Los movement snacking son la manera perfecta de combatir un estilo de vida sedentario y asegurarte de que estás realizando al menos algún tipo de actividad física intercalada a lo largo del día.
Se trata de una tendencia de acondicionamiento físico que desarrolla nuestras capacidades para ayudarnos a mantener un cuerpo saludable y más fuerte. El término movement snacking se traduce como “bocadillos de movimientos” porque hace referencia a la dinámica de ejercicios breves y efectivos que se pueden realizar en cualquier momento y lugar.
De hecho, las pautas de actividad física para los adultos son de un mínimo de 150 minutos de actividad aeróbica moderadamente intensa cada semana, que puede desglosarse de diferentes maneras, por ejemplo de 15 minutos al menos 10 veces a la semana. Y es que cuando se trata de actividad física, algo siempre es mejor que nada, según los expertos.
Por eso, este tipo de entrenamiento es ideal para las personas que tienen poco tiempo disponible para ejercitarse o que quieren añadir más actividad física a su día. Cada vez se vuelven más populares porque son efectivos para quemar grasas y mejorar la capacidad aeróbica, además son adaptables a las necesidades individuales y nivel de condición física.
Los movement snacking brindan la oportunidad de aumentar el ritmo cardíaco, fortalecer tus músculos y quemar calorías. Esto puede generar beneficios como la pérdida de peso, mejorar el estado de ánimo y disminuir el riesgo de ciertas enfermedades.
¿Cómo incorporarlos a nuestra rutina?
Una posible manera es cronometrando el reloj para hacer algunos ejercicios durante la jornada, dedicar un tiempo en el almuerzo o tomarse unos minutos antes de salir del trabajo. Hay muchas cosas simples que puedes hacer sin el uso de equipos sofisticados, que incluye ejercicios de peso corporal, saltos, trotar y caminar.
Los ejercicios de peso corporal que puedes realizar son abdominales, flexiones, sentadillas y estocadas. Según los profesionales puedes elegir uno de estos y realizar tres series de 10 a 12 repeticiones para completar tu movement snacking de cinco minutos. Otra forma de incluirlos en tu régimen semanal es no programarlo, sino aprovechar las oportunidades a medida que ocurren, por ejemplo subir las escaleras en vez del ascensor.
Varios estudios encontraron que este tipo de entrenamiento dividido en segmentos durante el día, también fortalece la salud del cerebro, reduce el riesgo de enfermedades, conduce a un mejor sueño, una mayor longevidad y un pensamiento, aprendizaje y juicio más claro.