Buenos Aires, Argentina. AFP.
La labor era de todo menos fácil: levantar el espíritu del equipo que probablemente protagonizó el peor tropezón de la historia del fútbol. Pero Artur Jorge no solo asumió el reto de cazar los “fantasmas” del Botafogo, en donde juegan los paraguayos Júnior Fernández y Óscar Romero, también lo llevó a su primera final de la Copa Libertadores.
No le rehúye a la vergüenza firmada en la liga de Brasil de 2023, que convirtió al once de Río de Janeiro en objeto de burlas mundiales, aunque en ocasiones el entrenador portugués parece irritado cuando algún periodista trae a colación aquel recuerdo maldito.
A pesar de que ni siquiera vivía en la Cidade Maravilhosa en ese momento, ha tenido que responder porque el Fogão perdiera el título de liga en la recta final del torneo pasado tras dilapidar una ventaja de 13 puntos con algunas remontadas inverosímiles incluidas.
“Los fantasmas existían, no tengo problemas en hablar de eso”, dijo el luso, de 52 años, en julio. “Quiero transmitir el mensaje de no mirar atrás, pero sin ignorar lo que pasó y centrándonos más en la historia que p o d e mos escribir a partir de ahora”.
Tras el 2023 de pesadilla, Artur Jorge transformó al Glorioso en una máquina ofensiva (84 goles en 52 juegos) que pelea por dos coronas, en parte gracias a los más de 70 millones de dólares que pagaron en fichajes esta temporada.
SALVAVIDAS
El sábado, en Buenos Aires, disputará contra el Atlético Mineiro de Belo Horizonte la final de la Libertadores de 2024. En el Brasileirão, que Botafogo no gana desde 1995, retomó aire al recuperar el liderato a falta de dos partidos para el final tras vencer 3-1 al campeón defensor, el Palmeiras, el martes en San Pablo y destronarlo de la punta.
De alzarse con ambos títulos habrá firmado una temporada tan histórica como inédita para el once inmortalizado por Garrincha en las décadas de 1950 y 1960.
“Vamos a trabajar para que el nombre de Botafogo pueda estar a la altura de la imagen de todos los grandes clubes del mundo”, afirmó recientemente en una entrevista al portal de la FIFA.
El modelo de juego de Artur Jorge está inspirado en el “fútbol total” eternizado por el neerlandés Johan Cruyff, en su sentido “dinámico” y “ofensivo”, y por la “verticalidad” y “velocidad” de los equipos que dirige el alemán Jürgen Klopp.
“Estas dos referencias me ayudaron a crear mi propio concepto de juego y a contextualizarlo”, dijo el portugués al canal Globo.