Mujeres privadas de libertad entregaron galletitas y bombones a niños hospitalizados
Compartir en redes
Bajo el lema “Tiempo de dar”, 13 mujeres en régimen de semilibertad del Hogar Nueva Oportunidad del Ministerio de Justicia buscan recuperar el espíritu de las festividades cristianas a través de la donación de galletitas, bombones y más de 800 panes que elaboran para niños hospitalizados que padecen cáncer y barrios carenciados.
A pocos días de la importante semana religiosa, las internas se pusieron manos a la obra y con el paso a paso de recetas tradicionales, hornearon panes, elaboraron galletitas, huevos y conejitos de pascua de chocolates, así como también bombones artesanales, todos ellos con técnicas decorativas y entregaron al Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu y al Hospital Materno Infantil de San Lorenzo.
“Estos paquetes de dulces coloridos que venimos a donar vienen cargados del sentimiento de mujeres –internas en semilibertad– que se abren buscando un lugar en la sociedad, amenizando la estancia de niños tratados con quimio en el hospital”, señaló Nelsi Centurión, directora del Hogar Nueva Oportunidad, quien tuvo la idea de la iniciativa.
En la ocasión, tanto cortantes para masas, moldes con cavidades para garantizar el desmoldado fácil, mangas para merengue y glaseados, todos los insumos alimentarios han sido de donación de la profesora Gabriela Tomassone y la empresa Fane - Casa del Heladero y Confitero.
Igualmente, en el transcurso de la semana entrante, tienen previsto amasar y sacar del horno más de 200 panes para acercar a unas 70 familias vulnerables con el apoyo de la Comunidad Sander del área de acción del Centro Municipal N° 7. Indicaron que mediante la colaboración de la empresa Trinidad – Taller de bricolaje, será posible la entrega a los barrios carenciados.
En este día especial, madres privadas de libertad se reencontraron con sus hijos
Compartir en redes
Por el Día de la Madre, el Ministerio de Justicia autorizó de manera excepcional el ingreso de los niños a las penitenciarías del país para saludar a las mamás y posibilitar el vínculo afectivo. Las personas privadas de su libertad tuvieron la oportunidad de reunirse con sus seres queridos y compartir un momento emotivo en esta fecha especial.
La disposición fue canalizada por la Dirección General de Establecimientos Penitenciarios y la Coordinación General de Establecimientos Penitenciarios de Mujeres Privadas de Libertad, a cargo de Daisy Michelón.
Es así que se comunicó a todos los centros penitenciarios del país el permiso especial para los hijos de las internas para permitir un ingreso ordenado y garantizar la seguridad de las visitas.
Todos los ingresos de niñas, niños y adolescentes, familiar/adulto responsable, quedaron asentados en los libros exclusivos para el efecto. Se dejaron constancia de datos personales con el número de cédula de identidad o certificado de nacimiento, para certificar el vínculo con la persona privada de libertad.
Se consignaron la hora de entrada y de salida, tarea que quedó a cargo del funcionario penitenciario de cada reclusorio del país.
En el Centro Penitenciario “Casa del Buen Pastor” las mamás recibieron visitas en el horario de 9:00 a 16:00.
En el Hogar Nueva Oportunidad, los ingresos se autorizaron hasta las 15:00; en tanto en el Centro Penitenciario “Serafina Dávalos”, fue de 8:00 a 16:00, el horario de visitas.
Así también, en el Centro de Rehabilitación y Reinserción Laboral de Mujeres, “Juan María de Lara”, el horario de visita se extendió hasta 13:00 y en la Penitenciaria Regional Misiones, a partir fue de 9:00 a 14:00.
Desde tempranas horas de hoy jueves, los hijos con sus tutores responsables ya estuvieron formando la fila para las visitas a las madres. Foto: Mariana Díaz
Banco de Juguetes llegó a cientos de niños en Navidad y entregará más obsequios en Reyes
Compartir en redes
En víspera de Navidad, el Banco de Juguetes entregó más de 500 obsequios consistente en juguetes a niños y niñas, de una comunidad indígena y situación de vulnerabilidad de la ciudad de Luque. Para el Día de los Reyes Magos esperan llegar a más chicos.
Durante la jornada del 24 de diciembre llegaron a la comunidad indígena Tarumandymi y al barrio Primavera de la citada ciudad para iniciar la entrega de juguetes. “Con esta iniciativa de la Primera Dama entregamos más de 500 juguetes, junto a papá y mamá Noel, que nos apoyan desde el Hospital de los Juguetes”, explicó el ministro Walter Gutiérrez, en sus redes sociales.
Resaltó que seguirán recorriendo varios puntos del país para llevar más juguetes a niños y niñas que estén pasando por una situación de vulnerabilidad social y dibujar más sonrisas en sus rostros. La próxima fecha de entrega especial será el Día de los Reyes Magos.
Desde el Ministerio de la Niñez y Adolescencia (Minna), la Oficina de la Primera Dama y la Secretaría Nacional de la Juventud reactivaron la campaña de recolección del Banco de Juguetes en la edición Navidad y Reyes bajo el lema “Más Juguetes más sonrisas” para que en cada actividad importante que involucre la felicidad de los niños se pueda dibujar más sonrisas.
Hasta el 30 de diciembre el banco seguirá recibiendo juguetes en: el Ministerio de la Niñez y la Adolescencia, dirección Ayolas N°582 esquina Oliva; Farmacias Punto Farma en sus 100 sucursales de todo el país; San Lorenzo Shopping, ubicado sobre la ruta PY 02 a la altura del kilómetro 17,8.
Así también, en el Shopping del Sol, dirección Aviadores del Chaco esquina Delia González; en el Pinedo Shopping sobre la avenida Mariscal López y 26 de Febrero en la ciudad de San Lorenzo, y en el Shopping París, ubicado sobre la avenida Dr. Luis María Argaña de Ciudad del Este, departamento de Alto Paraná.
Stand up en el penal de mujeres: “El humor es un ejercicio liberador”
Compartir en redes
Adriana Torres dice no tener prisa: “No salgo hoy; no tengo planes de fuga”, bromea. Está en la mayor penitenciaría de mujeres de Paraguay y acaba de recitar un monólogo de comedia de stand up que la podría ayudar a reinsertarse en el mundo laboral. Señalan que para las internas “el humor es un ejercicio liberador”.
El show tiene lugar en el patio de la cárcel El buen pastor, de Asunción, donde un grupo de reclusas se ubica en sillas dispuestas en fila para presenciar el espectáculo que pone fin al curso de dos meses ofrecido por la ONG Corazón Libre y en el que participó una decena de internas.
Una de ellas es Torres, de 33 años, quien dejó a sus cinco hijos de entre 15 y un año bajo tutela de su padre, mientras purga una pena de seis meses por “hurto simple” para conseguir crack, al que se dice adicta. “Mi papá, cuando supo que estuve presa, me vino a ver y me dijo: prefiero verte acá que en la calle”, cuenta a la AFP al bajar del escenario, adornado con banderines de colores.
“Estuve dos años por la calle. Hace cinco años que me empecé a drogar. Y dos años bastó para fundirme realmente”, prosigue, lista para salir este mes. Ese tipo de experiencias pueden arruinar vidas, pero también tienen el potencial de convertirse en el combustible del humor.
Es lo que les enseña Carolina Romero, la humorista y profesora de comedia que lidera este experimento de llevar el stand up estadounidense a la cárcel de mujeres paraguaya. “Lo que alimenta el éxito del stand-up es la tragedia, pero se requiere una habilidad y un proceso para asumir ciertas realidades y reírnos de ellas”, dice Romero a la AFP, llevando una libreta donde apunta los tipos de remates y los recursos creativos del humor.
El curso ofrecido por la ONG Corazón Libre finalizó con una presentación de las internas en el patio de la penitenciaría. Foto: AFP
Tragedia se busca
De la decena de reclusas que hicieron las ocho clases de stand up, solo la mitad se anima a subir al escenario el día del show final en el penal. El público ríe a carcajadas, vigilado de cerca por los guardias. En su monólogo, la argentina Brisa Leguizamón, de 25 años, describe a su numerosa familia y su papel de tía cuidadora de niños terribles. “La casa queda como si la hubiese allanado la policía”, ironiza.
“Pero a la hora de la verdad, estamos todos. Así es la familia. Nos peleamos, pero en un cumpleaños, vamos todos. Si alguien se enferma, estamos todos. Y ni hablar si hay un velorio: vamos todos, menos uno. ¡Gracias!”, se despide.
Leguizamón fue detenida en Asunción en 2023, tras ser acusada en Argentina de tráfico de droga al menudeo junto a su marido, en un caso que tuvo cobertura mediática. Ambos están sometidos a un trámite de extradición por narcotráfico en la convulsionada ciudad de Rosario, en la provincia argentina de Santa Fe.
Sin embargo, prefiere hablar de sus cinco minutos de show. “Estuve nerviosa, pero me ayudaron un montón”, cuenta a la AFP. “Sí creo que esto puede llegar a ser una buena herramienta para afuera, ahora hay que ver si llegamos”.
Para la profesora Romero, “no cabe la menor duda de que, a estas chicas, un escenario afuera no les va a faltar”. “Si bien con un antecedente así en otras profesiones probablemente no te contraten, en el stand-up es muy probable que te quieran contratar”, explica, porque con el “punchline” correcto y una catarsis honesta, estas vivencias pueden rendir en un escenario.
Humor liberador
Romero también aboga por la idea de “ver el arte como una salida laboral: eso es algo que en general no se considera y son muchas las internas que quieren tener una oportunidad para reinsertarse”. La cárcel El buen pastor, la mayor prisión de mujeres de Paraguay, alberga 550 presas, cuando tiene una capacidad para solo 200 personas.
Para el ministro de Justicia, Rodrigo Nicora, el Estado tiene capacidad para 11.000 reclusos en todo el país, pero la población penal excede los 18.000 en 18 centros penitenciarios, cuatro de ellos para mujeres y seis mixtos. “Hay hacinamiento y estamos procurando que esto sea más llevadero” por medio de actividades como el taller de stand up, comenta la directora de El buen pastor, Yenny Delgado.
Por ahora, explica, “se hace una separación cuidadosa con las más violentas y las muy adictivas”, aunque el taller se hizo con el grupo que la dirección consideró más apto por su buena conducta. Para ellas, “el humor es un ejercicio liberador”, dice Romero.
Diez son las reclusas que hicieron las ocho clases de stand up en el penal. Foto: AFP
En el marco de la reinserción social y laboral de las personas privadas de libertad, el Centro de Rehabilitación de Mujeres Juana María de Lara de Ciudad del Este apunta a un buen resultado, según los datos proveídos a La Nación/Nación Media, por su directora Lourdes Nelsi. Unas 65 mujeres de la cárcel de mujeres, de las 75 que están hoy, tienen algún trabajo que les genera ingresos y aportan a sus hogares.
De las 65 mujeres privadas de libertad que tienen algún trabajo, 38 son trabajadoras de una empresa textil que tiene convenio con el Ministerio de Justicia para la instalación de su taller dentro del penal, donde sus operarias son las mujeres procesadas o condenadas que cumplen con su prisión en el Centro Juana María de Lara. Trabajan en costura haciendo indumentarias para médicos y médicas, en un horario de ocho horas diarias.
Otras mujeres trabajan en el cultivo de suculentas, fabricación de velas, manualidades varias y productos reciclados. En el caso de las suculentas, las mujeres son capacitadas previamente sobre todo el proceso, desde colocar el sustrato, germinar, hacer la muda y tener preparada para la venta.
“La mayoría de las mujeres que se encuentran en el Centro de Rehabilitación, Reinserción Social y Laboral son proveedoras de su hogar y todas ellas aportan para la manutención de sus familias”, explicó la directora Lourdes Nelsi.