Por Laura Morel
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"Pasaron dos años, ocho meses y dieciocho días", dijo el presentador cuando daba inicio a los actos de la reinauguración de La Nueva Olla. Chiche Corte, como fanático hincha de Cerro Porteño, habrá hecho lo mismo que los demás azulgranas: llevar la cuenta de los días.
Es que -y respetando a los demás clubes de la zona- fue demasiado, demasiado mucho tiempo en que barrio Obrero estuvo carente de fútbol, de fiesta en las gradas, de marea azulgrana en las calles.
Por casi tres años, los hinchas tuvieron que acostumbrarse a ir hasta Sajonia para ver a su equipo jugar, mientras el corazón del barrio se tomó un descanso, ingresó al quirófano y pasó por un largo proceso de reconstrucción.
En todo este tiempo, más de un hincha habrá sentido nostalgia y cierto dolor al ver las imágenes del estadio que circulaban por las redes. Algunos sectores eran demolidos, el campo de juego era destruido y lo que alguna vez fue la Olla Azulgrana, iba desapareciendo.
Tras ese periodo, largo y doloroso, comenzaron a verse imágenes más alentadoras, imágenes que llenaban de orgullo el pecho de todo cerrista, imágenes que emocionaban e ilusionaban.
El corazón de barrio Obrero estaba reviviendo. Mejor dicho, estaba renaciendo. Más bello, más fuerte, más grande, ma…jestuoso!
Y así, en los últimos meses y con el paso de los días, la ansiedad se volvió casi incontrolable. Era imposible no hablar de La Nueva Olla en cualquier círculo en que se encontraran hinchas cerristas. Era inevitable no sacar pecho por cada detalle que se iba agregando a diario.
El pueblo cerrista contaba los días para la reinauguración. Los azulgranas anhelaban poder ser partícipes de tamaña fiesta. Así lo demostraron, agotando en pocos días las entradas, una vez que fueron liberadas para la venta a todo público.
La noche de este sábado 19 de agosto del 2017 quedará para siempre en el recuerdo de todo hincha cerrista. No solo del que tuvo el privilegio de estar en el estadio, sino del que acompañó la fiesta desde todos los rincones del país y del mundo a través de la televisión.
Es que en realidad no importa donde estuviste hoy. De una u otra manera, llegaste a sentir como el corazón de barrio Obrero volvió a latir!