- Por el Dr. Juan Carlos Zárate Lázaro
- MBA
La emisión de Bonos de Renta Fija en guaraníes a inversionistas del exterior, realizado por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) (contravalor de USD 500 millones a 7 años de plazo, tasa de interés del 7,9 % p.a.) abre la posibilidad para futuras emisiones haciendo un mix (dólares y guaraníes), trayendo aparejado una menor exposición al riesgo cambiario.
El reperfilamiento de nuestra deuda pública, desdolarizando parte del mismo (equivalente a un poco más de USD 16.000 millones) permitirán que nuestro espectro macro y microeconómico observe menores niveles de vulnerabilidad a las fluctuaciones cambiarias.
Con esto, el perfil de riesgo de nuestra deuda-país será menor, favoreciendo a nuestra calificación de riesgo teniendo en cuenta la última calificación de solvencia que nos asignara la Standard & Poors (BB+) que nos va acercando al ansiado Grado de Inversión.
El apetito por los Bonos Soberanos en dólares, se mantuvieron elevados denotando la confianza de los inversionistas extranjeros en el manejo de nuestra macroeconomía, y en las buenas perspectivas para este año con un crecimiento económico estimado en aproximadamente 4 % del PIB.
Si bien parte de estas emisiones son aplicadas a refinanciar parcialmente nuestro endeudamiento actual, no obstante, el inicio de la desdolarización gradual beneficiará a la generación de flujo de fondos del fisco, dando “un respiro financiero” para prever anticipadamente pagos de futuros vencimientos (capital e intereses) con mayor holgura.
No todo se remite a lo cuantitativo, pues lo cualitativo, para las empresas calificadoras de riesgos internacionales, adquiere relevancia, dado que en la asignación de calificación de solvencia técnicamente se busca que haya la necesaria inflexión entre ambos, por lo que el Gobierno nacional debe priorizar la modernización y reestructuración de nuestras instituciones desde el punto de vista organizacional y funcional, históricamente uno de nuestros puntos débiles estructurales.
El Up Grade en nuestra Calificación de Solvencia beneficia no solo a la emisión de Bonos del Tesoro, sino a empresas corporativas que operan dentro de nuestro Mercado de Capitales con buena experiencia, dándoles también la posibilidad de ofertarlos a inversionistas extranjeros, pues todas las empresas emisoras cuentan con Calificación de Riesgos y seguimiento trimestral a la evolución de su gestión económica-financiera-patrimonial contando con el mercado primario(para la emisión) y el secundario, que permite a los tenedores de bonos negociarlos a través de la Bolsa de Valores antes de sus vencimientos en caso que requieran contar con los fondos invertidos.
Esperemos que para antes del cierre de 2024 podamos mejorar la calificación de solvencia de BB+ a BBB, ubicándonos con Grado de Inversión, permitiendo que más inversionistas extranjeros radiquen sus capitales en diversos segmentos de negocios, aparejado con una mayor cantidad de fuentes de trabajo y generación de ingresos en divisas, aprovechando la ventaja competitiva y comparativa que ofrece el triple 10 % impositivo, que no se da en ningún otro país de la región.
La cualificación de nuestro capital humano será relevante, pues las empresas extranjeras buscan a los mejores hombres y mujeres profesionales, para ponerlos al frente de su estructura organizacional, que les permitan ser competitivos y rentables.
Las cifras en valores absolutos (Balance de Situación y Cuadro de Resultados), que nos puedan mostrar las empresas, tienen un valor positivo pero limitado, si en contrapartida el perfil y capacidad profesional de dirección de los directivos de las organizaciones no cuentan con la formación académica-técnica-profesional que se requiere.
El Instituto de Previsión Social(IPS) debería replicar estos ejemplos diseñando una emisión de Bonos de Largo Plazo en Guaraníes, para aplicarlo al pago de la deuda actual con Empresas Farmacéuticas (aprox. USD 450 millones), amortizando en gran parte o bien cancelando en un 100 %, manteniendo así fluidez en la provisión de medicamentos e insumos (una de las principales prioridades), para una cobertura integral de la salud de los asegurados, y que a posteriori incluso les podría permitir mejorar su posición de negociación con sus acreedores comerciales.