La siempre atrayente Copa Libertadores empieza esta semana, en su 64ª edición. Nacional será el primer conjunto paraguayo en entrar en acción mañana ante el Sport Huancayo peruano. Para el 2023 la Conmebol anunció otro incentivo más, con el aumento del 23% de los premios, con respecto al año pasado. Esta es la radiografía de nuestros cuatro representantes en el torneo de clubes más prestigioso de Sudamérica.
OLIMPIA VA POR NUEVAS GLORIAS
El viejo Decano busca nuevas conquistas y la Copa Libertadores es su torneo internacional favorito. Fue campeón en tres ediciones y finalista en otras cuatro participaciones y este año buscará su octava final y el cuarto título.
Para esta temporada tuvo la fortuna de que la FIFA le abrió una ventana y pudo por lo menos contratar a cinco jugadores, aunque ahora se encuentra de nuevo inhabilitado, situación que le cortó la posibilidad de fichar a un par de refuerzos más y está expuesto a otras sanciones. Pero como lo ha demostrado en muchas ocasiones, para los franjeados no existen imposibles y el primer objetivo es pasar la fase de grupos y a partir de los octavos de final, en el mata-mata, puede pasar cualquier cosa. Además de los tres títulos, lo último que se recuerda del franjeado en la Copa Libertadores, es la hazaña de una década atrás, en el 2013, cuando el club, al borde de la bancarrota y con muchas deudas al plantel, pudo llegar a la final, ante el Atlético Mineiro, que la perdió por un resbalón del “Tanque” Juan Carlos Ferreyra.
EL AÑEJO DESEO DE GANAR LA COPA
A cualquier cerrista si le preguntan cuál sería su último deseo, la respuesta sería siempre la misma: “ganar la Copa Libertadores”. Seis veces arañó la posibilidad de llegar por lo menos a la final, pero en las seis semifinales claudicó.
A diferencia de años anteriores, este año el plantel tuvo más bajas que altas. Abandonaron el club nada menos que 14 atletas y hasta el momento solo contrató a Diego Churín y Fernando Fernández y regresó Wilder Viera. Tras la transferencia de Alexis Duarte a Rusia, el técnico Francisco Arce espera por el zaguero central para completar el plantel.
Al Ciclón le espera en la segunda fase, el cuadro chileno Curicó Unido y si gana a los trasandinos deberá cruzarse en la tercera fase, por el cupo a la fase de grupos, contra el ganador del partido entre Fortaleza de Brasil y Deportivo Maldonado de Uruguay.
CON UN PERFIL MÁS BAJO
Lejos de las contrataciones rimbombantes de temporadas pasadas, Libertad encarará el año internacional con un perfil mucho más bajo. En el 2023 no realizó ningún fichaje, todos los contratos vencidos no fueron renovados y solo se reforzó con seis retornos de jugadores pertenecientes al club y que se encontraban militando en otras entidades. La excepción fue la continuidad del arquero Martín Silva, cuyo contrato fue renovado por otra temporada. El Gumarelo espera turno para intervenir en la fase de grupos y así como Olimpia, el primer objetivo es llegar a los octavos de final y luego ver qué acontece. Integra el bombo 2 copero y ya sabe que no será rival de Internacional de Porto Alegre, Corinthians y Fluminense, tres de los equipos brasileños que siempre son protagonistas difíciles en la Copa Libertadores.
NACIONAL, POR REPETIR HAZAÑA DEL 2014
Quién no recuerda la campaña de Nac io nal en la Libertadores del 2014, c u a n d o arribó a la final, que la perdió contra el cuadro argentino de San Lorenzo de Almagro. Pero para que esa epopeya se cristalice de nuevo y La Academia cumpla una campaña similar, deben ir escalando fase por fase y el primer rival a vencer es el Huancayo peruano. El plantel de Nacional arribó ayer domingo a Lima y horas antes del compromiso de mañana irá a la ciudad de Huancayo, que se encuentra a más de 3.200 m.s.n.m.
El técnico Pedro Sarabia tuvo que armar un equipo nuevo por la ida de 14 jugadores y con 15 nuevos fichajes se apresta a iniciar el periplo internacional.
Si Nacional supera el primer filtro, en la segunda fase se cruzará con otro conjunto peruano, el Sporting Cristal de Lima.
LOS PREMIOS
Para la Libertadores 2023 la Conmebol repartirá 207.800.000 dólares. Se trata de un 23% de incremento en premios, con respecto a la Copa del año pasado.
Habrá un pago por participación y mérito deportivo y un plus para el equipo ganador, en cada partido de fase de grupos, de 300 mil dólares.