MuCi prosigue con “Un verano en el museo” en febrero
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El Museo de Ciencias (MuCi) confirmó que su ciclo “Un verano en el museo” prosigue en febrero con actividades renovadas en sus dos espacios del Complejo Textilia, ubicado en General Santos 1030 casi Defensa Nacional, en Asunción. Las propuestas se desarrollan de jueves a domingos, de 14:00 a 20:00. Las entradas se adquieren en puerta y a través de la web: muci.org/entradas.
En el TatakuaLab ganan protagonismo las experiencias interactivas de agua, mientras que en el planetario San Cosmos se agrega un nuevo show para que todos los chicos y grandes apasionados de la ciencia aprendan y se diviertan un montón. Todos los jueves se destinan a los cuentacuentos, historias fascinantes relacionadas con la naturaleza, la ciencia y las maravillas del universo que se narran en dos turnos: de 15:00 a 15:30 y de 17:00 a 17:30.
Los viernes se convierten en “Experiviernes”, un espacio interactivo con experimentos en vivo utilizando insumos cotidianos. En cada sesión, los visitantes pueden explorar la ciencia detrás de lo que ven todos los días y descubrir lo extraordinario en lo aparentemente común. Las actividades se realizan el 7 y 21 de febrero, de 15:00 a 18:00, cada hora.
Tereré y naturaleza son los principales ingredientes de “Sábado porã”, un lindo día para conectarse con la naturaleza, observar aves y disfrutar de un rico tereré. Se realiza el 1 y 22 de febrero, de 17:00 a 18:30, con los mediadores del MuCi. Los domingos, por su parte, son bicheros, para conocer las colecciones vivas del museo, datos curiosos sobre insectos, sus cuidados y su importancia en la biodiversidad. Las actividades están previstas el 16 y 23 de febrero, de 14:00 a 19:00.
El Museo de Ciencias alista actividades para disfrutar del último tramo de las vacaciones escolares. Foto: MuCi
Humedales, taller de bordados y científicas
Conmemorando el día mundial de los humedales, Muci celebrará esta fecha especial el domingo 2 de febrero, de 17:00 a 19:00, con el conversatorio “Ni agua ni tierra: humedal”, a cargo del biólogo Michael Candia. El sábado siguiente, 8 de febrero, la consigna será participar del taller de bordado de punto y tyky (gotas de agua, en guaraní) con la técnica del ao po’i. La instructora será la artesana Carmen Acuña. El taller tiene cupo para 30 personas e incluye todos los materiales.
La tarde del domingo 9, de 15:00 a 19:00, estará destinada a “Mujeres, niñas y ciencia”, una serie de conversaciones inspiradoras con las científicas de hoy, para conocer sus historias, aprender de ellas y conectarse al mundo en el cual las mujeres hacen ciencia. En esta jornada, podrán participar de conversatorios con científicas invitadas, experimentos en vivo, trivias de ciencia y otras actividades.
El Museo de Ciencias alista actividades para disfrutar del último tramo de las vacaciones escolares. Foto: MuCi
Día de los enamorados
“Oky la amor” es la propuesta del MuCi para celebrar a los enamorados desde una perspectiva científica con actividades divertidas que tienen al agua, el amor y la ciencia de inspiración. También habrá observación de planetas en el planetario San Cosmos. La cita es el viernes 14 de febrero, de 19:00 a 22:00 y es exclusiva para adultos.
El sábado 15 de febrero las actividades se concentrarán en las constelaciones con la propuesta “Navegando el cielo. Constelaciones”, una invitación para descubrir constelaciones relacionadas con el agua en el cielo nocturno. La actividad, dirigida a todo público, se desarrolla en dos turnos: de 16:00 a 17:30 y de 17:30 a 19:00.
El Museo de Ciencias alista actividades para disfrutar del último tramo de las vacaciones escolares. Foto: MuCi
Muy cerca de Júpiter y Marte
San Cosmos, el primer planetario digital del Paraguay, propone para el domingo 9 de febrero una noche de observación del cielo, con el MuCiTron dirigido hacia los planetas Júpiter y Marte. La convocatoria es en la placita MuCi, de 19:30 a 21:00.
Además, en el planetario (a pasitos del TatakuaLab) se ofrecen shows audiovisuales sobre el universo, la luna, los cometas, las estrellas y mucho más en un domo con una experiencia inmersiva que traslada al espacio. Para conocer más sobre las actividades del MuCi y el precio de las distintas actividades, visitar muci.org. Los interesados en reservar una entrevista escolar o grupal pueden escribir a escuelas@muci.org.
El Museo de Ciencias alista actividades para disfrutar del último tramo de las vacaciones escolares. Foto: MuCi
Museo de Ciencias habilita un espacio para personas neurodivergentes
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El Museo de Ciencias (MuCi) reafirma su compromiso con la accesibilidad al conocimiento y la exploración del universo con el lanzamiento de “La hora tranqui”, ayer sábado, en el complejo Textilia (General Santos casi Defensa Nacional). Este innovador programa piloto está diseñado especialmente para personas neurodivergentes, en particular aquellas con trastorno del espectro autista (TEA), garantizando una experiencia cómoda, enriquecedora y libre de barreras.
Este espacio estará disponible todos los sábados y domingos a las 14:00, horario previsto para minimizar el ruido y el flujo de personas en el museo, con una duración de una hora por sesión. Las entradas pueden adquirirse en línea a través de muci.org/entradas seleccionando el horario y día correspondiente. El costo de las entradas online es de G. 35.000, mientras que en puerta será de G. 40.000.
En la primera fase de implementación, “La hora tranqui” se llevará a cabo en San Cosmos, el planetario de MuCi, donde la experiencia será completamente adaptada para niños, jóvenes y adultos neurodivergentes. Este espacio ofrecerá un ambiente tranquilo y seguro para que todos puedan disfrutar del fascinante mundo de la ciencia y la astronomía.
“La hora tranqui” se trata de una sesión especial en la que se realizan ajustes en el entorno para hacerlo más amigable y acogedor para personas con TEA. Entre las adaptaciones, se reducirá la intensidad de la iluminación y se controlarán los sonidos para evitar estímulos estridentes. Además, los mediadores del museo recibirán capacitación especializada para brindar una mejor experiencia a este público.
¿Por qué el 97 % de los paraguayos viven en un tercio del país?
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“Por qué (casi) todos los paraguayos viven en un tercio del país” se pregunta el famoso canal de YouTube “Un Mundo Inmenso” en un video publicado el pasado 5 de febrero y que, en diez minutos, recorre la historia de Paraguay y sus peculiaridades para entender a qué se debe que solo el 3 % de su población vive en la región Occidental, el 61 % del territorio, mientras que el 97 % se ubica en el restante 39 % (región Oriental).
Diego Briano empieza relatando que Paraguay tiene 6.100.000 habitantes y no tiene costas de mar, aunque sí grandes ríos y fácil conexión hacia el Atlántico. Un dato curioso que comparte es que de los 11 municipios que superan los 100.000 habitantes, 10 tienen conexión directa con un río: Limpio, Asunción, Luque, Capiatá, San Lorenzo, Lambaré, Ñemby, Fernando de la Mora, Ciudad del Este y Encarnación. La excepción es Pedro Juan Caballero.
Desde Argentina, Un Mundo Inmenso nació en YouTube en setiembre de 2018 y hoy es uno de los principales canales en lengua española dedicados a la geografía, con más de un millón y medio de suscriptores. Junto a Diego Briano, el equipo está compuesto por Francisco Llorens y Antonella Grossolano, que logran viralizarse periódicamente con diversas curiosidades geográficas del planeta.
Siguiendo con la “extraña distribución de población”, Diego señala el caso del departamento de Alto Paraguay, que es un poco más grande que Panamá y un poco más pequeño que Portugal, pero solo viven 17.000 en su territorio. Lo que equivale a que todos los habitantes de dicha región caben “en un estadio de baloncesto”.
Para ahondar en una respuesta al título del video, el presentador retrocede hasta la fundación de Asunción, cuya zona urbana concentra hoy el 38 % de la población total. En 1537, eran los guaraníes que prefirieron esa zona debido a las tierras fértiles, climas más amenos, ríos navegables y para la pesca, al contrario del Chaco, donde, no obstante, se convirtió posteriormente en un importante asentamiento de colonias de menonitas, lo que detalla “Un Mundo Inmenso” con imágenes y didácticos gráficos.
MuCi, un paseo de verano por la astronomía y la ciencia
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Un recorrido para concientizar sobre la importancia del agua y las proyecciones en su magnífico planetario son las ofertas de Verano en el Museo, en las instalaciones del complejo Textilia de Asunción. Proponen un acercamiento interactivo a las ciencias a visitantes individuales y también a colegios mediante programas especiales. Una oferta creativa para recrearse en vacaciones.
“Aquí todo es interactivo, no es como en un espacio tradicional”, define Rodrigo Ríos, del Museo de Ciencias (MuCi), invitando a recorrer la muestra para reflexionar sobre el agua montado en el llamado Tatakua Lab.
Se trata de un laboratorio de prototipos interactivos, que según describe Mateo Acosta, director de Exhibiciones y Programación, es un recorrido especial de Verano en el Museo, como dieron en llamar a la exposición.
Un recorrido por diferentes máquinas que combinan hidráulica y electrónica, en la que mediante sencillos procedimientos se invita a reflexionar sobre el rol del vital elemento en la vida humana.
Uno de ellos hace hincapié en lo que provoca la falta de agua. “Vamos recabando información del público y allí queda claro que lo que más afecta a los visitantes es no poder bañarse cuando se queda sin agua. No es cocinar, no es lavar, no es regar, no es ni tomar agua, es bañarse lo que más aparece”, comenta Acosta.
CUIDAR EL AGUA
Otro de los artefactos simula una lluvia que se retroalimenta, que ayuda a “reflexionar un poco sobre la recolección del agua de las precipitaciones, que se hace mucho en el Chaco, pero acá en la región Oriental no tenemos esa costumbre. Asumimos que el agua es inagotable e infinita y cada vez es más necesario cuidar el agua apta para el consumo”, comenta.
En el paseo, mediante unos tubos de acrílico que tienen diferentes niveles de agua, se logra hacer un comparativo de la altura del río Paraguay en los últimos años y el impacto en la navegabilidad. “Son intervenciones artísticas que ayudan a brindar la información de manera diferente e interactiva”, resume.
Ingeniero en electrónica, Acosta comenta que los prototipos se van testeando con la gente para ver si surten efecto y se mejoran con el aporte y los comentarios de los visitantes.
“Es muy importante para nosotros que las experiencias se vean, que se vea el motor, que se vean los cables, los caños. Todo eso hace que la gente entienda mejor cómo funciona y los que tengan curiosidad de ir más hacia la parte técnica pueden descubrir cómo logramos hacerlo”, apunta.
Los visitantes pueden también acceder a una mirada en microscopios de muestra de agua de diferentes partes y situaciones. “Principalmente estamos observando ahora algunos mosquitos, que están muy conectados con el agua, pero conversando de la importancia que tienen también los mosquitos en el ecosistema y hay algunas reflexiones detrás de ello”, expone.
Rodrigo Ríos, director del Planetario San Cosmos del Museo de Ciencias (MuCi). Foto: Matías Amarilla
MEDIADORES
El paseo es facilitado por mediadores que guían a los visitantes en las diversas experiencias para que “de alguna manera ellos mismos encuentren las respuestas”.
Una máquina fabrica una burbuja gigante en la que un niño puede mirar por dentro. “Es para explicar el fenómeno físico de la tensión superficial del agua, que es la que produce propiamente las burbujas, por ejemplo”, subraya.
Esta posibilidad de aprender jugando aparece en todo el recorrido por estas máquinas que ayudan a comprender algunos principios básicos. “Entonces es un poco jugando, un poco de repente descubriendo. Puede que la gente termine jugando y no conecte directamente con un fundamento científico, una base de ciencia muy dura, pero descubre elementos”, asegura.
El espacio tiene una pequeña tienda de regalos, una MuCiteca, “que es un espacio de lectura donde los niños tienen sofás y almohadones para leer con los padres”.
Los visitantes pueden también ver en vivo cómo se construyen los dispositivos de la exposición.
UN PLANETARIO ESPECIAL
Después, se puede ir caminando al Planetario San Cosmos, “bautizado así en homenaje a la tarea del astrónomo paraguayo Blas Servín, quien coordinaba el observatorio San Cosme”, cuenta Rodrigo Ríos, su director.
En el espacio, una media esfera recubierta de una tela de proyección especial permite introducirse y ver filmes envolventes sobre los astros, la evolución de las especies y otros temas adecuados técnicamente a este tipo de muestra.
Los espectadores lo hacen desde unos asientos construidos especialmente con el estilo de la silla cable, en la que pueden recostarse para mirar la bóveda de proyecciones.
También ocurren eventos teatrales y episodios de cuentacuentos. “Vienen aliados y arman como un pequeño teatro en el que usan tanto el cielo estrellado como el domo para hacer estas demostraciones en vivo, que a los chicos les fascina porque cuentan historias muy divertidas”, describe.
Mateo Acosta, director de Exhibiciones y Programación. Foto: Matías Amarilla
DIVERSIDAD DE EVENTOS
“Tenemos distintos tipos de shows, tanto en vivo, narrados en tiempo real por los mediadores como con audio propio de las películas configurando estructuras que duran una hora. Actualmente tenemos ocho shows en cartelera y nos visitan colegios y turistas, que son los que más vienen los días entre semana. Ahora que van a empezar las clases los colegios son nuestros principales visitantes y da gusto recibirles porque vienen en patota (risas)”, cuenta.
La idea de la programación del MuCi es la actualización permanente porque, según recuerda Ríos, “la práctica de ir a un museo no es habitual. Te vas una sola vez en tu vida y después ya no porque siempre sigue igual. Entonces, aquí como que volvés a venir y vas a encontrar espacios totalmente diferentes, eso es lo que queremos”.
Otro elemento atractivo del MuCi son las observaciones del cielo que se hacen con dos telescopios que son desplegados en la plaza colindante al planetario. “Son siempre gratuitas para que la gente pueda venir a ver el cielo de otra manera. Una o dos veces al mes ocurre, dependiendo siempre del clima, que esté despejado. Últimamente se pusieron muy de moda estos fenómenos de alineación, el paso de un cometa, etc., que a la gente le despierta mucha curiosidad”, comenta Ríos.
Lo hace anunciando que este sábado 8 y el próximo 14 como una de las actividades del Día de los Enamorados habrá observaciones.
CUÁNDO Y DÓNDE VISITARLO
Foto: Gentileza
El Museo de Ciencias (MuCi) puede visitarse durante todo febrero de jueves a domingos de 14:00 a 20:00, en el complejo Textilia, sito en avenida General Santos 1030.
Desde marzo las visitas se podrán hacer de martes a domingos.
Las entradas al Tatakua Lab cuestan 20.000 guaraníes si se compran online y 25.000 en la tienda del sitio. Para el Planetario San Cosmos, salen 35.000 y 40.000, respectivamente.
“Invitamos a la gente a ver el programa de actividades en redes sociales o en nuestra web porque hay diversas actividades, observación de aves y botánica, etc. Todo febrero está calendarizado y ya está accesible”, indica Ríos.
Para agendar las visitas, se debe contactar con el MuCi a través de la web y redes sociales.
“Tenemos un programa de extensión comunitaria que implementamos principalmente con los 10 colegios de la zona de influencia del museo, que es la Chacarita, y tenemos una alianza con una empresa de transporte que se encarga de traerles de forma gratuita. Ellos no pagan nada para poder visitar nuestros espacios ni el transporte”, cuenta.
Asimismo, resaltó que el año pasado recibieron estudiantes de la zona del Chaco, Concepción, Encarnación y Ciudad del Este, lo cual a su criterio habla bastante bien del espacio y de que la gente apueste por algo diferente.
“En general nos escriben diciendo ‘somos un colegio del interior y queremos visitar’. Entonces, vemos la forma de poder aplicar la extensión con ellos también para que no les cueste tanto, ya sea el transporte o la entrada, dependiendo de las carencias”, explica.
LA HORA TRANQUI
A partir de este fin de semana, los sábados y domingos a partir de las 14:00 “tendremos habilitada la Hora Tranqui, un espacio para personas neurodivergentes que quieran venir a un lugar donde el sonido y las luces estén un poquito más bajas, más calmas, que no haya tanto barullo de parte de la música o de las luces para que los padres puedan venir a pasar con sus hijos una hora sin que nadie les moleste y sin que nadie, principalmente, les diga nada”, comentó Rodrigo Ríos.
Lo implementaron porque “recibimos muchísimos chicos autistas o con alguna neurodivergencia y pasa siempre que el papá se te acerca y dice “mi hijo es autista y podría gritar mucho, podría hacer mucho barullo”, y no hay problema con eso, aunque a veces sí crea problemas con la gente que quiere a lo mejor venir a un show en silencio”, describe.
“Entonces, para todos esos casos y es algo que se hace en muchos museos. Se tiene un espacio para que ellos vengan exclusivamente a ese lugar si quieren y sentirse cómodos y libres de poder hacer todo el ruido que quieran, nadie les va a decir nada y tenemos capacitaciones con la gente de TEA Paraguay, que es la que nos está asistiendo en esta implementación en la que van a tener también el acompañamiento de los mediadores del MuCi”.
UN SITIO ESPECIAL
Rodrigo Ríos cuenta que el MuCi “nació de la idea de nuestro fundador, Dave Peery, que es un estadounidense filántropo, que junto con una amiga que también es americana se reunieron y conversando con ella en una merienda coincidieron en que querían instalar un museo de ciencias”.
De esto ya hace tres años y a mediados de este 2025 se espera se dé la palada inicial para la construcción del MuCi en el terreno que adquirió la fundación que lo sustenta en la vecindad del parque Caballero y la Chacarita. “Será un espacio de 14.000 m² en varios niveles que contará con varias salas de exhibiciones de ciencias, espacios comunes de aprendizaje y un planetario de pantalla LED curva para 150 personas”, describe la web.
“En algún momento se planteó que sería bueno empezar ya a practicar antes de ese gran museo y así nació este espacio en Textilia, donde hacemos el prototipado de actividades o de cosas que va a tener ese museo grande. Aquí probamos todas esas cosas que después van a ir escalando en tamaño y en complejidad para lo que va a ser el gran museo”, explicó.
“Queremos brindar una experiencia interactiva, ya que en los museos tradicionales la idea es que no toques nada, que vengas hacia mí a escucharme todo lo que yo te voy a decir. Acá es diferente, acá nosotros invitamos a que puedan tocar las cosas y la conversación no es un monólogo, sino que es interactiva”, describió.