Washington, Estados Unidos | AFP |
El presidente estadounidense, Donald Trump, dijo el martes que no está "feliz" con el acuerdo preliminar que alcanzaron los legisladores para proporcionar fondos para un muro fronterizo con México, pero agregó que no era probable otro cierre del gobierno.
"No puedo decir que estoy feliz, no puedo decir que estoy emocionado", declaró en una reunión de gabinete en la Casa Blanca. Pero indicó que podría complementar la oferta del Congreso con otras fuentes y así abandonar la disputa.
"El muro se construirá de todos modos", añadió, sugiriendo que sacará fondos adicionales de "áreas mucho menos importantes".
Los legisladores estadounidenses alcanzaron el lunes un acuerdo preliminar para proporcionar 1.300 millones de dólares para el muro de Trump, lejos de los 5.700 millones pretendidos por el presidente.
El acuerdo debe aún ser votado por el Congreso y aprobado por la presidencia.
Trump no ha dado una respuesta definitiva al respecto, y el lunes por la noche solo dijo ante una multitud de simpatizantes en un mitin en la ciudad fronteriza de El Paso, Texas, que "probablemente haya buenas noticias, pero quién sabe".
El dinero, junto con otras medidas de seguridad fronteriza, se presentó como parte de un acuerdo viable para satisfacer a ambas partes y permitir que Trump deje de lado su amenaza de volver a paralizar el gobierno desde el viernes.
En diciembre, Trump intentó presionar al Congreso para que aprobara los 5.700 millones de dólares al negarse a aprobar la financiación de servicios del gobierno que no tienen nada que ver con el muro, dejando sin paga a 800.000 funcionarios -desde agentes del FBI hasta seguridad aeroportuaria- durante cinco semanas.
Los demócratas se negaron a ceder y Trump se vio forzado a recular, lo que permitió que se abrieran nuevas negociaciones con un plazo fijado hasta este viernes.
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Revista Time revela el programa de gobierno en caso de que Trump logre un segundo mandato
Donald Trump esboza cómo sería un eventual segundo mandato como presidente en un artículo publicado este martes por la revista Time: vía libre a los estados que prohíben el aborto, desplegar el ejército para deportar a los migrantes y condicionar la ayuda militar a los aliados de Estados Unidos.
El magnate republicano, que se enfrenta al presidente Joe Biden en las elecciones de noviembre, respondió a preguntas en dos entrevistas, una en persona y otra por teléfono, sobre lo que haría si ganara.
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Uno de los interrogantes se refería a la interrupción voluntaria del embarazo, uno de los grandes temas de la campaña. Trump, de 77 años, actualmente procesado en Nueva York en una de las muchas investigaciones abiertas en su contra, eludió la pregunta de si vetaría una ley federal que restringe duramente ese derecho.
“No tengo que vetarla porque ahora todo vuelve a los estados”, dijo, en referencia a una sentencia de la Corte Suprema de 2022 que puso fin a la protección federal del derecho al aborto y devolvió esa competencia a los gobiernos estatales.
También dijo que dejaría que los estados decidieran si procesan a las mujeres que abortan fuera de plazo. “Creo que podrían hacerlo”, contestó.
En cuanto a la migración, otro de los temas centrales de los comicios, el republicano repitió que llevaría a cabo deportaciones masivas.
“La Guardia Nacional debería poder hacerlo. Si no, utilizaría el ejército”, es decir, las tropas federales, declaró a Time.
“Estos no son civiles. Son personas que no están legalmente en nuestro país. Esto es una invasión”, dijo Trump a la revista cuando el entrevistador puntualizó que las leyes locales impiden usar el ejército contra la población civil en suelo estadounidense.
Trump aseguró que “no descartaría nada” sobre la creación de campos de detención de migrantes, pero creía que no serían necesarios porque su programa de deportación tendría éxito.
Ayuda a Ucrania
En cuanto a la economía, el exmandatario dijo que preveía derechos de aduana de “más del 10%” sobre todas las importaciones.
Y sobre la ayuda a Ucrania, Trump afirmó: “No daré (más ayuda) si Europa no empieza a hacer tanto” como Estados Unidos.
El republicano también cree que si Corea del Sur quiere que los miles de soldados estadounidenses apostados en su territorio se queden, tendrá que pagar más: “¿Por qué deberíamos defender a alguien? Y estamos hablando de un país muy rico”.
“Creo que el enemigo interior es, en muchos casos, mucho más peligroso para nuestro país que los enemigos exteriores como China, Rusia y otros”, afirmó Trump, que en varias ocasiones ha alabado a líderes autoritarios.
Añadió que está “absolutamente” dispuesto a indultar a todos los condenados por invadir el Capitolio el 6 de enero de 2021 en un intento por impedir que el Congreso certificara la victoria de su rival Joe Biden.
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Preguntado por la posibilidad de violencia política tras las elecciones del 5 de noviembre, Trump, también procesado por su papel en el asalto del 6 de enero y por fraude electoral en el estado de Georgia, entre otros cargos, respondió: “Si no ganamos, ya sabes, depende”.
El republicano, que nunca ha reconocido la victoria de su oponente demócrata en 2020, también cree que si la Corte Suprema no le concede la inmunidad presidencial, como él solicita, Biden “será procesado por todos sus crímenes”.
Fuente: AFP
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Biden desafía a un debate público a Trump y este le toma el guante
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo durante una entrevista este viernes que estaba dispuesto a debatir públicamente con su predecesor y oponente republicano Donald Trump, a quien se enfrentará en las elecciones de noviembre.
Cuando el presentador Howard Stern le preguntó si participaría en un debate público con Trump, el demócrata de 81 años y aspirante a un segundo mandato contestó: “Lo haré, en algún lugar. No sé cuándo. Estaría feliz de poder hacerlo”.
El equipo de Biden lleva meses sin pronunciarse sobre su disposición a seguir la tradición de un debate televisado entre candidatos, normalmente moderado por un periodista conocido.
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Durante los últimos meses Trump no quiso participar en los debates de las primarias republicanas pero eso no le impidió arrasar votación tras votación. Y sus rivales se fueron retirando de la contienda.
Pero Trump parece entusiasmado con la idea de debatir con el hombre que lo derrotó en las elecciones de 2020.
“EN CUALQUIER MOMENTO, DONDE SEA, EN CUALQUIER LUGAR”, afirmó este viernes en su red Truth Social. “Propongo el lunes por la noche, el martes por la noche o el miércoles por la noche, durante mi mitin en Michigan”, añadió.
En el mismo mensaje sugirió celebrar el debate “esta noche, en el tribunal”. “¡Me quedaré esperando!”.
El republicano está siendo juzgado en Nueva York por falsificación de registros comerciales para ocultar un pago a una actriz porno con el fin de comprar su silencio por una supuesta relación extramatrimonial antes de las elecciones de 2016.
Biden, quien ha calificado a Trump de amenaza para la democracia, declaró a los periodistas el mes pasado que un posible debate con el magnate inmobiliario “depende de su comportamiento”.
La Comisión no partidista de Debates Presidenciales (CPD) ya ha fijado tres fechas y lugares para que Trump y Biden se enfrenten cara a cara para los comicios de 2024, en universidades estadounidenses en septiembre y octubre.
Pero Trump criticó a la CPD por considerarla sesgada a favor del demócrata por haber previsto trasladar en 2020 un tercer y último debate a un formato por videoconferencia debido a la pandemia de covid 19.
El entonces presidente Trump acudió al segundo debate de 2020 contra Biden solo tres días antes de dar positivo por covid.
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Biden dijo entonces que no participaría en otro debate en persona con él mientras el republicano todavía estuviera enfermo.
Fuente: AFP
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Biden, que defiende el derecho al aborto, ataca a Trump en plena campaña electoral
Joe Biden volvió a arremeter este martes contra Donald Trump, su rival en las próximas elecciones presidenciales de noviembre, por el retroceso del derecho al aborto en Estados Unidos, uno de los principales ejes de la campaña del mandatario demócrata.
“Los votantes van a pedir cuentas a Trump”, declaró Biden en Tampa, en Florida (sureste), durante un acto celebrado en una universidad.
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Poco después de que Trump abandonara el tribunal donde se le juzga en Nueva York por pagos ocultos a una exactriz porno, el presidente lo acusó de hacer retroceder a las mujeres estadounidenses “160 años en el tiempo”.
Tomando como ejemplo Florida, donde el aborto estará prohibido después de las seis semanas de embarazo a partir del 1 de mayo, Biden aseguró: “Una persona es responsable de esta pesadilla; y lo reconoce y se jacta de ello: Donald Trump”.
El exmagnate, de 77 años, elogia con frecuencia el hecho de que la Corte Suprema anulara en 2022 la protección federal del derecho al aborto. Una decisión que fue posible porque, durante su mandato (2019-2021), el entonces presidente republicano inclinó el alto tribunal hacia el bando conservador con el nombramiento de tres de sus nueve jueces.
Trump “describió (esta reversión de la jurisprudencia) como un milagro. Tal vez provenga de esa biblia que intenta vender..... Casi estuve tentado de comprarla para ver qué contenía”, dijo Biden, refiriéndose a una operación de recaudación de fondos lanzada recientemente por su rival, quien se ha asociado con una estrella de la música country para comerciar ese libro religioso.
El presidente Biden, un católico practicante, se ha convertido en uno de los defensores más enérgicos del derecho a la interrupción voluntaria del embarazo, muy consciente de que se trata de una de las principales debilidades políticas de Trump.
El republicano intenta encontrar un equilibrio entre una opinión pública estadounidense favorable en su mayoría al derecho a abortar y la parte de su electorado que proviene de la derecha religiosa.
Si gana Trump, que prohíba el aborto
Desde la sentencia de la Corte Suprema, una veintena de estados del país han prohibido o restringido con dureza el acceso al aborto.
Muchos conservadores quieren ahora que Trump, si es elegido, defienda una ley que prohíba el aborto en todo el territorio federal. Pero el expresidente se ha negado a hacerlo, argumentando que la jurisdicción debe seguir siendo de los estados.
“No se trata de los derechos de los estados, se trata de los derechos de las mujeres”, zanjó Biden este martes, señalando que todos los referendos locales sobre el tema habían respaldado el derecho al aborto.
El presidente predijo que Florida se añadiría a la lista. Los habitantes del estado podrán elegir en los comicios del 5 noviembre si amplían o no el plazo legal para abortar, después de que la Corte Suprema estatal permitiera la celebración de un referéndum sobre este asunto.
Y el equipo de campaña de Biden sueña con un impulso lo bastante fuerte como para que el estado caiga en manos del demócrata.
“Creo que se puede conseguir”, dijo el mandatario en Tampa, a pesar de que Florida ha votado dos veces a Trump, en 2016 y 2020.
“Florida no es un estado fácil de ganar, pero (Biden) puede hacerlo”, había llegado a decir el 1 de abril su jefa de campaña, Julie Chávez Rodríguez.
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El estado del sureste ha sido durante mucho tiempo un estado péndulo, que podía inclinarse hacia la derecha o la izquierda en las presidenciales. Pero Florida se ha afianzado más en el lado conservador en las últimas elecciones.
Fuente: AFP
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Completan los 12 miembros del jurado que decidirán la suerte de Donald Trump
El juez instructor del juicio a Donald Trump concluyó la selección de los 12 miembros del jurado que sellarán la suerte del primer expresidente en la historia de Estados Unidos en sentarse en el banquillo y que aspira a volver a la Casa Blanca en las elecciones de noviembre.
“Tengo esperanza” de que el proceso terminará este viernes, dijo el juez instructor, Juan Merchan al término de la sesión de este jueves.
El viernes, debe seleccionar a los seis suplentes del jurado, en un proceso que ha avanzado mucho más rápido de lo previsto.
Al regresar este jueves a la sala del Tribunal Supremo de Manhattan, dos de los siete jurados que habían sido seleccionados el martes -el miércoles no hubo audiencia- fueron recusados, por lo que el juez tuvo que reemplazarlos además de seleccionar a los cinco jurados que faltaban.
Un grupo de 22 candidatos regresa este viernes a la sala para responder al cuestionario de 42 preguntas sobre su profesión, lugar de trabajo, diarios que leen y redes sociales que utilizan, que tanto defensa como fiscalía escrutan con lupa para determinar sus inclinaciones políticas.
El juez de origen colombiano espera que el lunes empiecen los alegatos del caso, previos al desfile de testigos, aunque levantará la sesión a las 14:00 locales para acomodar a las personas que celebran la pascua judía.
El tribunal mantendrá ese mismo horario reducido el martes, a pesar de las objeciones de los abogados de Trump, que solicitaron todo el día libre para dar cabida a las necesidades religiosas de un miembro de su equipo legal.
La imparcialidad y el anonimato -por razones de seguridad y evitar el hostigamiento-, son esenciales para definir un jurado que tendrá la enorme responsabilidad de sellar la suerte del aspirante del Partido Republicano a regresar a la Casa Blanca en los comicios del 5 de noviembre próximo, frente al demócrata Joe Biden.
La fiscalía de Manhattan acusa al magnate de 34 falsificaciones de documentos contables de la empresa familiar Trump Organization para comprar el silencio de una exactriz de cine porno por una relación extramatrimonial para que no interfiriera en su campaña de 2016, que ganó frente a la demócrata Hillary Clinton.
Entre los testigos de la fiscalía se encuentra el exabogado personal del magnate, Michael Cohen, que fue quien pagó de su bolsillo a la exactriz Stormy Daniels, haciéndolo pasar por gastos legales, por lo que ya fue condenado tras declararse culpable.
El magnate republicano se ha declarado no culpable de las acusaciones de la fiscalía de Manhattan.
Objeto de una prohibición de hablar de personas relacionadas con el caso, el juez ha programado una audiencia para la próxima semana para analizar si Trump debe ser declarado en desacato por violar repetidamente dicha orden.
El abogado defensor de Trump, Todd Blanche pidió los nombres de los primeros tres testigos, pero el fiscal Joshua Steinglass se negó a proporcionarlos, al señalar que que es una cortesía que normalmente extienden, pero “el señor Trump ha estado tuiteando sobre los testigos”.
“No puedo culparles por ello”, reaccionó el juez ante esa negativa.
Unánime
Para que Trump, de 77 años, sea declarado culpable el jurado debe alcanzar un veredicto unánime. “Es una vergüenza”, dijo el magnate republicano que se siente víctima de una “caza de brujas” de los demócratas para impedirle su anhelado regreso a la Casa Blanca.
“Llevo sentado aquí días, desde la mañana a la noche en esta sala helada”, dijo Trump al término de la tercera jornada del juicio.
El magnate republicano critica que tenga que estar en la corte en vez de hacer campaña política como su probable competidor Joe Biden, actual inquilino de la Casa Blanca, al que culpa de orquestar una cruzada judicial en su contra.
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“Debería estar ahora mismo en Pensilvania, en Florida, en muchos otros estados, en Carolina del Norte, en Georgia, haciendo campaña”, dijo el martes.
Además del juicio en Manhattan, el magnate republicano tiene otros frentes judiciales abiertos por intentar revertir los resultados electorales de 2020 para permanecer en la Casa Blanca y por el manejo de documentos secretos tras abandonar la presidencia en 2021, aunque es poco probable que se realicen antes de las elecciones de noviembre.
Fuente: AFP