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El juicio contra el exministro abdista Arnaldo Giuzzio que debía arrancar el 1 de julio pasó para la segunda mitad de octubre. El exhombre fuerte del Ejecutivo mantenía una cercana relación con el supuesto narco Marcus Vinicius Espíndola.
El exministro todopoderoso del gobierno de Mario Abdo Benítez, Arnaldo Giuzzio, tendrá tres meses más antes de afrontar el juicio por sus vínculos con el capo mafioso brasileño Espíndola Marqués. Las audiencias del juicio oral y público debían iniciarse el próximo 1 de julio, sin embargo, fueron postergadas para el 22 de octubre, confirmaron desde el Ministerio Público.
El narcotraficante brasileño Marcus Vinicius Espíndola Marqués de Padua llegó incluso a visitar al ex superministro abdista Arnaldo Giuzzio en su domicilio particular, según documentos que constan en poder de la Fiscalía. El capo mafioso le prestó vehículos y realizó trabajos como “cortesía”. En días más, el otrora hombre fuerte del Ejecutivo afrontará juicio.
Comunicaciones continuas, préstamos de un vehículo para vacacionar, trabajos de cortesía y hasta visitas a su domicilio particular. La investigación del Ministerio Público revela una muy cercana relación entre Arnaldo Giuzzio, exhombre fuerte del gobierno de Mario Abdo, y el supuesto narcotraficante brasileño Marcus Vinicius Espíndola Marqués de Padua.
De acuerdo con los documentos que constan en la acusación presentada contra Giuzzio por la Fiscalía, el entonces ministro comenzó a mantener comunicaciones con el narco brasileño en julio de 2021.
En agosto de ese mismo año, Vinicius envió noticias y enlaces sobre “inversiones empresariales realizadas en Brasil, que tanto él como el Dr. Pablo Rivas ya habían mencionado a Giuzzio, quien respondió con un escueto: “Perfecto”.
A finales de diciembre de 2021, Giuzzio solicitó a Vinicius un vehículo para uso personal durante sus vacaciones en Brasil. Vinicius coordinó la entrega del vehículo, un Kia Carnival blindado, que pertenecía a la esposa de Marqués de Padua.
Según la investigación, en enero de 2022, una vez finalizadas sus vacaciones, Giuzzio reportó de su regreso a Espíndola Marqués para coordinar la devolución del vehículo. El jefe del hampa le dijo que viaje hasta Asunción y que coordinarían luego la búsqueda del vehículo. Algo que lo hizo el mismo capo narco junto a uno de sus socios, quien lo acompañó hasta la casa particular del entonces secretario de Estado.
Gilberto Enciso Flores, quien trabajaba para las empresas de Espíndola, fue interrogado al respecto. Y relató el día que fueron a buscar el vehículo de la casa de Giuzzio.
“Luego de ahí el Dr. Arnaldo viajó a Brasil de vacaciones y volvió nuevamente el 12 de enero de 2022, donde se contacta con el Sr. Marcus para coordinar la entrega del vehículo, que fue unos días después acá en Asunción donde vinimos con el Sr. Marcus hasta la casa del Dr. Arnaldo para retirarlo, me consta que no realizó ningún pago, ni se expidió ninguna factura a nombre de Arnaldo Giuzzio porque el vehículo fue prestado desde el inicio... (sic)”, manifestó ante los fiscales del caso.
El 19 de enero de 2022, Enciso le envió una ubicación GPS a Espíndola. Los investigadores consiguieron descubrir que se trataba del domicilio particular de Giuzzio, donde consiguieron ubicar el teléfono de Espíndola ese mismo día.
LO QUE REVELAN LOS MENSAJES
En agosto de 2021, Marcus solicitó a Giuzzio que enviara una “camioneta Hyundai Santa Fe blindada” a Ciudad del Este para realizarle “cambio de suspensión, mantenimiento de blindaje y retoques de pintura”, a lo que Giuzzio respondió: “Veo”.
En octubre de 2021 continuaron las conversaciones, y Marqués de Padua envió a Giuzzio un enlace y una captura de pantalla de una noticia sobre el caso “Lava Jato”, un procedimiento en Brasil. Giuzzio respondió con un “gracias Marcus” y luego añadió: “les hablo”.
En noviembre, Vinicius se comunicó nuevamente con el entonces ministro del Interior para informarle que estaba en Asunción y que tenía muestras para pruebas balísticas de materiales para chalecos. En diciembre, Marcus hizo referencia, a través de un mensaje reenviado, a tres vehículos de las Fuerzas de Operaciones Policiales Especiales (FOPE). Además, Vinicius consultó a Giuzzio sobre la posibilidad de enviar un vehículo averiado a su empresa para revisión, ofreciendo este servicio como “cortesía” y adjuntó varias fotografías de los vehículos. En esa época, Giuzzio planeaba vacaciones en Brasil.
Otras conversaciones revelan que Vinicius mostró un video de un vehículo con logo de la Policía Nacional y otros videos donde un vehículo blindado de la Policía Nacional estaba en el mismo lugar que otros vehículos de Vinicius.
La Fiscalía sospecha que Marcus Vinicius no solo proveía servicios de reparación y blindaje a vehículos del Ministerio del Interior y de la Policía Nacional, sino que también estaba en tratativas con Giuzzio, en su rol de ministro, para la provisión de materiales a estas instituciones.
El acta de imputación menciona al comisario general y viceministro de Seguridad, Pablo René Ríos, quien, junto a Giuzzio, visitó las oficinas de Black Eagle Group SA - OMBU SA en Ciudad del Este para probar chalecos antibalas. Las pruebas de estos materiales fueron fotografiadas y compartidas por Vinicius con Ríos, con quien mantenía asiduas conversaciones desde agosto de 2021 sobre inversiones empresariales y proyectos de seguridad del Ministerio del Interior.
En noviembre de 2021, se realizó una prueba de chalecos antibalas en la empresa de Vinicius en Ciudad del Este, lo cual Vinicius agradeció y calificó de “demasiado importante”. Una fotografía de Giuzzio con el equipo de Black Eagle se incluyó en el acta de imputación, sin embargo, el proceso vuelve a dilatarse con otra chicana que posterga el juicio oral que debía iniciarse el próximo lunes 1 de julio.