Luego de que el Departamento de Estado haya designado significativamente corrupto al vicepresidente de la República y ex precandidato a presidente del oficialismo, Hugo Velázquez, se generó un verdadero terremoto al interior del Gobierno. Fueron horas aciagas en las que trataron de evidenciar agilidad de respuesta para salir de la crisis. Era vital salir rápido del atolladero. Más de un integrante del primer anillo del Presidente cree que incluso ya se fue excesivamente diligente y se descuidaron algunos detalles.
La rapidez con la que apenas unos minutos después, Mario Abdo salió a agradecer los servicios como candidato y desearle éxitos en sus próximos emprendimientos a Hugo Velázquez, cayó como un baldazo de agua fría en la mesa chica del hasta ahora vicepresidente de la República. En el mismo pantalón, solo que en diferentes bolsillos, el Presidente tenía el agradecimiento para su ex candidato en uno y en el otro, miles de calcomanías de “Arnoldo Wiens, presidente”. Mario Abdo Benítez Full HD 4K. Se esperaba que se ponga pelota al piso en el proceso ya que de hecho la nominación no implica una inhabilidad para seguir siendo candidato; sin embargo, la agilidad en la respuesta (que se sabe no es una característica propia del oficialismo) sonó más a alivio que a otra cosa. Casi se estuvo a punto de lanzar fuegos artificiales con el anuncio de renuncia del en ese entonces candidato a presidente.
Pero ahí estaba Velázquez listo para pasar factura. La primera reunión que se hizo en Mburuvicha Róga donde se decidió la candidatura de Wiens tuvo notorias ausencias, 13 diputados y un solo senador, Arnaldo Franco. Justo es este último quien suena como candidato nominado por Hugo Velázquez para reemplazarlo en la Vicepresidencia. Sin embargo, el candidato de Mario Abdo es Rodolfo Friedmann. Esta diferencia sería uno de los motivos por los que hasta ahora no se hace efectiva la anunciada renuncia del número dos del Ejecutivo. Además, de muchos otros planteamientos que estaría haciendo y que hasta ahora no están siendo atendidos. Día con día se aguarda la nota de renuncia como Vicepresidente y la misma se sigue haciendo esperar. Es Hugo Velázquez jugando la última carta que tiene, quiso hacer lo mismo con la renuncia como precandidato a presidente, pero le jugó en contra el poco tiempo que tienen para intentar instalar una nueva figura, apenas 120 días.
Las ausencias también fueron las protagonistas en el acto de lanzamiento que se hizo en el PC de Fuerza Republicana, ni hablar de los rostros adustos tanto en esa ocasión como en el primer evento que se hizo en capital, en la jurisdicción de la seccional 3. El ex ministro de Obras precisaba con urgencia un baño de pueblo donde pueda probar su forzado guaraní y alguna que otra pose que intente transmitir cierta gracia y donaire.
Aún cuando la renuncia a la Vicepresidencia se concrete en las próximas horas o días, eso no implicará que las heridas se cierren. Están abiertas y supuran enojo y traición. Habrá que ver por cuanto tiempo y sobre como harán los heridos y contusos para curarse a sí mismos.
En el mismo pantalón, solo que en diferentes bolsillos, el Presidente tenía el agradecimiento para su ex candidato en uno y en el otro, miles de calcomanías de “Arnoldo Wiens, presidente”.
La primera reunión que se hizo en Mburuvicha Róga donde se decidió la candidatura de Wiens tuvo notorias ausencias, 13 diputados y un solo senador, Arnaldo Franco.