Autoridades del equipo económico nacional han mantenido una serie de reuniones con diferentes calificadoras de riesgo en las últimas semanas. Una de ellas, Standard & Poor’s Global Ratings (S&P), fue la que elevó la calificación crediticia del país de BB a BB+.

Según explicó Liana Caballero, miembro del directorio del Banco Central del Paraguay (BCP), a La Nación/Nación Media, las calificadoras dieron una lista de recomendaciones al Gobierno para que Paraguay se acerque cada vez más al grado de inversión. Uno de los requisitos fue colocar bonos por lo menos por USD 400 millones en moneda local. En la última emisión de bonos se logró colocar ya US$ 500 millones, un 25 % sobre lo aconsejado.

Dio continuidad a los puntos que son necesarios para que el país llegue a “las grandes ligas”, y señaló que las reformas institucionales son parte esencial para obtener la calificación. “Tenemos en vista a la reforma del IPS (Instituto de Previsión Social), la reforma del Servicio Civil y la ley de administración financiera, son reformas importantes que nos van a acercar a países sólidos”, dijo Caballero a LN.

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Aseguró que se están “agotando las excusas” por parte de las calificadoras para retrasar el grado de inversión del país. Incluso, precisó que el mercado internacional ya considera a Paraguay como un país con grado de inversión por la confianza y respaldo que nos dan. “Si todo va bien, este año podemos tener una sorpresa favorable”, expresó.

Bonos

La emisión de bonos del Gobierno fue realizada esta semana por USD 1.000 millones. De ese monto, el 50 % fue exitosamente colocado en moneda local (USD 500 millones), a una tasa de 7,9 %, un nivel beneficioso en comparación al 8,7 % promedio de países de la región. La demanda de los bonos fue 2,5 veces más de lo ofertado, es decir, USD 1.200 millones.

Al respecto, Liana Caballero afirmó que esta confianza en la moneda local y en la administración pública se debe a la estabilidad macroeconómica, la solidez de la política monetaria desde hace 20 años y la consolidación de la política fiscal. A esto, acotó que valoraron que tras la pandemia, Paraguay fue uno de los pocos países que retornó a la meta de inflación con una convergencia fiscal, que para el 2026, estaría llegando al tope establecido de 1,5 %.

“Esto nos lleva a ser elegibles como un país que pueda emitir en su moneda local. El apetito de los inversores por el guaraní fue notable. No tenemos una volatilidad grande y eso hace que nos tengan confianza”, reiteró.

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