Forzado a jugar en Asunción de local su partido por la ter­cera fase de la Copa Liberta­dores debido a la pandemia de covid-19, el ecuatoriano Inde­pendiente del Valle recibe hoy, desde las 18:15, al Gremio en la misma ciudad en la que hizo historia en el 2019 cuando ganó la Copa Sudamericana.

La prohibición establecida por las autoridades sanitarias de Ecuador para que el partido de esta serie se jugara el miérco­les en Quito por el contagio de coronavirus detectado en tres integrantes de la delegación brasileña, obligó a la Conme­bol a reprogramar el choque para este viernes en la capital paraguaya.

El juego será en el estadio Defensores del Chaco, con la presencia del goleador paraguayo Brian Montenegro, quien está pasando por un gran momento en el equipo ecuato­riano. La programación sufrió, sin embargo, una nueva per­turbación ante un amparo presentado en los tribunales por un ciudadano paraguayo que pidió la suspensión del juego por el peligro de conta­gio. La Conmebol alega que la “burbuja sanitaria” le permite agendar partidos de la entidad en Asunción, en cuya perife­ria tiene su sede el organismo. “Si se suspendiera por orden judicial, se deberían suspender todos los partidos del campeo­nato nacional inclusive”, dijo una fuente de la Asociación Paraguaya de Fútbol a la AFP.

VARIAS BAJAS

La delegación de Gremio se trasladó directamente de Quito a Asunción sin cuatro de sus jugadores, que regresa­ron a Brasil: Vanderson y Paulo Víctor (con covid-19 positivo) y Víctor Ferraz y Emanuel (con sospechas de contagio). Tam­poco lo acompaña su adiestra­dor, Renato Gaúcho, quien se quedó en Porto Alegre por sos­pechas de haber contraído el coronavirus.

Lo sustituye su ayudante téc­nico, Alexandre Mendes.

Dejanos tu comentario