Olimpia sacó a relu­cir su garra y peleó como pudo ante un aplastante Fluminese, que ganó en casa 2-0 en el juego de ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores para dejar la definición de la serie en Asunción la próxima semana.

El Decano aguantó el ase­dio del rival con mucha entrega y hasta con suerte, porque el dominio del local era pleno. Arrinconó en su área a la visita que tuvo la baja inesperada de su capi­tán Richard Ortiz, quien en el calentamiento sufrió una molestia muscular. Lo reemplazó Júnior Barreto, quien formó parte de la línea defensiva con 5 hom­bres. Ramón Martínez fue el único hombre de conten­ción en el medio, auxiliado por Cardozo y Fernández, una zona muy frágil que des­bordó el local.

El equipo de Río persistió y rompió la paridad recién en el minuto 43 con el tanto de André, quien disparó desde fuera del área y su tiro se des­vió en Mateo Gamarra para engañar al portero Espínola, quien ya se inclinaba a bus­car el balón. Olimpia tuvo arriba solo a Walter Gonzá­lez y generó pocas chances sin la precisión ni claridad esperada.

En la complementaria Arce oxigenó su equipo con el ingreso de Paiva por Gonzá­lez y Gómez por Torres, pero siguió con su libreto de defen­derse y llegó la segunda con­quista a través de Germán Cano (59′), para complicar aún más al Franjeado, que salió a presionar un poco más arriba, teniendo un poco más el balón.

Gran trabajo de Barreto, Gamarra y el portero Espí­nola, quien tuvo intervencio­nes importantes. Faltando 10 minutos para el final, se pro­dujo el retorno esperado de Derlis González. El marcador quedó cortó, porque Cano, Keno, Kennedy, Ganso y Arias pudieron aumentar, pero todo se definirá en la revancha en Asunción.

Dejanos tu comentario