El senador del Partido Hagamos, Gilberto Antonio Apuril rechazó la solicitud de aumento salarial del 38% que exige actualmente el sindicato de funcionarios del Ministerio de Hacienda. Al respecto, dijo que no es un buen momento para proponer el planteamiento debido a los constantes conflictos por la falta de recursos económicos para subsanar otros inconvenientes.
“Ellos tienen que tomar el ejemplo del Senado, que nos venimos recortando hace 2 años y que acá la gente no entiende que somos nosotros quienes estamos llevando adelante todos los recortes y no es un buen momento para los aumentos”, indicó el legislador. “Es otro poder del Estado, pero nosotros vamos a analizar si se puede hacer algo al respecto, pero pueden hacer lo que quieran. Ahora justo se está necesitando el dinero para el tema del subsidio (combustible)”.
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En el transcurso de la mañana de este lunes, Pedro Sánchez, secretario general del sindicato de profesionales de la cartera económica, manifestó que el pedido constituye un reclamo justo debido a que en el año 2012 se registró el último aumento salarial para dicho sector.
“Aparentemente es mucho lo que pedimos, pero es justo nosotros hacemos esto conforme a la tasa de inflación que emite la autoridad monetaria que es el Banco Central del Paraguay. Esto es para todos los funcionarios de Hacienda, somos 2.100 en total”, refirió Sánchez en contacto con la radio 1080 AM.
“Somos satanizados”
Por otra parte, el vocero sindical comentó que es necesario que se cumpla con la Ley de Responsabilidad Fiscal a la par de rechazar las calificaciones de ser considerados como “pescadores en río revuelto”, debido a que el pedido se realizó de manera constante y no aprovechándose de la situación actual, refiriéndose a las protestas que son realizadas por el sector transportista por la suba del precio del combustible.
“Son aumentos acumulados de años tras años, también somos trabajadores, asalariados y sentimos el aumento del combustible y de todas las mercancías igual que cualquier ciudadano, pero nosotros por ser trabajadores del sector público somos un poco satanizados”, manifestó Sánchez.