De ser constantemente elogiado por su efectividad al atajar penales, Santiago Rojas pasó a ser el centro de las críticas el último fin de semana, tras protagonizar una acción en la que su colega Richard Prieto sufrió fractura de tibia y peroné de la pierna izquierda.

Directivos del club General Díaz, hinchas e internanautas no dudaron en lanzar todo tipo de críticas y acusaciones sobre el portero de Nacional, al que calificaron de "mala leche", "malintencionado" y hasta de "asesino".

Este lunes, Rojas brindó una conferencia de prensa en la que se defendió de las acusaciones, recordando cómo se produjo la jugada y aclarando que nunca tuvo la intención de lastimar al mediocampista de las Águilas y que tampoco se dio cuenta de la gravedad de lo ocurrido.

"Lo que puedo decir es que fue una jugada muy casual", comenzó diciendo. "Al verle a Richard que iba picando hacia mi arco lo leí (la jugada), jugué al balón y, lastimosamente, después de la fricción le vi tirado, pero jamás pensé que tuvo esa lesión", siguió.

De hecho, recién cuando el árbitro Enrique Cáceres, que en su momento no cobró ninguna falta, se vio obligado a parar el partido, Rojas comprendió la gravedad de lo sucedido. "No es que no me quise acercar a Richard cuando le vi lesionado", aclaró.

"Me quedé shockeado, y solamente intenté hablar con Chiquito Giménez que estuvo cerca del área grande. Estuvimos charlando y me dijo que esté tranquilo nomás, que fue una jugada casual y que fue un accidente de fútbol nada más", detalló.

Al preguntársele si acaso tuvo intención de lastimar al colega, como mucho se dijo, el arquero tricolor fue categórico. "No. En ningún momento tuve intención de lastimarlo", afirmó, para luego referirse a las duras críticas recibidas.

"Sabemos que la gente que entiende de fútbol vio varias veces la jugada, como se manifestó el juego, vieron el juego limpio y que yo solamente intenté rechazar. Lastimosamente, el pie que tenía abajo se fue por la pierna izquierda de Richard y ahí ocurrió el percance. La gente dijo cosas malas de mí, pero yo jamás voy a intentar hacer cosas malas por un compañero, que todo lo que queremos es seguir adelante siempre", indicó.

Tan duros fueron todos con Santiago Rojas, que este no pudo dormir en la noche del sábado y el domingo ni siquiera se animó a salir de su casa. La charla mantenida en la víspera con Richard Prieto le devolvió la tranquilidad y confianza.

"Me costó muchísimo dormir (la noche del sábado). Yo normalmente no tardo en dormir, pero me quedé pensando y pensando. Me dormí ya casi a las cuatro de la mañana. Estaba muy preocupado por la situación de Richard", confesó, recordando que al ver a los familiares de Prieto ingresar a la cancha se asustó "muchísimo". "Yo lo único que quería era que termine el partido, porque ya no me daba el sentido volver a jugar", admitió.

En cuanto al domingo, admitió: "Ayer no quise salir de casa". "En todo momento me puse a pensar en lo que pasó el sábado. Me puse también en el lugar de Richard. Fueron momentos duros en los que también recibí muchos mensajes buenos de los compañeros del fútbol", quienes le decían "que todo va a estar bien y que Dios quiera que Richard vuelva lo más rápido posible al fútbol", acotó.

Este lunes, Rojas visitará a Prieto, con quien conversó el domingo antes de ingrese al quirófano. "Le dije que la operación, Dios mediante, iba a ser todo un éxito y así fue", recordó, comentando finalmente que su colega le dijo "que este tranquilo, que fue una jugada casual, cosas del fútbol. Que me podía pasar a mí también, como le pasó a él".