El ministro de Relaciones Exteriores, Rubén Ramírez Lezcano, se reunió con el Secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, y otros ministros de Relaciones Exteriores en Nueva York, para discutir la grave situación que enfrentan los ciudadanos venezolanos en materia de violaciones a los derechos humanos, la democracia y la libertad y subrayó la necesidad urgente de una solución pacífica a la crisis actual.
Durante la reunión, el Canciller nacional paraguayo ratificó la postura de Paraguay de total transparencia en las elecciones en Venezuela y el respeto irrestricto de los valores democráticos y de los derechos humanos.
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Asimismo, Ramírez expresó su preocupación por las denuncias de violaciones a los derechos humanos en Venezuela, que incluyen arrestos arbitrarios y represión contra la oposición. Enfatizó que es crucial que los venezolanos participen en discusiones constructivas e inclusivas para abordar el impasse electoral y restaurar la democracia en su país.
“Este encuentro refleja un compromiso compartido entre los países participantes para avanzar hacia una recuperación democrática en Venezuela y garantizar el respeto por los derechos humanos fundamentales”, expresó.
Declaración conjunta
El encuentro de los cancilleres sirvió para aprobar una declaración conjunta, en la que los países hacen un llamado a la liberación inmediata de todos aquellos detenidos arbitrariamente sin respeto a las garantías del debido proceso, al cese del uso excesivo de la fuerza, la violencia política y el hostigamiento contra la oposición y la sociedad civil.
Igualmente, los países firmantes instan a una resolución inmediata de la compleja coyuntura venezolana a través de medios pacíficos. Además, exigen a Venezuela que respete y cumpla sus compromisos como parte de la Convención de Caracas sobre Asilo Diplomático de 1954, brindando salvoconductos a los seis solicitantes de asilo que actualmente se encuentran en la residencia oficial de la República Argentina, permitiéndoles abandonar el territorio venezolano.
Por último, manifiestan que ahora es el momento de que los líderes políticos venezolanos inicien conversaciones constructivas sobre la transmisión del poder para resolver el estancamiento político del país y restaurar las instituciones democráticas pacíficamente, de acuerdo con la ley venezolana.
Exhortan además el respeto a la voluntad del pueblo expresada a través de sus votos el 28 de julio, y manifiestan su apoyo a los millones de venezolanos que continúan arriesgando su vida y su bienestar para exigir un futuro más democrático, próspero y seguro para ellos y su país.