Se viene el super clá sico del domingo entre Olimpia y Cerro Porteño en Para Uno y es inevitable hablar de cómo llegan ambos equi­pos a esta instancia. Para el Ciclón podría ser deter­minante en su puja por el título con el puntero Liber­tad, del que se distancia en 7 puntos. Para el Fran­jeado, será el par­tido del honor más que nada, porque al haber quedado fuera de la lucha por el cetro desde hace varias fechas, se le suma que tiene muy pocas chances de pelear por el acumu­lativo.

La victoria ante Gua­raní trajo un respiro, luego de 5 fechas sin vic­torias y es por ello que ganarle a su tradicional rival será más que nada una especie de bálsamo al discreto torneo que viene disputando, de muchísima irregularidad, que lo reco­noció su propio técnico, Francisco Arce.

Para Cerro, el margen de error es mínimo, porque fuera de la rivalidad exis­tente se juega por los pun­tos, vitales para no per­derle pisada al Gumarelo.

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Si hablamos de momentos, llega mucho mejor que su clásico rival en cuanto a rendimiento y posición en la tabla, pero tendrá que demostrarlo en la cancha.

Olimpia tendrá la baja obli­gada de Jhohan Romaña, expulsado ante Guaraní, y Arce tendrá problemas para armar su defensa por­que se quedó literalmente sin laterales derechos de oficio.

En contrapartida, recu­pera a su capitán Richard Ortiz, que por lo menos estará en el banco.

En Cerro Porteño, la mejor noticia es que su arquero Jean Fer­nandes, envuelto en una polémica en la semana, sí estará disponible para ocupar la titularidad en el arco.

La mesa esta servida, se juega por la historia, el orgullo y ese plus natural de querer ganar cuando el que está enfrente es el rival acérrimo. Esta vez, en Para Uno, se escribirá una nueva historia.

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