Sportivo Luqueño ha sido la gran sensación en el inicio de este segundo semestre. Por ahora lidera el Clausura y ha pasado con autoridad a la segunda fase de la Copa Paraguay. Su efectividad y capacidad de rotación, ha sido clave en este comienzo.
El equipo de Gustavo florentín ha sorprendido bastante. Remontó dos partidos que lo tenía prácticamente perdido, demostrando carácter además de recursos futbolísticos. En el inico, de perder 2-0, terminó ganando 2-3 a Libertad como visitante. En la segunda jornada inició de nuevo con 0-2 como local, pero logró empatarlo 2-2, ante Sol de América.
Si bien tiene distracciones defensivas, aparentemente puede consolidar una dupla interesante con Rubén Monges, el hombre de choque y juego aéreo y el uruguayo Paulo Lima, de gran personalidad y con espíritu de líder. El charrúa posee mucha velocidad y tiene carácter para sacar al equipo desde el fondo.
Marcos Riveros ha recuperado su nivel, es el eje del centro y está muy bien arropado por Mathias Villasanti, el juvenil que le arropó a Riveros y que le dio más dinámica a mediosector auriazul. No quedan dudas que todo el desequilibrio queda a cargo del chico Blas Armoa, quien con apenas 18 años, es el hombre ofensivo más importante del equipo.
La gran virtud de Florentín, ha sido saber rotar, principalmente a sus hombres de ofensiva. Fabio Escobar, sin mucho gol hasta ahora, es el “9” fijo, pero el DT ha sabido rotar con Fredy Bareiro, de gran actuar en la Copa Paraguay, al igual que Osmar Leguizamón, quien recuperó al titularidad tras el juego ante Recoleta.
El atacante uruguayo, Gonzalo Barreto, supo aguantarse perder el puesto en la última jornada, pero eso no le sacó las ganas, ya que fue el gran protagonista de la victoria ante 3 de Febrero, con dos goles desde el banco. Es casi seguro que el charrúa volverá al once base.
Luqueño lidera el torneo con 7 puntos y enfrenta a Olimpia (5) el domingo a las 15:30, en el Este del país.