El Gobierno nacional continuará con más fuerza su lucha frontal contra el narcotráfico y el crimen organizado, tarea para la que seguirá trabajando con la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos. Lo hará mediante una agenda fortalecida, liderado por el Consejo de Defensa Nacional (Codena). No hay ni habrá ninguna falta de cooperación entre Paraguay y el organismo norteamericano, como han señalado algunos medios de comunicación, sin haber consultado a los organismos estatales ni tener en cuenta la postura oficial de las autoridades nacionales competentes. Nunca hubo ruptura con el organismo norteamericano sino solo una reestructuración del sistema de operaciones que contará con la participación, no ya de solo una secretaría de Estado, sino con la presencia de los organismos especializados del país en la lucha contra el crimen.
A raíz de la publicación de un diario norteamericano, que no contaba con todos los datos de la situación, tomó cuerpo la versión de que el Gobierno paraguayo cortaba la cooperación que realiza la DEA con la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad). Y así corrió rápidamente la especie de que se había terminado el acuerdo de ayuda que prestaba la institución estadounidense, hecho que debilitaría la lucha del país contra los delitos más sonados del crimen internacional. Lo que no es verdad.
Las palabras de la suprema autoridad del país, el presidente Santiago Peña, y las del vocero del máximo organismo de la defensa nacional, resaltan que no es real lo que publicaron algunos medios periodísticos y que la verdad es que la cooperación será aún de mayor nivel.
El primer mandatario resaltó que quería reafirmar “la firme convicción y determinación de la lucha frontal contra el crimen organizado, contra el narcotráfico y contra todos los delitos trasnacionales, que le hacen un enorme daño al Paraguay y a todos los países de nuestra región”. Aclaró que su gobierno no busca menos colaboración, como han señalado algunos. “Buscamos más colaboración y esto nos lleva a hacer un trabajo al interior nuestro, de mejorar nuestras capacidades y nuestra operativa, y a nivel internacional en reforzar los convenios de cooperación que se han firmado ya a lo largo de 15 años”, expesó. Precisó que lo que se pretende es poder tener la posibilidad “de revisar toda nuestra agenda de cooperación y ser más ambiciosos en lo que queremos alcanzar”.
El contralmirante Cíbar Benítez, directivo del Codena, señaló que la presencia de la DEA es fundamental. “La lógica es que necesitamos esa cooperación. Lo que se hará es potenciar y reforzar su presencia en nuestro país. No hay una ruptura”, aclaró.
Para desterrar cualquier posible malentendido, el jefe militar apuntó: “Nosotros, como país soberano, hemos de consolidar la reorganización tal como creemos que será más efectiva en el ámbito operativo. La DEA trabajará conjuntamente con todas las instituciones que tengan que ver con seguridad y defensa. Recurrimos al concepto de soberanía, en el sentido de que nosotros queremos organizarnos internamente para aprovechar mejor su presencia o de cualquier organismo internacional que quiera alinearse con el Paraguay en la lucha contra el crimen organizado transnacional y el narcotráfico”.
El contralmirante Benítez aseguró que la Senad trabajará con la DEA, liderando la reestructuración en curso. “Estamos visando un nuevo convenio donde nosotros en coordinación con ellos pongamos las condiciones para que se tenga un mejor resultado. Hay un equipo formado por quienes somos parte del Codena para seguir con esta negociación con la DEA”, resaltó.
El Codena, como máximo organismo de defensa, está compuesto por el presidente de la República, los ministros de Defensa, del Interior, de Relaciones Exteriores y de Inteligencia, además del general de más alto cargo en las Fuerzas Armadas, el jefe del Estado Mayor Conjunto de las FF. AA. y el secretario del organismo.
El Gobierno nacional tiene y debe tener la máxima responsabilidad en la conducción de los asuntos del país, por lo que debe señalar en qué y cómo deben cooperar los organismos internacionales en las cuestiones internas. Como nación soberana y libre, el Paraguay, a través de los responsables de las instituciones del Gobierno, tiene la última palabra en materia de cooperación en aras de la seguridad y el bienestar de la ciudadanía.