El café es una de las bebidas más populares del mundo, que en los últimos años se destaca por sus grandes propiedades que contribuyen en la salud. Varias investigaciones revelan sus de beneficios, pero también las desventajas de incorporarlo en la rutina matutina sin poner en prácticas algunas estrategias.

El café es actualmente toda una referencia en Paraguay y en el mundo, ya que según datos a nivel global, cada día se elaboran más de tres mil millones de tazas de café. Está comprobado científicamente que el consumo regular de café tiene la capacidad no solo de combatir algunas enfermedades crónicas y degenerativas, si no también de proteger la salud del hígado.

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Sin embargo, una taza de café en una rutina matutina puede impactar en la digestión, el estrés y el equilibrio hormonal, por lo que es necesario aplicar ciertos trucos previos para convertirlo en un hábito efectivo. La experta en salud digestiva, Abigail Hueber, explicó que levantarse de la cama y tomar café puede desencadenar la liberación de hormonas de estrés: adrenalina y cortisol.

Tomar el café 90 minutos después de despertarse. Foto: Ilustrativa

“El cortisol es una hormona importante que deseamos que se libere por la mañana, pero el golpe de cafeína con el estómago vacío puede provocar una liberación excesiva de cortisol y desencadenar una respuesta de estrés innecesaria que puede afectar negativamente nuestro intestino, hormonas, glándulas suprarrenales y energía”, detalló la profesional al portal estadounidense Well+Good. Además, recomendó algunas estratégicas para esos minutos previos al café.

Cepillarse los dientes

Los ácidos presentes en el café debilitan el esmalte dental, por lo que cepillarse inmediatamente después de tomar café puede ser perjudicial para mantener unos dientes blancos. Hay que cepillarse antes o esperar aproximadamente 30 minutos después de tomar café, permitiendo que los dientes se remineralicen y evitando así problemas relacionados con el cepillado.

Esperar 90 minutos después de despertarse

Retrasar el consumo de cafeína durante los primeros 90 minutos después de despertar permite lograr mejor equilibrio hormonal y brindar un mayor apoyo en nuestros niveles de energía a lo largo del día, ya que durante la primera hora después de despertar, nuestros niveles de cortisol experimentan una fluctuación que tiene un gran impacto en el riesgo de desarrollar condiciones autoinmunes.

Hidratarse

Tomar 500 ml de una bebida rica en minerales para reponer los electrolitos. La experta sugiere mezclar 250 ml de una bebida rica en potasio, como agua de coco, jugo de aloe vera, jugo de pomelo o jugo de naranja, con una pizca de sal, y combinarlo con 250 ml de agua, siempre antes de tomar el café.

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Hacer ejercicio

Aunque la cafeína puede ser beneficiosa para hacer que los entrenamientos intensos parezcan menos difíciles, los expertos advierten que tomar café antes de ir al gimnasio puede generar ansiedad durante el entrenamiento. Además, dado que tanto el café, especialmente el negro, como el ejercicio son estimulantes gastrointestinales, consumir café antes de tu rutina de sudoración podría resultar en la necesidad de ir al baño de manera urgente.

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