Un grupo de investigadores de la Universidad Rutgers-New Brunswick (Estados Unidos) ha descubierto que realizar ejercicio físico activa las células del cerebro especializadas en la respuesta a la insulina, lo que se relaciona con una mejor función cerebral y una reducción del riesgo de demencia, un descubrimiento que podría servir para desarrollar terapias dirigidas para contrarrestar o prevenir esta afección.
“Creemos que este trabajo es importante, porque sugiere que el ejercicio puede funcionar para mejorar la cognición y la memoria al mejorar las capacidades de la insulina para actuar sobre el cerebro”, ha afirmado el autor principal del estudio, Steven Malin, profesor asociado en el Departamento de Kinesiología y Salud en la Escuela de Artes y Ciencias de Rutgers.
El estudio, publicado en la revista ‘Aging Cell’, se ha centrado en el análisis de las vesículas extracelulares neuronales que transportan varias proteínas implicadas en la sensibilidad a la insulina, entre ellas la ‘Akt’; esta sensibilidad es una respuesta del cuerpo a la insulina y que, en caso de ser baja, como en los pacientes con diabetes, puede llegar a tener efectos negativos en la cognición.
Los científicos han estudiado estas vesículas de 21 voluntarios con una edad media de 60 años y prediabetes, quienes han realizado doce sesiones de ejercicio de 60 minutos cada una, supervisadas y repartidas en dos semanas, y con una intensidad moderada o alta; los participantes ingirieron una bebida con glucosa antes y después del entrenamiento, y los investigadores recogían muestras de sangre antes y durante la ingesta de la bebida, al inicio y al final del entrenamiento.
Estas muestras han indicado que el número de vesículas neuronales que transportan proteínas implicadas en la sensibilidad a la insulina aumentó después de cada entrenamiento, siendo la Akt la más notable.
“Mostramos por primera vez que el ejercicio afecta a la señalización de insulina de las vesículas extracelulares neuronales en relación con las mejoras clínicas del azúcar en sangre. Y utilizamos estas vesículas extracelulares neuronales como un indicador de la sensibilidad a la insulina del cerebro. Por lo tanto, el ejercicio es potencialmente capaz de mejorar la capacidad del cerebro para responder a la insulina para la función neuronal”, ha explicado Malin.
Tras ello, ha recordado que las personas con prediabetes “corren el riesgo” de tener niveles insuficientes de insulina en sus cuerpos, especialmente en el cerebro, lo que aumenta las posibilidades de desarrollar enfermedades de demencia como el Alzheimer, y es que la insulina también desempeña un papel “crucial” en la formación de la memoria, la evocación, la velocidad de procesamiento y el funcionamiento de las sinapsis, estructuras que permiten que las células cerebrales se comuniquen entre sí.
“Si la insulina es insuficiente en el cerebro, eso significa que no sólo las células cerebrales se volverán potencialmente disfuncionales, sino que también pueden dejar de interactuar entre sí adecuadamente. Es como jugar al teléfono con un amigo. En algún momento, el mensaje se pierde cuando el cerebro se vuelve resistente a la insulina”, ha añadido.
A partir de ahora, los investigadores buscarán examinar si una única sesión de ejercicio puede mejorar la capacidad de la insulina intranasal para apoyar la salud cognitiva en adultos mayores con obesidad, midiendo el flujo sanguíneo cerebral y las vesículas extracelulares neuronales; además, planean realizar un estudio de entrenamiento físico a largo plazo que evalúe las mejoras de la sensibilidad a la insulina cerebral en relación con la cognición en adultos mayores.
El estudio ha sido realizado en colaboración con el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento de los Institutos Nacionales de Salud del país, y en él han participado científicos como Michal Beeri, director del Centro de Investigación del Alzheimer Herbert, y Jacqueline Krieger Klein en la Facultad de Medicina Rutgers Robert Wood Johnson; y Daniel Battillo, candidato a doctorado en el programa de posgrado de kinesiología y fisiología aplicada. Entre los científicos del Instituto Nacional sobre el Envejecimiento del Instituto Nacional de Salud que participaron en el estudio se encuentran Dimitrios Kapogiannis, Maja Mustapic y Francheska Delgado-Peraza.
Inversión pública creció USD 94 millones en lo que va del año
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Durante la presentación de avances de las instituciones del Poder Ejecutivo, el ministro de Economía y Finanzas (MEF), Carlos Fernández Valdovinos, informó que las inversiones públicas acumulan un incremento de USD 94 millones en lo que va del año.
El titular de la cartera económica destacó que este aumento responde a una política fiscal responsable, pero firme en su apuesta al crecimiento, priorizando obras de infraestructura y compra de equipamientos estratégicos. En ese contexto, explicó que parte de estos recursos están bajo la administración del MEF, mientras que otras inversiones, como la adquisición de radares, son ejecutadas por otras carteras.
El ministro puso énfasis en el fortalecimiento de sectores clave como salud y educación. Según detalló, la ejecución presupuestaria en salud aumentó en USD 58 millones en los primeros cinco meses del año, lo que permite una mejor cobertura de servicios e insumos en hospitales del sistema público.
En educación se registró un incremento de USD 62 millones, destinado no sólo a garantizar el cumplimiento de los compromisos salariales con los docentes, sino también a la provisión de útiles escolares y otros elementos básicos que impactan directamente en el aprendizaje de los estudiantes.
Por otra parte, Fernández Valdovinos remarcó que la inversión social también ha sido una prioridad para el gobierno. Se asignaron USD 74 millones adicionales a programas que buscan atender a los sectores más vulnerables de la población, en línea con el compromiso del Ejecutivo de no dejar a nadie atrás.
“Estamos priorizando a las personas, con una gestión que busca mejorar la calidad de vida sin apartarnos del crecimiento económico”, expresó el ministro. Al mismo tiempo, reiteró que estos niveles de ejecución son posibles gracias a un manejo eficiente de los recursos del Estado.
Además de los incrementos en inversión y gasto social, el ministro resaltó la importancia de mantener una coordinación eficaz entre las distintas instituciones del Estado para asegurar que los recursos lleguen donde más se necesitan.
El ministro indicó que el crecimiento sostenido de la ejecución presupuestaria refleja no solo una mejor capacidad de gestión, sino también un compromiso político con el desarrollo inclusivo. “No se trata solo de ejecutar más, sino de ejecutar mejor”, finalizó.
Los jóvenes prefieren la IA para informarse, señala estudio
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París, Francia. AFP.
La tentación de utilizar los robots conversacionales como ChatGPT para informarse es una de las tendencias crecientes entre los jóvenes, mientras que la red social X, criticada como una correa de transmisión del extremismo, resiste como vector de información, según los expertos.
"Los robots conversacionales con IA se están utilizando por primera vez como fuente de información“, resume Mitali Mukherjee, directora del Instituto Reuters para el Estudio del Periodismo, al inicio de su informe 2025 sobre información digital. El estudio está basado en encuestas en línea realizadas por la empresa YouGov a 97.000 personas en 48 países, entre ellos Argentina, Brasil o Colombia.
Por ahora, el número global de encuestados que dicen usar la IA cada semana para informarse es “relativamente bajo” (7 %), destaca el informe. Pero esta proporción es “más alta” entre los más jóvenes: sube al 12 % entre los menores de 35 años y al 15 % entre los menores de 25.
ChatGPT es utilizado además como un interlocutor o incluso “confidente” por personas que sienten la necesidad de comunicar con su “chatbot” para temas personales, o incluso íntimos. Así una cuarta parte (26 %) de los franceses declaran que utilizaron la inteligencia artificial en su vida privada en 2024, una progresión de diez puntos en un año, según Barómetro digital publicado anualmente.
El informe del Instituto Reuters, vinculado a la universidad británica de Oxford, es considerado una referencia en la materia. ChatGPT (de la empresa estadounidense OpenAI) es la más utilizada como fuente de información, por delante de Gemini de Google y Llama de Meta, constatan los expertos.
Además, los encuestados consideran estas herramientas interesantes para personalizar la información y adaptarla mejor a sus necesidades como usuarios. Se trata, por ejemplo, de resumir artículos para poder leerlos más rápidamente (27 % de los encuestados), traducirlos a otros idiomas (24 %), hacer recomendaciones (21 %) o incluso responder preguntas sobre la actualidad (18 %).
No obstante, pese a este uso emergente, los encuestados en la mayoría de los países “siguen siendo escépticos respecto al uso de la IA en el ámbito informativo y prefieren que los humanos sigan desempeñando un papel”. Los encuestados temen que la información producida principalmente por IA sea “menos transparente” y “menos confiable”.
Los modelos de IA se alimentan de datos que encuentran en Internet, incluidos contenidos de prensa, con el fin de poder generar textos o imágenes a partir de una simple solicitud formulada en lenguaje natural por sus usuarios. Para obtener ingresos, algunos medios han optado por llegar a acuerdos con los actores de la IA. En cambio, otros han emprendido acciones legales por violación de derechos de autor.
Este panorama se une a la baja credibilidad de medios de comunicación tradicionales, según otros sondeos. “Este cambio ha permitido a políticos como Donald Trump en Estados Unidos y Javier Milei en Argentina eludir a los medios de comunicación tradicionales”, advierte el texto.
Igualmente, la red X en manos del multimillonario Elon Musk sigue siendo la gran plataforma de debate público mundial, a pesar de las críticas de medios tradicionales y de algunos anuncios de organismos, figuras públicas o empresas que abandonaron estrepitosamente el foro. “Es sorprendente observar que la capacidad de X para llegar al público en el ámbito de la información no ha disminuido (...) a pesar del éxodo de usuarios de izquierda y periodistas, entre ellos algunos medios reconocidos”, escribe el Instituto Reuters.
El 11 % de los encuestados afirma haber utilizado X para informarse en la semana previa a la encuesta, una proporción idéntica a la de años anteriores. La red queda por detrás de Facebook (26 %), YouTube (21 %), Instagram (16 %, el único que aumenta) y WhatsApp (15 %).
Presentadas como una alternativa a X, las redes Bluesky, Threads o Mastodon “tienen poco impacto” en el ámbito de la información y sólo son mencionadas por un máximo del 2 % de los encuestados. El uso de X para informarse incluso ha aumentado en Estados Unidos (23 % de los encuestados, +8 puntos en comparación con 2024). Al abandonar la arena de debate, los opositores de izquierda o los críticos de Musk han permitido que los sectores conservadores ganen terreno, explica el texto.
“La interconexión ha generado nuevas formas de sufrimiento psíquico”
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Jimmi Peralta
Fotos: Mariana Díaz/Archivo
La geopsiquiatría como un campo emergente de estudios y nuevo enfoque de salud mental profundiza su mirada respecto a la influencia del entorno cercano y global en la psiquis de las personas. En este diálogo con El Gran Domingo de La Nación, el Dr. Julio Torales habla sobre esta novedad académica, su alcance, campo de acción y estudios existentes.
La reconfiguración del plano geopolítico global, la digitalización, el cambio climático y la pandemia, entre otros fenómenos que pueden ser mundiales o locales, pero de interrelación planetaria, sin dudas marcan huellas en la condición psíquica de las personas. En procura de desarrollar una mayor comprensión de esa situación, surge un nuevo enfoque médico que ya viene desarrollando estudios al respecto: la geopsiquiatría.
En contraposición al síntoma del momento que experimenta el sujeto individual, surge una forma de comprender la salud psíquica que pone el acento en la condición social del ser humano y parte de un enfoque holístico.
En este contexto, el médico psiquiatra paraguayo Julio Torales fue electo senior fellow del Instituto Internacional de Geopsiquiatría (International Institute of Geopsychiatry), con sede en Suiza, y nombrado director del Centro Colaborativo en Geopsiquatría en Paraguay.
Actualmente, Torales es profesor titular de Psiquiatría y líder del Grupo de Investigación sobre Epidemiología de los Trastornos Mentales, Psicopatología y Neurociencias de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Asunción (FCM-UNA). Además, es coordinador del Centro de Investigaciones Médicas de la Universidad Sudamericana e investigador de la Universidad de Los Lagos (Chile).
–¿Cuál es la definición de la geopsiquiatría?
–La geopsiquiatría es una subdisciplina emergente de la psiquiatría que estudia las interacciones entre los factores geográficos, sociopolíticos, económicos y ambientales y su influencia en la salud mental de las poblaciones. Se trata de un enfoque integrador que reconoce cómo el entorno, el territorio y los procesos históricos afectan el bienestar psíquico individual y colectivo.
URGENCIA
–¿Cuál es la necesidad a la que viene a asistir?
–La geopsiquiatría surge para responder a una necesidad urgente: comprender y abordar los determinantes contextuales de la salud mental que han sido tradicionalmente subestimados. En un mundo marcado por desigualdades estructurales, crisis humanitarias, migraciones forzadas y colapsos ecológicos. Esta disciplina busca ofrecer marcos de análisis y acción sensibles a la realidad geopolítica de cada territorio.
–¿Existen otras especialidades o disciplinas que trabajen el factor social dentro de la psiquiatría?
–Sí. La psiquiatría social, la psiquiatría transcultural y la psiquiatría comunitaria son disciplinas que han abordado aspectos sociales, culturales y contextuales. Sin embargo, la geopsiquiatría se diferencia por su énfasis en los determinantes geopolíticos y ambientales globales, proponiendo una lectura más amplia y situada de los fenómenos mentales.
–¿Qué tipos de patologías se enmarcan en el ámbito de competencia específica de la geopsiquiatría?, ¿su labor se centra más en lo estadístico?
–La geopsiquiatría no se limita a una categoría diagnóstica específica, pero suele enfocarse en trastornos vinculados al contexto, como el estrés postraumático, la ansiedad climática, la depresión asociada a crisis humanitarias o las psicosis en contextos de violencia estructural. Más que limitarse al análisis estadístico, busca interpretar los datos a la luz de las realidades sociales, políticas y ambientales en las que se inscriben.
–¿La interconexión virtual y real del mundo globalizado visualiza y/o genera nuevos problemas mentales?
–Ambas cosas. Por un lado, la interconexión ha permitido visibilizar condiciones mentales antes silenciadas o estigmatizadas. Pero también ha generado nuevas formas de sufrimiento psíquico: adicción a las redes, ansiedad informativa, dismorfia corporal digital, aislamiento paradójico, entre otras. La vida en red ha transformado los modos de vincularnos con efectos directos sobre la salud mental.
PUNTO DE INFLEXIÓN
–¿Qué peso tienen en estos nuevos escenarios la virtualidad y la pandemia?
–La pandemia de covid-19 fue un punto de inflexión. Aceleró procesos de digitalización y puso en evidencia la fragilidad de los sistemas de salud mental a nivel global. La virtualidad se volvió una herramienta clave para sostener vínculos, pero también potenció el aislamiento, la fatiga psíquica y la desigualdad en el acceso a recursos digitales, sobre todo en contextos de vulnerabilidad.
–¿Existen antecedentes de estudios y análisis anteriores que se hayan clasificado dentro del análisis de la geopsiquiatría?
–Sí, aunque no con ese nombre. Durante la Guerra Fría se investigaron los efectos del miedo nuclear y tras el 11-S se estudió el impacto del terrorismo y la securitización en la salud mental colectiva. La geopsiquiatría retoma estas experiencias para construir un marco conceptual más sistemático y global capaz de integrar esas realidades al análisis contemporáneo.
–¿Qué tipo de acciones globales podrían impulsarse en el marco de las necesidades que plantea el nuevo panorama de la salud mental en el mundo?
–Se necesitan políticas públicas globales que integren la salud mental como componente esencial del desarrollo sostenible. Esto incluye el fortalecimiento de sistemas comunitarios de atención, la capacitación de profesionales en enfoques contextuales, la investigación transnacional de determinantes psicosociales y la inclusión de la salud mental en agendas climáticas, migratorias y de derechos humanos.
MISIÓN
–¿Qué es el Instituto Internacional de Geopsiquiatría? ¿Cuáles son sus funciones y qué trabajo desarrollará usted allí?
–El Instituto Internacional de Geopsiquiatría fue creado en 2025 bajo el auspicio del Grupo de Interés Especial en Geopsiquiatría de la Asociación Mundial de Psiquiatría. Su misión es promover la investigación, la formación académica y la incidencia política en torno a la relación entre geopolítica y salud mental. Como senior fellow y director del Centro Colaborativo en Paraguay, me corresponde impulsar estudios regionales, fortalecer capacidades locales y contribuir al desarrollo de marcos teóricos y prácticos que reflejen las realidades de América Latina en el contexto global.
–¿En qué sentido la problemática del subdiagnóstico, la escasez de profesionales y los prejuicios sociales que postergan las consultas menguan el avance en este tipo de aristas investigativas emergentes?
–Estas problemáticas no solo dificultan el acceso a atención oportuna, sino que también limitan la capacidad de los sistemas de salud para generar datos representativos y contextualizados. El subdiagnóstico oculta la verdadera magnitud del sufrimiento psíquico en las poblaciones; la escasez de profesionales impide establecer redes de investigación clínica sólidas y el estigma social retrasa tanto la consulta como la participación en estudios. Esto repercute directamente en la producción de evidencia científica que permita desarrollar políticas sensibles al contexto geográfico y sociocultural. La geopsiquiatría, al enfocarse en los determinantes estructurales y globales de la salud mental, pone de relieve la urgencia de superar estas barreras para avanzar hacia una comprensión más completa y justa del sufrimiento psicológico en cada territorio.
DESARROLLO DE LA GEOPSIQUIATRÍA EN PARAGUAY
Profesionales paraguayos publicaron en el International Journal of Social Psychiatry un estudio que analizó, por primera vez en el país, la relación entre condiciones meteorológicas extremas y las consultas psiquiátricas de urgencia.
Utilizando un diseño case-crossover, el estudio evidenció que el calor extremo y la baja humedad relativa se asocian con un incremento significativo de consultas por episodios bipolares, trastornos de la conducta alimentaria y depresión.
En contraste, se observó una disminución en las consultas por esquizofrenia. Además, se constató que cada 1 % menos de humedad relativa aumentaba en 11 % el riesgo de consulta, lo que subraya la vulnerabilidad de ciertos cuadros ante condiciones climáticas adversas.
Otro trabajo recientemente publicado, esta vez en la revista Geopsychiatry, consistió en la primera encuesta global sobre la incorporación de la geopsiquiatría en la formación de médicos residentes en psiquiatría. Participaron 401 profesionales de más de 20 países. Los resultados muestran que, si bien la familiaridad con la disciplina aún es baja (4,2 %), más del 60 % considera muy importante incluirla en los programas formativos. Este estudio también identificó las principales barreras institucionales, como la falta de docentes capacitados y de materiales educativos específicos.
Actualmente Paraguay lidera un estudio multinacional sobre los efectos del cambio climático y fenómenos meteorológicos extremos en la salud mental de la población general.
Esta investigación se encuentra en fase de recolección de datos en los cinco continentes, en colaboración con centros académicos de América, Europa, África, Asia y Oceanía.
Está en fase de diseño final un nuevo estudio que evaluará la relación entre la exposición a partículas finas en suspensión (material particulado PM2.5) y la aparición o intensificación de síntomas comunes de enfermedades mentales.
Esta línea de investigación apunta a profundizar el entendimiento del impacto de la contaminación ambiental en el bienestar psicológico, un aspecto cada vez más relevante en contextos urbanos y vulnerables.
Desarrollan taller para el fortalecimiento de la red nacional de atención al ACV
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Esta semana se inició el “Taller de tratamiento endovascular del Ictus” para que en Paraguay el personal de salud pueda implementar estrategias claves para mejorar el manejo de Accidente cerebrovascular (ACV) y fortalecimiento de la red nacional de atención para estos casos. Para mañana viernes, están previstos dos encuentros en Itauguá y Luque.
Según el doctor Ricardo Mernes, jefe de la unidad de Ictus del Hospital de Clínicas, este tipo de talleres representan un avance para el fortalecimiento de la red nacional de atención al ACV. Busca mejorar los tiempos de diagnóstico y tratamiento, como garantizar equidad en el acceso a terapias especializadas.
“Los pacientes que sufren un ACV isquémico tienen posibilidad de recibir un tratamiento por vía intravenosa, pero el 30 a 35 % de los casos necesitan una intervención, una especie de cateterismo cerebral, para tratar de destrancar la arteria que se trancó”, expresó el profesional en entrevista con La Nación/Nación Media.
Explicó que otra teoría de tratamiento sería la trombectomía mecánica, pero es más escaso a nivel país y con este taller se busca reforzar. “Con la trombectomía mecánica, estamos más atrasados con mucho menos posibilidades de ofrecer. Tanto en el sistema privado como en el público y gran parte del problema radica en el costo de los materiales”, aclaró.
Resaltó que actualmente se está trabajando en un convenio entre el Hospital de Clínicas y el Ministerio de Salud para tener cada vez más centros en el país, que puedan dar tratamiento a los pacientes que tienen un ACV isquémico agudo.
“Con el afán de estimular y favorecer el desarrollo como el progreso de este tipo de técnicas en distintos países, la Organización Mundial del ACV o World Stroke Organization (WSO) hace cursos, talleres y capacitaciones en distintos países. Este año, le tocó a Paraguay, empezó ayer en el Hospital de Clínicas”, indicó.
Se estima que en el Paraguay se dan unos 10.000 ACV por año. Foto: Ilustrativa
El ACV es una enfermedad muy prevalente, la incidencia es de 150 por 100.000 habitantes, lo que estima que en Paraguay se dan unos 10.000 ACV por año. Existe un tratamiento que se puede hacer en el que los médicos tienen 4 horas y media para tratar al paciente, esta vía intravenosa.
“Estamos tratando de llevar adelante el desarrollo de este tipo de técnicas en nuestro país. Este tipo de actividades nos da una razón importante para mover un poco todas las estructuras, y es un generador de ideas y de voluntades, para tratar de llevar adelante esta campaña de mejorar el tratamiento del ACV”, puntualizó en LN.
Programa
El taller incluye sesiones prácticas, teóricas y simulaciones en distintos centros hospitalarios públicos, para mañana viernes 13 de junio, la actividad se desarrollará en el Hospital Nacional de Itauguá desde las 10:00, será la reunión interinstitucional para el diseño e implementación de un Registro Nacional de ACV.
En tanto que, ese mismo día, en el Hospital de Luque a partir de las 15:00, se tiene prevista la simulación de caso y evaluación de estrategias para reducir tiempos de atención, con participación de personal médico y del Servicio de Emergencias Médicas Extrahospitalarias (SEME).
El doctor Ricardo Mernes, jefe de la Unidad de Ictus del Hospital de Clínicas. Foto: Gentileza