Tras prestar declaración ante la Unidad Especializada de Trata de Personas y Explotación Sexual del Ministerio Público, Rolando Marciano Chilavert y su hijoIván brindaron una conferencia de prensa. Estuvieron acompañados por Rolando Félix Chilavert, hijo y hermano de ambos respectivamente, quien inicialmente había realizado la denuncia ante la fiscala Natalia Acevedo.
Rolando empezó el relato mencionandoque fue contactado por un empresario futbolístico que lerealizó una propuesta interesante para dirigir un club en Odessa, Ucrania. Tentado, decidió viajar hasta el país europeoacompañado de su hijo Iván. Ambos llegaron allí el 31 de diciembre y desde ese momento empezaron a sucederse varios episodiosque resultaron “raros” para ambos protagonistas, desde que nofue a recibirles en el aeropuerto la persona que debía hasta el lenguaje que utilizaba quien se presentó ante ellos, el empresarioespañol Fernando Martínez Vela, supuesto gerente del club.
Iván contó que fueron llevados al hotel, donde los hechos se volvieron aún más “raros”, como por ejemplo que le propusieron dirigir un club (Inter Odessa), pero al final los llevaron a otro (FC Chernomorets).
Luego le invitaron a pasar la fiestade año nuevo en un sótano, donde los comentarios de suinterlocutor, Fernando Martínez, fueron subiendo de tono. Así se inició el relato de más de una hora sobre la pesadilla que vivieron y que incluyeron excesos, supuestos abusos, absoluto descontrol y hasta la intervención del Gobierno paraguayo para repatriarlos.
Los Chilavert desmintieron lasdeclaraciones de Martínez, quien dijo que tanto Rolando como su hijo habrían inventado la historia de que habían sido “retenidos” para, de esa manera, sortear una seguradetención por parte de las autoridades ucranianas, quienes habrían recibido, siempre de acuerdo al relato de Martínez, denuncias por abuso, robo e intento de violación de parte de los compatriotas.
De acuerdo a los Chilavert, estuvieron amenazados en todo momento y en las imágenes en las que se losve fuera de sí habrían estado bajo los efectos de alguna sustancia, pues les hicieron tomar y comer de manera forzada apedido de una persona conocida como el “General”, al que señalaron como un hombre muy poderoso. El nivel de violencia al que estuvieron expuestos puede corroborarse mediante un audio divulgadohace unos días, en el que puede escucharse la fuerte amenaza de la que fue objeto la familia de parte del empresario Martínez. Los denunciantes enfatizaron varias veces que sus vidas estaban en peligro y precisaron que “fueron orinados encima” (supuesta tradición local).
Al final de la conferencia, agradecieron a quienes ayudaron a que hoy estén contando su historia. Precisaron que hablaron en guaraní con los diplomáticos paraguayos para despistar y aclararon que no tienen ninguna denuncia en su contra en Odessa. Rolando cree que fueron llevados para ser forzados a ingresar a un sistema de lavado de dinero.