El economista Cayo Cáceres resaltó que una medida pública no puede ser la misma para el desarrollo agrícola a gran escala que para pequeños productores. Foto: Gentileza
Políticas definidas para potenciar a pequeños productores son claves para el efecto derrame
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Según la teoría del bienestar, la economía debe estar al servicio de las personas y no al revés. En un sistema con leyes y normas e incentivos se busca ofrecer calidad de vida y prosperidad a todas las personas. Un Estado que está interesado en el crecimiento de sus habitantes centraliza las necesidades básicas y busca solucionarlas.
Bajo ese concepto, el economista Cayo Cáceres explicó a La Nación/Nación Media cuál es la relevancia y transversalidad de que las políticas públicas económicas de un país estén definidas concretamente para que sean ejecutadas y que el efecto derrame pueda llegar a todos los niveles inferiores de la economía, a través de una macro sostenible y fuerte.
“Tenemos a las grandes, a las medianas y las pequeñas empresas, tanto en la parte industrial, primaria y de servicios. Esas son tres realidades totalmente diferentes. Lo que la teoría del bienestar nos dice es que cuando crece la economía en su totalidad, en su conjunto, desde el punto de vista de los grandes agregados macroeconómicos, se puede generar un derrame hacia los niveles inferiores”, indicó a LN.
Cayo Cáceres, doctor en economía y exministro de Desarrollo Social. Foto: Gentileza
Seguido, ejemplificó este hecho con lo que sucede en el sector agrícola, donde el motor de la economía local encuentra su mayor concentración, pero que requiere de un empuje estatal para que las bases se potencien.
Señaló que el derrame de los efectos del agronegocio prácticamente no existe hacia los pequeños productores y que es una deuda del Gobierno comenzar a proyectar mayor acompañamiento a este segmento productivo.
“En el interior del país existen 250.000 fincas que no tienen la posibilidad de acceder a una asistencia técnica permanente, porque no existen políticas que califiquen para ellos desde el Ministerio de Agricultura. Ese es el gran desafío que tenemos. Definir las medidas de las políticas económicas de acuerdo a los sectores que queremos impactar”, afirmó. Resaltó que una medida pública no puede ser la misma para el desarrollo agrícola a gran escala que para pequeños productores.
Datos Claves
- Según la teoría del bienestar, la economía debe estar al servicio de las personas y no al revés.
- Tenemos a las grandes, a las medianas y las pequeñas empresas, tanto en la parte industrial, primaria y de servicios. Esas son tres realidades totalmente diferentes.
- El derrame de los efectos del agronegocio prácticamente no existe hacia los pequeños productores y que es una deuda del Gobierno comenzar a proyectar mayor acompañamiento.
En Paraguay, 7 de cada 10 trabajadores del sector privado son ocupados por mipymes
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De los 1.162.843 trabajadores asalariados del sector privado registrados en Paraguay en el 2023, más del 73 %, unos 849.745, están ocupados por las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
En porcentaje, cerca del 50 % de los asalariados privados cumplen funciones en las microempresas, el 17,2 % en las pequeñas, un porcentaje prácticamente similar en las grandes empresas (17,6 %), en tanto el 6 % se encuentran trabajando en las medianas.
Ingresos
Son consideradas microempresas las que emplean hasta un máximo de 10 personas (incluidos propietarios y familiares que trabajan en las mismas) y facturan anualmente hasta G. 646.045.491. Son pequeñas empresas las que facturan en el año hasta G. 3.230.227.453 y ocupan hasta 30 trabajadores; y medianas, las que facturan anualmente el equivalente a G. 7.752.545.886 y ocupan hasta 50 trabajadores.
La mayor parte de las mipymes operan en comercio, restaurantes y hoteles. El 35,1 % de las micro están en este sector, el 38 % de las pequeñas y el 32 % de las medianas. El resto se distribuye en agricultura y ganadería, industrias manufactureras, construcción, servicios comunales, sociales y personales, y transporte, almacenamiento y comunicaciones, entre los más importantes.
En cuanto a salarios, en las microempresas cerca del 17 % de los trabajadores perciben el salario mínimo, el 21,5 % ganan más del mínimo y cerca del 60 % menos del mínimo. En las pequeñas, el 23 % percibe el mínimo, 41% más del mínimo y más del 32 % menos del mínimo. En las medianas, cerca del 50 % ganan más del mínimo, el 25,6 % igual al mínimo y el restante 21 % menos del mínimo.
La Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) designó el 27 de junio Día de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas para concienciar sobre su contribución para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Carlos Fernández Valdovinos recordó que en abril los indicadores ubicaron al ritmo de crecimiento en casi 5 %, y que si bien las proyecciones locales y extrajeras prevén un 3,8 % para 2024, existe una revisión y una tendencia al alza. Foto: Gentileza
Actual clima de negocios mantiene perspectiva positiva para el grado de inversión
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Paraguay tiene uno de los contextos económicos más “envidiables” en la región, afirmó el ministro de Economía y Finanzas (MEF), Carlos Fernández Valdovinos, y sostuvo que el clima de negocios local resalta por la gran atracción de inversiones que se registraron en los últimos meses.
“Creo que se está materializando todo lo que siempre dijimos, que en términos de clima de negocios somos los mejores en la región”, manifestó Fernández Valdovinos a Unicanal al referir que varias empresas están apostando por Paraguay con capitales austeros de entre USD 20 y USD 30 millones, que dinamizan a la economía local con la inversión global.
El titular del MEF destacó el logro de una empresa local perteneciente a un grupo multinacional que obtuvo un fondo europeo por más de USD 320 millones para seguir invirtiendo en el rubro de bebidas y distribución, lo cual genera empleo y exige mano de obra calificada.
Acerca del grado de inversión, que será crucial para consolidar las bases sentadas en el país, comentó que los representantes de la calificadora Moody’s se quedaron satisfechos por los avances que se registraron en los últimos 12 meses en materia macroeconómica. “No soy obsesionado con el tema de cuándo nos van a otorgar el grado de inversión, pero nos mantienen perspectiva positiva y, si hacemos bien las cosas, eso va a llegar tarde o temprano”, enfatizó.
Acerca de la dinámica del crecimiento económico, recordó que en abril los indicadores ubicaron al ritmo de crecimiento en casi 5 %, y que si bien las proyecciones locales y extrajeras prevén un 3,8 % para 2024, existe una revisión y una tendencia al alza. “Eso nos hace sentir bien, se está haciendo un trabajo espléndido”, sostuvo el ministro de Economía.
Desde el MEF resaltaron los logros en cuanto a reformas estructurales, mejoras en la estrategia de financiamiento y acciones para la consolidación del plan de convergencia fiscal. Foto: Gentileza
Exponen avances económicos a Moody’s, a la espera de alcanzar el grado de inversión
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En el marco de la revisión anual de la calificación país de Paraguay 2024, el ministro de Economía y Finanzas (MEF), Carlos Fernández Valdovinos, acompañado del viceministro de Economía, Carlos Javier Charotti, se reunió con representantes de la calificadora de riesgos Moody’s, integrado por la vicepresidente Samar Mazaid y el analista Dylan Walsh, para exponer los avances del país en materia económica y fiscal durante el último año.
Fernández Valdovinos y Charotti resaltaron los logros en cuanto a reformas estructurales, mejoras en la estrategia de financiamiento y acciones para la consolidación del plan de convergencia fiscal, ante la consulta de los representantes de la calificadora, quienes pidieron detalles sobre la evolución y las perspectivas macroeconómicas, así como también otros aspectos relacionados a la gestión del gobierno desde agosto de 2023. Moodys por su parte, destacólos resultados que se obtuvieron en la negociación con Brasil para la fijación de la tarifa de Itaipú, para el periodo 2024-2026.
El ministro precisó toda la bondad de la economía paraguaya en términos de diversificación de la estructura productiva y recordó la potencia de la matriz energética de Paraguay, la cual viene generando interés de inversionistas internacionales para el desarrollo de proyectos de inversión, que servirán para promover el desarrollo económico-sostenible del país.
Calificación
Luego de cuatro años consecutivos desafiantes, Paraguay es uno de los pocos países de la región que logró mantener su calificación con tres agencias calificadoras de riesgo (Moody`s, Fitch y Standard & Poor’s, S&P), a pesar de los sucesivos choques externos, tales como la pandemia del covid-19, el conflicto geopolítico entre Rusia y Ucrania, y dos sequías.
Incluso, Paraguay tuvo una revisión al alza en febrero 2024 por parte de la calificadora S&P ubicándose a un peldaño del grado de inversión. La calificación actual que otorga Moody´s a Paraguay es Ba1, con perspectiva positiva, lo cual coloca al país a un escalón del grado de inversión.
En Paraguay, 8 de cada 10 trabajadores están empleados en una micro, pequeña o mediana empresa (Mipymes), según datos del Ministerio de Industria y Comercio (MIC). Foto: Archivo
Mipymes, motor laboral de Paraguay urge formalizarse para dar el gran salto
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Por Sofía Céspedes (sofia.cespedes@nacionmedia.com)
Actualmente, en Paraguay 8 de cada 10 trabajadores están empleados en una micro, pequeña o mediana empresa (Mipymes), según datos del Ministerio de Industria y Comercio (MIC). El sector incide en un 80 % en la generación de empleo, pero su contribución al producto interno bruto (PIB) es de menos del 20 %.
Este panorama genera un desafío importante para el Gobierno, a fin de seguir impulsando estrategias que orienten al crecimiento de las mipymes en el país, señaló el viceministro de Mipymes, Gustavo Giménez, a La Nación/Nación Media, y precisó que el plan de trabajo se basa en tres pilares.
El primer pilar es la formalización, que es un déficit en el presente. Unas 366.000 mipymes operan en el mercado de forma legal, mientras que cerca de 700.000 mipymes trabajan en la informalidad.
Gustavo Giménez, viceministro de Mipymes. Foto: Archivo
“Invitamos a nuestros emprendedores a formalizarse de manera ágil, sencilla, no costosa y digital, en lo posible. Y que este proceso de formalización les permita inmediatamente generar beneficios”, explicó Giménez.
El segundo pilar es el acceso a líneas de crédito, factor fundamental para el sector, así como las ventas a través del acceso al mercado, que es el tercer pilar. Para ello, están elaborando una plataforma de financiamiento alternativo que permitirá a las mipymes poder vender a grandes empresas y cobrar a plazos. “Queremos trabajar en la formalidad, el acceso a créditos y al mercado”, subrayó el viceministro.
Recordó que el Estado es el mayor comprador de la iniciativa privada y que en la ley de compra y suministro público existe una reserva de mercado del 20 % para las mipymes, y que ese es un ítem que debe aprovecharse, ya que se calcula que el sector puede vender cerca de USD 600 millones al Estado.
Este panorama genera un desafío importante para el Gobierno, a fin de seguir impulsando estrategias que orienten al crecimiento de las mipymes en el país. Foto: La Nación
“Realmente es una cuestión de tratar de orientar todos nuestros esfuerzos para que las mipymes sean más competitivas, para que generen más recursos, y ojalá en el corto o mediano plazo podamos superar ese 20 % en contribuciones al PIB”, manifestó y agregó que el sector mueve aproximadamente USD 7.500 millones por año.
Microeconomía
Desde el punto de vista gremial, que el sector tenga un alto porcentaje de fuerza laboral pero que facture en promedio G. 50 millones por mes (el 88 % de las mipymes) no se traduce en crecimiento verdadero, argumenta Luis Tavella, presidente de la Federación de Mipymes (Fedemipymes), a La Nación/Nación Media.
“Normalmente, todos tienen una mirada hacia la macroeconomía, que manejan las empresas de mayor tamaño, pero no tienen una mirada hacia la microeconomía, que es la que mueve el consumo, la que mueve nuestro sector, la que mueve el empleo. No se le da un tratamiento real”, cuestionó.
Luis Tavella, presidente de la Federación de Mipymes (Fedemipymes). Foto: Archivo
Informalidad
Acerca de los problemas que atraviesan las pequeñas y medianas empresas para ingresar a la formalidad, mencionó que todavía no existen ventajas que les permitan trabajar a la par de las empresas que operan formalmente, principalmente, por los costos operativos.
Como ejemplo, Tavella expuso que empresas que facturan entre USD 10 millones y USD 500 mil por año y mipymes que facturan G. 10 millones pueden tener costos similares, pero ingresos diferentes; esta asimetría refleja por qué algunos pueden operar legalmente y otros no.
“No se mira cuánto se le está cobrando a una mipymes para darse cuenta de que se le está cobrando exactamente igual que a una empresa de mayor tamaño; ese es uno de los graves problemas de la informalidad o de la falta de formalidad”, enfatizó el empresario.
El rol de las mipymes en Paraguay es muy importante. Foto: La Nación
“Dar el gran salto”
El rol de las mipymes en Paraguay es muy importante, por lo tanto, se debe elevar su productividad y competitividad para escalar y dar “el gran salto que el país anhela”, la industrialización, explicó a LN el economista de la consultora Mentú, Jorge Garicoche.
“Pasar de ser micro a ser pequeño, de pequeño a ser mediano y de mediano a grande me parece una cuestión demasiado interesante e importante. Creo que el modelo viene con la capacitación y formación integral del emprendimiento”, dijo y resaltó que esto puede lograrse con el modelo del Small Business Development Centers (SBDC).
Se trata de espacios dedicados a prestar servicios de información, capacitación y asistencia técnica de alto valor para mejorar la gestión empresarial de mipymes y emprendedores en el país.
Garicoche considera que sobrevivir en el mercado depende de varios aspectos y uno de los principales es la formalización, a la que se suma el acceso al crédito. “Antes de tener crédito, hay que saber manejar el flujo de caja; antes de saber manejar el flujo de caja, hay que tener los papeles en regla”, concluyó.
Jorge Garicoche, economista de la consultora Mentú. Foto: Archivo
Datos claves
- Unas 366.000 mipymes operan en el mercado de forma legal y cerca de 700.000 mipymes trabajan en la informalidad.
- El desafío es fortalecer la competitividad considerando que las micro, pequeñas y medianas empresas aportan al PIB menos del 20 %.
- El Estado es el mayor comprador de la iniciativa privada y que en la ley de compra y suministro público existe una reserva de mercado del 20 % para las mipymes.