San Salvador. AFP.
Atisbando a través de una mira telescópica, el presidente salvadoreño Nayib Bukele, que impulsa una ofensiva contra las pandillas, posó con un arma en su despacho para anunciar este fin de semana en redes sociales la llegada de armamento al país.
“Ya vino el nuevo armamento...”, escribió escuetamente en su cuenta oficial de X, en inglés, y en Instagram, en español, sin dar mayores detalles, y publicando una foto en su oficina en Casa Presidencial.
Vestido con una camiseta verde y gorra blanca, Bukele empuña y apunta con un arma sofisticada, como lo hizo con otra a fines de setiembre, acumulando ayer domingo más de 2,9 millones de vistas y 40.900 “me gusta” en X y más de 300.000 en Instagram.
En respuesta a una escalada de la violencia atribuida a las pandillas que dejó 87 muertos en un fin de semana, Bukele declaró en marzo de 2022 una “guerra” contra esas bandas, amparado en un régimen de excepción cuestionado por organismos de derechos humanos porque permite detenciones sin orden judicial.
En 18 meses, 7.000 inocentes han sido liberados y hay poco más de 73.000 presuntos pandilleros detenidos, para los cuales Bukele inauguró en febrero una megacárcel de máxima seguridad, considerada la más grande de América, con capacidad para 40.000 personas, en Tecoluca, en el centro del país.
Desde 2022, Bukele comenzó a “modernizar” el armamento de la policía y del ejército, con nuevos fusiles Arad fabricados en Israel, drones, vehículos de combate, chalecos y cascos antibalas. En julio, el gobierno informó que habían entregado a la tropa más de 5.000 fusiles comprados para sustituir armas viejas y reforzar a las fuerzas especiales. Nueve de cada 10 salvadoreños, según las encuestas, respaldan la ofensiva que Bukele mantiene contra las pandillas.
Dejanos tu comentario
Santiago Peña asiste a ceremonia de investidura de Nayib Bukele
El presidente Santiago Peña viajó a El Salvador, luego de su visita a EE. UU., para participar de la ceremonia de investidura de Nayib Bukele como mandatario del país centroamericano, reelecto en el cargo. El jefe de Estado estuvo acompañado ayer sábado de la primera dama, Leticia Ocampos.
A través de encuentros ya mantenidos con su par salvadoreño, Peña había remarcado que se abocan a reforzar las bilateralidades en pos del progreso de ambas naciones. Con la presencia del mandatario nacional se fortalecen los lazos de amistad y cooperación entre Paraguay y El Salvador.
La Plaza Capitán General Gerardo Barrios, conocida como plaza Cívica y ubicada en la capital salvadoreña, fue el escenario que acogió el evento, en el que se encontraron presentes el rey de España, Felipe VI; aparte de los presidentes Peña y el mandatario de Argentina, Javier Milei.
Además, asistieron representaciones de Chile, Uruguay, Perú, República Dominicana, Brasil, Honduras, Costa Rica, entre otras, sin mencionar la presencia del secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas.
“Ahora que el presidente Bukele se embarca en su segundo mandato, quiero expresar la dedicación de Estados Unidos para apoyar el crecimiento y la prosperidad de El Salvador a través de una cooperación bilateral continua”, había manifestado Mayorkas a través de la red social X.
PRESIDENTE POPULAR
Bukele, de 42 años, había asumido como presidente de El Salvador en 2019, a través de la Gran Alianza por la Unidad Nacional (Gana). Goza de gran popularidad por la “guerra contra las pandillas” que lidera y con la que tiene controlada la seguridad en el país, lo cual, en parte, le valió su reelección.
Bukele asegura haber sanado al país del “cáncer” de las pandillas, a las que declaró la guerra, lo cual otros mandatarios de la región han tratado de replicar. Construyó así una megacárcel y desde marzo de 2022 El Salvador vive bajo un Estado de excepción.
CHARLA CON BUKELE
Tras una jornada intensa y plena de emociones que se vivieron durante el acto de asunción presidencial del mandatario salvadoreño Nayib Bukele, el presidente de la República de Paraguay Santiago Peña fue recibido en exclusiva con su comitiva por el mandatario centroamericano.
“Este país que le recibió hace casi 100 años a Agustín Pio Barrios “Mangoré” para que venga a vivir sus últimos años de vida en paz y tranquilidad fue un tema que lo hemos mencionado que anhelamos, soñamos los paraguayos de que Agustín Pío Barrios pueda volver a Paraguay. Así que es un tema que quedó en la agenda y vamos a seguir trabajando en breve”, reiteró
Dejanos tu comentario
La oposición salvadoreña queda golpeada por fuerza de Bukele
AFP
Al borde de la extinción, el partido de la exguerrilla izquierdista FMLN lucha por mantenerse en el escenario político de El Salvador, hegemonizado por el reelegido presidente Nayib Bukele. El izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) anunció una “reorganización total” tras el castigo sufrido en los comicios municipales recientes, ganados de manera aplastante por el partido de Bukele y sus aliados.
El FMLN, que no consiguió ninguna alcaldía, ya había sido vapuleado en las elecciones generales del 4 de febrero, en las que Bukele fue reelegido con el 85 % de los votos y su partido Nuevas Ideas ganó el 90 % de las bancas del Congreso. El candidato presidencial del Frente, Manuel Flores, obtuvo apenas el 6 % y por primera vez en casi tres décadas el FMLN no ganó ningún diputado.
“Ha pesado mucho la división que hay dentro del FMLN” y la falta de “una estrategia de trabajo territorial”, dice a la AFP el excomandante guerrillero Eugenio Chicas, ahora consultor electoral y columnista. Bukele justamente debutó en política en las filas del FMLN en 2012, pero el partido lo expulsó cinco años más tarde cuando era alcalde de San Salvador por una disputa con una concejala. En 2019, Bukele ganó la presidencia y acabó con el bipartidismo que imperaba desde el fin de la guerra civil en 1992 entre el FMLN y la derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena).
NUEVOS PARTIDOS
También Arena perdió muchos votos ante Bukele, pero al menos consiguió dos diputados, de un total de 60, y una alcaldía (de 44). Aunque el futuro de Arena también parece amenazado, las políticas de derecha no están en retirada en El Salvador, pues han sido asumidas por Bukele, según analistas.
El líder de Arena, Carlos García Saade, admite que su partido vive “momentos difíciles” y que le dieron la espalda prominentes empresarios que eran donantes. “Buena parte de los grupos económicos no están con Arena (...), están con el presidente” Bukele, explica a la AFP Ramón Villalta, director de la ONG Iniciativa Social para la Democracia.
El investigador universitario Carlos Carcach cree que tanto Arena como el FMLN deben dar ciertos pasos si quieren volver a sintonizar con los electores. “En el caso de Arena, yo sugeriría la desaparición del partido y la creación de un partido nuevo de corte ya no de ultraderecha, sino que de corte liberal”, dice Carcach a la AFP.
Dejanos tu comentario
El liderazgo de Bukele
- Por Gabriela Teasdale
- Socia del Club de Ejecutivos
Así como apuntaban todas las encuestas, Nayib Bukele logró un aplastante triunfo en las elecciones presidenciales celebradas el domingo pasado en El Salvador. Con más del 80 por ciento de los votos, se ubicó a una enorme distancia de su principal adversario en las urnas para asegurar que, en la contienda, su país rompió “todos los récords de todas las democracias en toda la historia del mundo”.
El “fenómeno Bukele”, como lo llaman los analistas, es bastante singular en una región centroamericana históricamente golpeada por conflictos internos, corrupción sistemática y mucha violencia. El resultado deja patente que una gran mayoría en El Salvador apoya a este joven gobernante a pesar de las críticas hacia sus métodos. Pero ¿cómo se forjó este líder y cuál es la clave de su éxito?
Antes de ser político, Bukele trabajó durante años en la agencia de publicidad de su familia, donde ganó experiencia en el diseño de campañas electorales para diferentes candidatos. En 2012 decidió que era el momento de lanzarse él mismo al “mercado” de la política y lo hizo con una estrategia innovadora. Todos sus mensajes en intervenciones públicas y publicaciones fueron rigurosamente planeados, así como su imagen: la de un candidato joven, con sangre nueva, que utiliza las redes sociales y viste ropa cómoda. Pero, sobre todo, la de un líder que sabe lo que la gente prioriza en un contexto complejo y con muchas carencias.
Creo que ahí radica mayormente la clave de su éxito, en haber sabido leer correctamente cuáles eran las necesidades más perentorias de gran parte de la población salvadoreña y trabajar en ese rumbo. En medio de un tremendo descontento por los niveles de violencia y los casos de corrupción que salpicaron a los partidos tradicionales y elevó el hartazgo de los ciudadanos, Bukele se mostró como un outsider, como alguien distinto, como una figura que llegaba para hacer las cosas de una manera diferente.
A sus 37 años se convirtió en el presidente más joven de América Latina en 2019 y durante su primer mandato implementó medidas también innovadoras, como las ayudas económicas que muchos salvadoreños recibieron por primera vez del Gobierno durante la pandemia de covid-19. Y aunque polémica, su postura de mano dura contra el crimen en un país con una de las tasas de asesinatos más altas del mundo lo volvió popular entre los salvadoreños que sufren a causa de las pandillas.
La oposición política de Bukele y los defensores de los derechos humanos en el campo internacional le cuestionan su autoritarismo y las extremas medidas de terrorismo de Estado que ha tomado, que considera radicales y hasta peligrosas para las frágiles instituciones salvadoreñas. Pero más allá de los cuestionamientos, resulta difícil ignorar ese respaldo inmenso que supo ganar de parte de su pueblo. Encuentro que la lección para todos los líderes a quienes les ha llamado la atención este fenómeno es menos racional: la clave está en saber leer lo que emocionalmente quiere la gente, mostrar duras acciones en favor de su seguridad y saber comunicarlo.
Y que ante la inercia del pasado se imponga siempre el pragmatismo de tomar acción.
Dejanos tu comentario
Presidente de Ecuador se desmarca de Bukele
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, se desmarcó de los métodos de su homólogo de El Salvador, Nayib Bukele, en su lucha contra las bandas narco, que emprendieron una nueva embestida en el país sudamericano que deja 18 muertos en seis días.
“Ecuador tiene una realidad diferente. Es un país multicultural, tiene diferentes problemas, algunos son similares, otros son diferentes y creo que tenemos una forma de pensar diferente”, dijo el mandatario en declaraciones a la BBC y divulgadas por la secretaría de Comunicación de la Presidencia.
Al estilo de Bukele, Noboa declaró esta semana la guerra a una veintena de organizaciones mafiosas, con unos 20.000 miembros que siembran el terror desde el domingo con motines carcelarios, guardias penitenciarios tomados como rehenes por presos y ataques con explosivos.
Lea más: Ecuador: 170 funcionarios están retenidos por presos
Asimismo, construirá dos prisiones de “súper máxima” seguridad con capacidad para más de 3.000 personas, con el objetivo de aislar a los reclusos más violentos, dentro de su plan de asumir el control de las penitenciarías convertidas en centros de operaciones para el tráfico de drogas a Estados Unidos y Europa. También planea instaurar buques prisiones en el mar, con el mismo fin.
“Creo que la forma en que debemos resolver los problemas aquí es a la manera ecuatoriana, no a la manera salvadoreña”, insistió Noboa, autoproclamado de centroizquierda y apoyado por fuerzas de derecha. El mandatario ecuatoriano suele ser comparado con Bukele, criticado por organizaciones de derechos humanos por sus detenciones arbitrarias y autoritarismo.
Lea también: Cuatro claves sobre los hutíes
Ha encarcelado a más de 73.000 presuntos criminales bajo un polémico estado de emergencia. Imágenes de cientos de reclusos tatuados, descalzos, encadenados y con sus torsos desnudos han sido difundidas por el propio Bukele y se convirtieron en su sello. Unas 7.000 personas inocentes han sido liberadas.
“Somos muy estrictos contra el terrorismo, la corrupción, pero también pensamos en el crecimiento. Crecimiento de la sociedad, crecimiento de los servicios, crecimiento del comercio y de la economía”, sostuvo Noboa.
“No podemos centrarnos solo en una cosa (en el combate al crimen), y creo que eso es algo que me gustaría diferenciarme con El Salvador”, añadió el gobernante ecuatoriano, en el poder desde noviembre. Ante la reciente ola de violencia y la presión del narco contra el Estado, Noboa aseguró que no dará su brazo a torcer: “Creo que vamos a ganar y no dejaré de pelear hasta conseguirlo”, dijo.
Fuente: AFP.