Por Jimmi Peralta - Fotos: gentileza

Las historias sobre el considerado como más importante referente de la música popular de este tiempo no terminan, sino que, por el contrario, se siguen multiplicando. Ícono de una época de inconformidad juvenil, una estrella cuyo prematuro fin se ha atribuido, además de sus propios excesos, a una presunta transgresión familiar.

Si la búsqueda permanente de la misma pulsión de vida es el reconocimiento del otro, es la mirada y la aceptación del otro, en ese sentido la fama debe ser casi la sobredosis perfecta para el ego. Los 50 y el nacimiento de la televisión crearon una forma de fama y de un éxito sin antídotos. Elvis Presley, El Rey, falleció el 16 de agosto de 1977, ya en su decadencia; tenía 42 años y un cuerpo vapuleado por los excesos. A pesar de su prematura y sorpresiva partida, logró eso otro inherente a la vida: buscar trascender su propio tiempo.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Pero la fama, eso que engrandece y destruye, lo hizo trascender aún más como leyenda, reconocido por todos e inspirador de varias generaciones.

La leyenda de Elvis no solo fue una forma de resistir al olvido, sino que fue creando mundos paralelos, teorías de conspiración, mitos y certezas improbables sobre la afirmación “Elvis vive y está oculto en…”.

A 45 años de su muerte siguen germinando nuevas películas, libros, teorías de conspiración y creaciones inspiradas en Presley, quien trasciende en algunos casos como celebridad, más allá de su aporte musical por algunas generaciones no reconocidas.

Se trata de otro exponente del sueño americano que surge de la clase trabajadora de su país, se entrega a su anhelo musical, es un patriota, hace su servicio militar y llega a funcionar al más alto éxito con el surgimiento de una nueva música que sigue marcando hasta hoy.

“Elvis vive” es un deseo que marcó a una generación y que Hollywood en sinnúmero de ocasiones trató de recrear y homenajear. Sus imitadores fueron una fiebre, muchas veces un tributo casi bizarro, pero en el fondo una señal de su persistencia a pesar de su muerte.

LA VIDA

El Rey del Rock nació en la sureña localidad de Tupelo, Memphis, Tennessee, el 8 de enero de 1935. En su adolescencia le dio espacio a la práctica de la guitarra, lo que compartía con amigos y vecinos. Después llegó el canto, inspirado en parte por la música gospel afroamericana, para finalmente a los 18 años llegar a concretar su primera grabación, un disco que contenía dos canciones, “My Happiness” y “That’s when your heartaches begin”.

Su éxito de gran magnitud comienza a gestarse a mediados de los 50, cuando su rebeldía, sensualidad y talento eran condimentos irresistibles para la generación que había llegado a la juventud en el contexto de la posguerra. Su baile, su vestimenta, su maquillaje eran apuestas que podrían sumar o no, dependiendo de su capacidad interpretativa y esta no fallaba. La conquista de una juventud que buscaba nuevas experiencias, con nuevos sonidos y nuevos instrumentos eran caldo de cultivo para quien venía desde abajo y no estaba dispuesto a pasar desapercibido.

Las grabaciones en acetato, la radio y la televisión eran los brazos que permitían que esta joven figura vaya adquiriendo renombre en varios estados de Norteamérica. En esos años había conocido ya al coronel Tom Parker, una controversial figura en su vida.

UN SOLDADO

Hasta 1973 el servicio militar en EEUU seguía siendo obligatorio. En marzo de 1958 Elvis se presentó en el Fort Smith, Arkansas, para cumplir con su parte, pero lo particular de su primer día fue que periodistas, fotógrafos y curiosos se agolparon para presenciar su llegada. Durante ese tiempo falleció su madre, lo que lo devastó.

Poco tiempo después conocería a Priscilla Beaulieu, que por entonces tenía solo 14 años. Un largo noviazgo concluiría después en un matrimonio icónico.

Durante su primer año había logrado ingresar 40 temas al top ten de las listas de popularidad, entre los cuales se incluyeron “Wear My Ring Around Your Neck”, “Hard Headed Woman” y “One Night”. Al año siguiente se destacaron “A Fool Such as I” y “A Big Hunk o’ Love”. Su sello, la RCA, lanzó en ese tiempo cuatro álbumes recopilatorios de material previo grabado por el cantante.

EL CINE

En poco más de 20 años de carrera, El Rey habría producido entre 665 y 711 grabaciones musicales, y desarrollado una filmografía de 33 largometrajes.

Su primera aparición fue en “Love me Tender” (1956) y luego le siguieron “El rock de la cárcel” y “King Creole”.

En ese tiempo, Andreas Cornelis Van Kuij, su mánager, conocido como el “Coronel” Tom Parker, había concretado 7 películas para Elvis con Paramount Picture. Parker, de origen holandés, marcó el éxito del cantante, pero también lo habría forzado a declinar alguna de sus inclinaciones artísticas en procura del negocio, en donde él se llevaba no 10%, como era común en ese tiempo, sino el 50% de las ganancias del artista. Películas por sobre conciertos fue una de las decisiones tomadas, en muchos casos tres largometrajes al año.

En el cine Elvis estaba recluido en el personaje de galán y músico, lo que en algún momento fue también cuestionado por la crítica y el público. A mediados de los 70 un documental sobre su gira logró un Globo de Oro.

LOS EXCESOS

Los 70 ya recibieron a Elvis un poco más alejado de lo que fue en su primer momento de éxitos, pero el ritmo de sus presentaciones sin duda seguían marcando huellas en su cuerpo.

Aquel joven que exponía parte de su cuerpo con su ropa sensual para convocar al deseo culminaría refugiado en el consumo de sustancias –muchas de aquellas pastillas fueron prescriptas– y además tanta comida como pudiera. Al momento de su muerte, pesaba 130 kilos, padecía de múltiples dolores y aquella fama que le había sonreído ya no lograba repetirla.

Elvis, durante su encuentro con Richard Nixon.

¿AGENTE SECRETO?

El mítico Despacho Oval de la Casa Blanca de los Estados Unidos habría sido testigo, según reza la leyenda, del momento en el que Elvis Presley, reunido con el entonces presidente norteamericano Richard Nixon, le habría solicitado a este ser un agente encubierto antidrogas. Aquel encuentro es recreado después en la película “Elvis & Nixon”.

El por entonces hiperfamoso cantante llegó al edificio presidencial en diciembre de 1970 y solicitó una reunión con el presidente. Del encuentro formó parte Bud Krogh, quien luego fuera inculpado y encarcelado en el contexto del escándalo del Watergate.

El contexto de la reunión pone a dos figuras centrales en una conversación en torno a una problemática del momento: las drogas. Una cuestión que ocupaba las noticias respecto a la juventud estadounidense y el rechazo a la cultura hippie.

“Elvis & Nixon” (2016) fue protagonizada por Kevin Spacey y Michael Shannon.

En el filme, catalogada dentro del género de comedia dramática, se recrea la reunión en donde se parte de una divergencia entre ambas figuras, pero lentamente Elvis (Shannon) logra convencer al presidente de que le tome juramento como agente.

Una interminable caravana se formó para acompañar los restos de Presley.

¿DESTINADO A MORIR JOVEN?

En diciembre del 2020 se publicó el libro “Elvis. Destined to Die Young”, de Sally A. Hoedel. En el material se aborda una hipótesis que explicaría la pronta muerta de Elvis Presley, abriendo un surco explicativo que abarca los problemas de salud de su familia.

Según Hoedel, su familia (madre y tíos) padecía de problemas del corazón a consecuencia de “genes defectuosos” y estos habrían sido la causa de la muerte de sus consanguíneos antes de los 50 años.

Los excesos, el alcohol y el abuso de medicamentos explicaron hasta ahora la prematura muerte del cantante, pero ahora nace una nueva teoría.

“Elvis. Destined to Die Young” refiere que el origen de los males de salud de Presley está en la relación incestuosa de sus abuelos, quienes eran primos hermanos.

La madre de Elvis, Glady, murió en 1958 y se le atribuyó un diagnóstico de hepatitis, pero para Sally este fue un mal análisis de su condición refiriendo que fue una deficiencia de alfa-1 antitripsina, un trastorno genético que daña pulmones e hígado y conduce a otras complicaciones de salud.

La prematura muerte es la cruz de muchos de los famosos de la música, y también es un aliciente para las fabulaciones y el reafianzamiento de la leyenda.

El Rey junto con una jovencísima Priscilla y su bebé.
La que fuera la casa de Elvis es hasta ahora un muy concurrido destino turístico.

“Él es el showman por excelencia”

Emilio García.

“Tanto Elvis como los Beatles son los máximos referentes musicales que cambiaron el mundo con su inspiración y creatividad. Él es el showman por excelencia”, comenta el cantante y compositor paraguayo Emilio García, líder anteriormente de los Hobbies y actualmente voz principal de la Retroband.

“Muchos músicos siguieron su camino, como es el caso de Tom Jones, Sandro y otros, hasta hoy cantamos una ‘Sel de Rock’n Roll’, fue y seguirá siendo una explosión con su arte”, señala.

La generación que tuvo su juventud entre los 60 y 70, en los tiempos de las orquestas, tiene marcada influencia por los bailes de rock and roll y covers de Presley.

“También cantamos con Hobbies ‘Can’t Help Falling in Love’, la versión de UB40. Pero la de Elvis fue una de las baladas románticas que más repercusión alcanzó a nivel mundial”, agrega.

“Líder supremo de un estilo que él mismo inventó”

Omar Ocampo.

“Elvis es exactamente el rey del rock para mí. Líder supremo de un estilo que él mismo inventó. Uno de los grandes maestros de la música escénica. Rebelde y héroe americano, gran seguidor y defensor de la música afroamericana. Hablar de Elvis es largo, complejo y apasionante. Acudo a una frase del pensamiento fantástico colectivo ‘Elvis no murió’, comenta Omar Ocampos, voz de la banda Próceres de Mayo y fan declarado del barítono norteamericano.

“‘Todo tiempo pasado fue mejor’, reza un dicho. Elvis consolidó las bases del rock, del rock & roll, rockcabilly y catapultó el blues y gospel a la eternidad. Cantantes y grupos actuales, necesariamente, cada tanto revelan influencias claras de Elvis. Elvis sigue siendo fuente de inspiración para músicos actuales y seguirá siendo. Es el mote de ‘ícono’ de la música, reservado para pocos elegidos”, agregó el músico.

Ocampos es un fanático de la música de Presley e interpretó varias de sus canciones a lo largo de su carrera musical, fundamentalmente dentro de Próceres de Mayo, agrupación de rock and rock que marcó la escena nacional desde finales de la década de los 90.

“Todos sus temas son geniales para mí. Para citar uno diré ‘Jailhose Rock’. Esta música y particularmente el video marcaron una época, un antes y un después”, concluyó.


Déjanos tus comentarios en Voiz