- Por Maximiliano Reyes Zúñiga
- Subsecretario para América Latina y el Caribe, SRE
En la madrugada del 14 de junio arribó a Asunción un avión de la Fuerza Aérea Mexicana con 150 mil dosis de vacunas AstraZeneca que México entregó a Paraguay. Este gesto solidario contribuyó a que este país hermano continuara su programa de vacunación contra la pandemia del covid-19. La donación llegó en el momento más oportuno. Se afrontaba una grave escasez de vacunas, al tiempo que la pandemia estaba en un punto crítico.
Al recibir estas vacunas, el canciller Euclides Acevedo destacó el especial agradecimiento del presidente Mario Abdo y el suyo propio por este acto de hermandad: “Pese a la codicia, la falta de equidad, hay una respuesta, de que la solidaridad existe y eso es lo que están demostrando el gobierno y pueblo mexicano bajo el liderazgo del presidente Andrés Manuel López Obrador”.
Y así es, la solidaridad es permanente y queda enmarcada una vez más, con el reciente anuncio de un segundo envío de otras 150 mil dosis de la vacuna AstraZeneca al pueblo hermano del Paraguay. México ha estado en posibilidad de hacer estas donaciones, no porque cuente con un exceso de estas (nuestro país también está lidiando con la pandemia), sino por la empatía que nos une con otros pueblos hermanos de la región, como es el caso de las donaciones hechas a Bolivia y Belice.
Además de esta solidaridad, las donaciones responden fundamentalmente a tres razones: alientan la unidad, el respeto mutuo y la cooperación con hechos y no con palabras; técnicamente está en posibilidades de hacerlo, ya que se trata de una verdadera acción de integración regional, en cuyo proceso Argentina produce la sustancia activa y México la envasa y termina; y lo más importante porque países hermanos de nuestra América, como Paraguay, requerían con urgencia estos inmunológicos para salvar vidas. Este es el México que mira al Sur y da a la diplomacia un valor humano. La amistad se sella con acciones solidarias que perduran en el corazón; sepa el pueblo paraguayo que tiene en México a un amigo que desea estar cada vez más cerca de ustedes.
Otra columna sólida de esta relación especial es la cooperación. En el marco de la participación proactiva de Paraguay en la XXI reunión de Cancilleres de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, bajo la presidencia pro tempore de México desde el 2020, nuestros cancilleres firmaron el pasado 23 de julio una hoja de ruta para relanzar el diálogo, la cooperación y la interlocución política al más alto nivel. Trabajamos en ese rumbo. A finales de octubre próximo encabezaré con mi homólogo paraguayo la VII Reunión del Mecanismo de Consulta y Coordinación Política, principal foro para revisar, evaluar y profundizar la agenda bilateral.
También estamos impulsando la apertura de una librería del Fondo de Cultura Económica para promover más la cultura de ambos países, la oferta editorial y la lectura. Además, modernizaremos el andamiaje jurídico que rige la relación económica, la cual tiene el potencial para incrementar los intercambios comerciales y negocios en ambos sentidos. La productiva participación de ambos países para impulsar la creación de una Agencia Latinoamericana y Caribeña del Espacio está dando frutos y pronto será una realidad. Esta agencia se encargará de coordinar esfuerzos regionales de comunicación satelital, así como de sistemas de alerta temprana para huracanes, incendios y demás desastres naturales. Estamos decididos a profundizar esta etapa renovada de cooperación y solidaridad bilateral.