo en una tarde mataron a 22 personas. El presidente Daniel Noboa aplicó una política de mano dura contra las bandas que logró bajar el índice de homicidios de 47 por cada 100.000 habitantes en 2023 a 38 en 2024.
Pese a la caída, el centro de estudios Insight Crime sostiene que esta última tasa es la más alta de América Latina y “enmascaró” un año de violencia persistente. “La intervención militar obligó a los grupos criminales a transformarse en lugar de desaparecer”, señaló.
Dejanos tu comentario
Operativo Berilo: Corte destraba caso y juez puede fijar audiencia preliminar
La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia destrabó una vez más la causa contra el presunto líder narco Reinaldo “Cucho” Cabaña y otros acusados por supuesto narcotráfico, tras rechazar el recurso que presentó la acusada Yisela Noemí Ramírez contra la resolución que confirmó la intervención del juez Miguel Palacios en el caso.
Una vez que se fije la audiencia preliminar en la misma se tendrá que analizar si corresponde que el proceso penal se eleve a un juicio oral y público, así como lo ha solicitado el Ministerio Público en su acusación. Actualmente Cabaña guarda arresto domiciliario en una casa ubicada en la ciudad de Lambaré, a la espera de la realización de la audiencia preliminar.
Cabaña está acusado en el marco del operativo Berilo, realizado en setiembre del 2018 en varios puntos del departamento de Alto Paraná. En esa ocasión, fiscales del Ministerio público junto con agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) llevaron adelante más de 20 allanamientos en los que decomisaron 23 vehículos de alta gama, 21 kilogramos de cocaína y unos USD 800.000.
Cabaña está acusado por los hechos punibles de tráfico internacional de estupefacientes, tenencia de estupefacientes en el marco de la ley antidrogas, mientras que otros procesados fueron acusados por los hechos punibles de asociación criminal en el marco de la ley antidrogas y lavado de dinero. Hay que señalar que en la causa están investigadas otras 20 personas.
Dejanos tu comentario
Ecuador: líder narco habría ordenado asesinato de cuatro menores
- Quito, Ecuador. AFP.
Un líder de una banda narco en Ecuador fue capturado por ser el principal sospechoso del asesinato de cuatro menores en el puerto de Guayaquil, en un caso que además involucra a 16 militares, informó el ministerio de Defensa. Los tres adolescentes y un niño fueron retenidos por una patrulla militar en diciembre en esta ciudad al suroeste del país y luego se perdió su rastro. La noche de Navidad la policía halló sus cuerpos calcinados cerca de una base de la Fuerza Aérea en las afueras.
Los 16 soldados están en prisión preventiva y su defensa sostiene que los menores fueron liberados en la localidad rural de Taura, donde este lunes fue capturado por la policía un cabecilla de la banda de “Los Águilas”, identificado como “Momo”. “Momo es quien habría sido el principal implicado en la muerte y desaparición de los 4 niños de las Malvinas desde la cárcel”, señaló la cartera en un comunicado.
Lea más: El papa Francisco donó cuatro ambulancias a Ucrania
Durante la investigación, un testigo mencionó que, tras ser abandonados por los militares, un grupo criminal retuvo a Saúl Arboleda, Steven Medina y a los hermanos Josué e Ismael Arroyo. La autopsia reveló que los menores murieron a causa de un disparo en la parte posterior de la cabeza.
El hecho estremeció a Ecuador y encendió las alarmas por presuntas violaciones de derechos humanos en el contexto de la política de mano dura contra el narcotráfico que impulsa el presidente Daniel Noboa. Aún no hay condenados por este caso. Según el ministerio de Defensa, Momo salió de prisión en diciembre “gracias a un dictamen judicial a su favor” en un caso que lo involucraba como líder de una banda que robaba camiones.