Basa Capital te enseña el ABC para empezar a invertir, en esta ocasión de las manos de Angélica Salinas, Business Executive de la firma.
En Paraguay, cada vez más personas se animan a dar sus primeros pasos en el mundo de las inversiones. ¿Por qué? Porque entendieron que no se trata de tener millones, sino de tomar decisiones inteligentes con lo que se tiene.
Así como aprendemos a cocinar, a manejar o a organizar nuestras finanzas del día a día, también podemos aprender a invertir.
Por eso, junto a Basa Capital presentaremos una serie de publicaciones que te enseñarán a invertir pensando en el futuro.
¿Y entonces, qué es invertir? Pongámoslo así. Cuando invertís, no estás gastando tu dinero ni simplemente guardándolo. Estás usándolo para que trabaje por vos. Lo hacés crecer. Lo plantás como si fuera una semilla que, con algo de paciencia y cuidado, puede convertirse en algo más grande.
“En lugar de tener G. 1.000.000 guardados en una cuenta sin movimiento, podés ponerlos en un fondo que, vaya generando intereses diariamente. No es magia. Es planificación”, explicó Angélica Salinas, Business Executive de Basa Capital.
Esta es la razón por la que invertir importa cada vez más, pues si solo ahorrás, la inflación se lleva parte del esfuerzo. ¿No te pasó que algo que el año pasado costaba G. 100.000 hoy cuesta un poco más? Invertir es una forma de no quedarse atrás. De proteger tu plata y de ayudarte a llegar a tus metas como cambiar de auto, pagar estudios, hacer ese viaje pendiente o tener una jubilación tranquila.
Tres herramientas básicas para empezar. No necesitás saberlo todo para invertir, afirmó Angélica. Solo basta conocer los conceptos clave y buscar ayuda confiable. Acá te contamos las tres opciones más comunes para quienes están dando sus primeros pasos.
Bonos: Imaginá que prestás dinero a alguien de confianza y, al cabo de un tiempo, te lo devuelve con un extra. Esos son los bonos. En vez de prestarle a una persona, le prestás al Estado o a una empresa. Por ejemplo, cuando Paraguay emite bonos para construir rutas o escuelas, cualquiera puede invertir en ellos y cobrar intereses. Son instrumentos de renta fija, es decir, los intereses y la periodicidad de pago ya están pactados al momento de la emisión. Es una opción estable, ideal para quienes prefieren evitar sobresaltos.
Acciones: Es como comprar una pequeña parte de una empresa. Si a esa empresa le va bien, tu pedacito también crece. Por ejemplo, si invertís en una empresa de alimentos que empieza a exportar más, tus acciones pueden subir de valor. Es un instrumento de renta variable.
Fondos mutuos o fondos de inversión: Pensá en un fondo como un viaje en colectivo: en vez de manejar vos, subís con otras personas y un profesional se encarga del volante. El fondo junta el dinero de muchos inversores y lo invierte de forma diversificada. Vos solo elegís el tipo de fondo según tu objetivo y tu perfil. También se puede considerar el tiempo, si es a corto, mediano o largo plazo; y el monto con el que querés empezar. Es una forma práctica y guiada de empezar a invertir sin tener que decidir todo por tu cuenta.
¿Y si no tengo mucha plata? A esta consulta Angélica respondió que en Paraguay, se puede empezar a invertir desde G. 500.000. “Lo importante no es cuánto tenés, sino cómo usás lo que tenés. Además, muchas inversiones están exentas de impuestos personales, y algunas te permiten retirar tu dinero en cualquier momento. Otras requieren esperar un poco más, pero ofrecen mejores rendimientos. No se trata de saber mucho. Se trata de empezar”, alentó.
Para más información, visitá www.basacapital.com. En Basa Capital te acompañamos para que tomes el control de tu dinero y empieces a invertir con confianza. Lo importante es que te animes a dar el primer paso.