“Hay que hacer caca todos los días y mejor si es varias veces al día”....sí, solemos escuchar esto y son muchos los que piensan que defecar diariamente y más de una vez es sinónimo de una vida saludable. Ahora bien, se trata de un mito o de una realidad?
Los entendidos en la materia sostienen que es normal hacer varias deposiciones al día, como una sola vez cada varios días. La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria explica que la frecuencia depende de la persona e incluso que esta varía de un día a otro, ya que influyen varios factores como la edad, el sexo, la alimentación, el ejercicio físico, estrés, personalidad, entre otros.
Lo mínimo sería ir de cuerpo tres veces a la semana; en caso contrario, se considera que la persona sufre de estreñimiento, que consiste en heces duras y grandes difíciles de evacuar. Ésta causa deposiciones dolorosas, que pueden dañar la mucosa intestinal (generar fisuras) y producir dolor abdominal e incluso sangrado anal.
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Para evitar el estreñimiento, es importante llevar una dieta equilibrada, rica en frutas y verduras, suficiente aporte de agua (ideal 2 litros al día) y adquirir buenos hábitos de evacuación intestinal, por ejemplo, educar al organismo para evacuar después de las comidas.
Son varias las causas del estreñimiento, como el uso de medicamentos (causa frecuente de constipación en los adultos mayores), colon irritable con constipación, problemas tiroideos, causas mecánicas y alteraciones de motilidad (movilidad intestinal), entre otras.
En cualquier caso, la recomendación de los gastroenterólogos es evitar posponer habitualmente las deposiciones y ralentizar el tiempo de tránsito intestinal, ya que puede derivar a un mayor riesgo de problemas como cáncer de intestino, diverticulosis (pequeñas bolsas del revestimiento del intestino que sobresalen a través de la pared intestinal), hemorroides y prolapso (la mucosa del recto desciende a través del ano). Así que, si tenés ganas, directo al baño!
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Advierten que pasar mucho tiempo en el baño revisando el celular puede ser perjudicial
Es una nueva costumbre ir hasta el baño con el teléfono celular y pasar varios minutos, incluso horas, sentados viendo las redes sociales, pero médicos afirman que este hobby puede ser perjudicial para la salud. Recomiendan no llevar libros o periódicos porque tienen el mismo efecto, además, por una cuestión de higiene, ya que las bacterias permanecen igual tras lavarse las manos.
Según el coloproctólogo Rodrigo Bernard, el uso de dispositivos o libros en el baño puede atentar contra la salud de las personas, ya que suelen pasar varias horas sentadas y expuestas a los agentes contaminantes propios de un baño. Los celulares pueden contaminarse con cualquier tipo de bacterias que pueden generar un sin fin de enfermedades.
“Lo más común que suele ocurrir es que justamente, por entrar con el celular, lleve una bacteria y termine en una gastroenteritis, tener diarrea y empezar a tener fiebre. Con la publicación que hicimos de no usar los teléfonos, no entrar con libros para leer en el baño, es una cuestión también de higiene”, expresó el profesional a la 650 AM.
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Indicó que permanecer mucho tiempo sentado hace que el cuerpo se acostumbre a evacuar más lento las necesidades fisiológicas y que esto puede acarrear una serie de problemas renales, pero especialmente para el colon. “Uno de los problemas puede ser la acumulación de desechos dentro de nuestro cuerpo, que tarda más en salir, se reseca y ya empieza a haber complicaciones perianales”, confirmó.
Apuntó que un reciente artículo médico afirma que es lo mismo que no lavarse las manos si se ingresa con un objeto en el baño para hacer las necesidades. “Cada vez que una persona va a ir al baño, un reflejo tarda más en aparecer y entonces, tipo que va causando un acostumbramiento al cuerpo y cada vez hay más dificultad para evacuar, eso puede ser un riesgo”, puntualizó.
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Sepa cómo evitar el estreñimiento, uno de los más frecuentes trastornos gastrointestinales
La frecuencia defecatoria varía en cada persona, pero cuando la evacuación es menos de tres veces por semana ya es un signo de estreñimiento. El gastroenterólogo Elías Morán habló de los factores de riesgo para el estreñimiento -que por lo general es de tipo nutricional- y de las complicaciones cuando se convierte en una afección crónica.
“El estreñimiento es la dificultad para lograr una evacuación de las heces que sea satisfactoria y completa. Está generalmente acompañado de otros síntomas como ir al baño menos de tres veces a la semana, heces duras, dificultad o esfuerzo para evacuar y una sensación de evacuación incompleta”, señaló el doctor Morán a La Nación/Nación Media.
Según el médico, en la gran mayoría de los casos el estreñimiento no es un problema de salud preocupante, al estar asociado con un cuadro agudo ocasionado por un cambio en la dieta. “Por ejemplo, pudo haber sido una deshidratación o una infección o un cambio en el estilo de vida, ya sea en el trabajo, un viaje”, expresó.
Se debe prestar atención cuando la falta de defecación va acompañada por signos de alarma como sangrados en las heces, anemia, dolor abdominal intenso y persistente o cuando se trata de una historia familiar previa de cáncer de colon.
Otro indicador de alarma puede ser el hallazgo de una masa abdominal palpable mediante un examen físico. “En los mayores de 50 años hay un cambio brusco en el hábito evacuatorio. Una persona que se va todos los días, de repente muy rápidamente, deja de ir al baño y persiste ese cambio, es muy llamativo”, significó.
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Causas funcionales y orgánicas
Las causas son multifactoriales que incluyen aspectos funcionales y orgánicos. “Las causas funcionales están relacionadas con la dieta baja en fibra, la baja ingesta de líquidos, el estar sedentarios. En ciertas mujeres principalmente hay trastornos del piso pélvico. Las mujeres que hicieron mucho esfuerzo durante el parto generalmente pueden tener también dificultad para evacuar”, explicó el especialista a LN.
Se habla de causas orgánicas cuando aparecen enfermedades asociadas con trastornos neurológicos como Parkinson y neuropatía diabética. Una diabetes mal controlada y el hipotiroidismo, así como las enfermedades digestivas e inflamatorias intestinales pueden producir estreñimiento. El cáncer colorrectal es la causa más frecuente de estreñimiento.
Ciertos medicamentos también pueden causar estreñimiento por ejemplo algunos antidepresivos, analgésicos y los diuréticos, conforme indicó.
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¿Cómo se diagnostica?
El diagnóstico se basa preferentemente en la historia clínica y la evaluación física del paciente. “Generalmente, lo que suele complementar es preguntar al paciente la consistencia de las heces. Hay una escala gráfica que se llama la escala de Bristol que está validada a nivel mundial donde viendo la forma de las heces y la consistencia uno puede saber si tiene o no estreñimiento”, puntualizó.
Se complementa con análisis de sangre y colonoscopia si hay signos de alarma o factores de riesgo para cáncer.
“El estreñimiento no va a ocasionar un cáncer colorrectal. Lo que puede hacer es empeorar una patología hemorroidal, porque al hacer esfuerzo y aumentar la presión del abdomen puede hacer que las venas de las hemorroides se pueden agrandar y puedan sangrar”, aclaró el doctor Morán.
Las principales opciones de tratamiento implican el cambio del estilo de vida y alimentación adecuada. “Incluir fibra en la dieta de manera regular y a lo largo del día es lo clave. Y tercero es el ejercicio físico, caminata, trote, nadar”, afirmó.
En otros casos se apela al tratamiento farmacológico con el uso de varios tipos de laxantes, entre ellos los formadores de masa que ayudan a mejorar la consistencia de las heces y fáciles de evacuar.
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DATOS CLAVE
-La frecuencia defecatoria varía en cada persona, pero cuando la evacuación es menos de tres veces por semana ya es un signo de estreñimiento.
- El estreñimiento es la dificultad para lograr una evacuación de las heces que sea satisfactoria y completa.
-Se debe prestar atención cuando la falta de defecación va acompañada por signos de alarma como sangrados en las heces, anemia, dolor abdominal intenso y persistente o cuando se trata de una historia familiar previa de cáncer de colon.
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Día Mundial de la Diabetes: prevención requiere un estilo de vida saludable
El 14 de noviembre se celebra el Día Mundial de la Diabetes, fecha que ayuda a concienciar sobre el impacto que tiene en la salud esta enfermedad crónica. Busca también destacar las oportunidades que existen para fortalecer la prevención, diagnóstico y el tratamiento de la misma. Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la diabetes es una enfermedad metabólica crónica caracterizada por niveles elevados de glucosa en sangre (o azúcar en sangre), que con el tiempo conduce a daños graves en el corazón, los vasos sanguíneos, los ojos, los riñones y los nervios.
La OPS explica que esta afección posee varias clasificaciones, entre ellas la diabetes tipo 1, una vez conocida como diabetes juvenil o diabetes insulinodependiente, que es una afección crónica en la que el páncreas produce poca o ninguna insulina por sí mismo. La otra y más común es la diabetes tipo 2, que se produce en jóvenes y adultos, y ocurre cuando el cuerpo se vuelve resistente a la insulina o no produce suficiente.
La doctora Rosa Vega, coordinadora de la Unidad de Endocrinología del Instituto de Previsión Social (IPS), sede Ingavi, comentó que en Paraguay, el 10.6 % de la población tiene diabetes. Además, según la Federación Internacional de Diabetes; el 36 % de las personas que padecen la afección experimenta ansiedad y que el 63 % de los pacientes tienen miedo a desarrollar complicaciones relacionadas con ésta; el 28 % se encuentra difícil en encontrar una actitud positiva respecto a su condición.
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Entre los factores de riesgo para contraer el padecimiento se encuentran el sobrepeso, la inactividad física, los antecedentes familiares y enfermedades de base como la lipidemia o la hipertensión. En las últimas tres décadas, la prevalencia de la diabetes tipo 2 ha aumentado drásticamente en países de todos los niveles. Las causas de esta enfermedad tienden a ser una mezcla de factores genéticos y estilo de vida, por lo que el doctor Víctor Arias, director del Programa Nacional de Diabetes del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, resaltó la importancia de llevar una vida saludable y equilibrada para prevenir el desarrollo de enfermedades crónicas como esta.
Es importante mencionar que la diabetes puede llevar a una serie de complicaciones que terminan incluso en la muerte, por lo que su prevención es de sumo valor para preservar vidas. “El bienestar no es solo para personas sin diabetes, sino para todas”, señaló el doctor Arias. “Llevar una vida saludable es fundamental para prevenir enfermedades crónicas y mejorar la calidad de vida”.
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En este mes que conmemora la lucha de miles, el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social recuerda algunas medidas que ayudan a prevenir esta y más enfermedades, entre ellas se encuentran: alimentación saludable y equilibrada, actividad física regular, evitar hábitos tóxicos como el alcohol, el cigarrillo y el vapeador, manejo saludable del estrés y relajación, participación en actividades al aire libre y recreativas. En el caso de los niños, es importante darles espacio para la actividad física, el juego y el desarrollo.
Además, Vega invita a un evento que conmemora la fecha el jueves 14 de 10:00 a 12:00 en IPS Ingavi (Capitán Rivas y Río Ypané, San Lorenzo), donde las especialistas brindarán información, asesoramientos nutricionales, controles de glucemia capilar y actividades físicas con profesionales de fisioterapia. La clausura se dará el viernes 15 de noviembre a partir de las 14:00, teniendo como protagonistas a los pacientes del centro, que presentarán bailes, canto y poesía.
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Los kambá: un reflejo de la historia afroparaguaya
- Fotos: Gentileza
En esta edición de Mito o Realidad, el investigador Ángel Piccinini analiza el origen de la palabra “kambá”, un término utilizado para referirse a la población afrodescendiente, que significa “negro” en idioma guaraní y cuyo origen expone desde el aspecto histórico y lingüístico.
Durante la era del comercio transatlántico de esclavos, los portugueses capturaron miembros de tribus africanas y los transportaron a América como esclavos. Algunos de estos individuos llegaron a Paraguay o a regiones cercanas. Los primeros esclavos de color llegaron a la región con los conquistadores españoles y portugueses.
La presencia africana en Paraguay tuvo un crecimiento significativo en las décadas siguientes. Para 1799, de una población total de 108.070 personas, 12.546 eran afrodescendientes, de los cuales 7.948 eran libres y 4.598 aún esclavos. Este aumento continuó incluso después de la independencia del país. En 1820, se registra la entrada de un contingente de afrodescendientes orientales que acompañaron al caudillo uruguayo José Gervasio Artigas cuando pidió asilo al Dr. José Gaspar Rodríguez de Francia.
RAÍCES
La teoría más plausible sugiere que “kambá” tiene sus raíces en África, específicamente en el pueblo Kamba (también conocido como Akamba o Wakamba). Este grupo étnico bantú es originario de Kenia, donde habitan una región llamada Ukambani, que abarca los actuales condados de Makueni, Kitui y Machakos.
Es importante notar que la asociación de la voz “kambá” con el idioma guaraní es probablemente el resultado de un proceso de adaptación lingüística más que de un origen guaraní auténtico.
Esta teoría explica por qué la palabra existe en guaraní a pesar de que los guaraníes no tuvieron contacto con africanos antes de la llegada de los europeos a América. Con el tiempo, el término “kambá” se incorporó al vocabulario, integrándolo y usándolo para referirse a personas de ascendencia africana.
“Otra posibilidad es que sea un préstamo lingüístico del quechua boliviano y que provenga del vocablo ‘kampas’, etnónimo para designar a ‘cierta tribu salvaje de origen boliviano’, luego transformado y vulgarizado a ‘cambas’, término genérico para designar a los habitantes ‘mestizos, blancos y morenos’ de los llanos bolivianos, como los departamentos de Santa Cruz, Beni y Pando”, refiere un artículo publicado por el Centro de Estudios Arqueológicos e Históricos del Paraguay (CEAHP).
ESTEREOTIPACIÓN
Un capítulo significativo en la historia de esta palabra ocurrió durante la guerra contra la Triple Alianza (1864-1870). En este conflicto, los paraguayos utilizaban términos despectivos como “kambá” y “macaco” para referirse a los soldados afrodescendientes brasileños.
Las publicaciones de guerra paraguayas como el periódico de trinchera Cabichuí tenían un alto contenido satírico y, al tiempo de ridiculizar al enemigo, tenían el objetivo de motivar a las tropas en su lucha contra el enemigo.
“El Cabichuí, admirado de las altas dotes que adornan el carácter de sus adversarios los macacos, ha tenido la disculpable curiosidad de buscar algunas noticias de su procedencia e investigando entre compañeros más aventajados en las ciencias naturales, se le ha referido a su satisfacción que descendían en línea recta de la famosa y distinguida familia orangután oriunda de Angola de África... estableciéndose después de una reñida lucha en las vastas florestas en la parte oriental del América del Sur llamado Brasil. En el transcurso del tiempo hizo alianza esta respetable familia con la de los monos, de cuya unión salieron los macacos”, señala un artículo titulado “Procedencia y aventura de los macacos”.
No obstante, es crucial destacar que el uso de soldados afrodescendientes y esclavos no fue exclusivo de las fuerzas aliadas. El Ejército paraguayo también incorporó a su filas un número significativo de afrodescendientes y esclavos, especialmente a medida que el conflicto se prolongaba y las bajas aumentaban.
GRAVES PÉRDIDAS
Después de las graves pérdidas sufridas en la batalla de Tuyutí el 24 de mayo de 1866, el mariscal Francisco Solano López se vio obligado a recurrir a nuevas fuentes de reclutamiento. Esto incluyó la incorporación de unos 6.000 esclavos provenientes de estancias estatales y propiedades particulares, incluyendo las de la propia familia López.
Estos soldados no solo servían en la infantería, sino que también realizaban tareas especializadas como asaltar embarcaciones enemigas, actuar como infantería de marina y construir importantes fortificaciones como las trincheras de Humaitá y Curupayty.
Un pasaje de un escrito del ingeniero británico George Thompson, quien trabajó al servicio del Ejército paraguayo, pone de manifiesto las actitudes raciales de la época: “La gran importación de negros y la influencia degradante de la esclavitud ha puesto á los brasileros muy abajo (como raza) en la escala de la humanidad”.
Esta declaración refleja no solo los prejuicios personales de Thompson, sino también las teorías raciales seudocientíficas que eran comunes en el pensamiento de la época.
INVISIBILIZACIÓN
Los pocos sobrevivientes y la asimilación rápida de los afrodescendientes después de la guerra ha llevado a lo que algunos historiadores llaman la “invisibilización” de la herencia africana en Paraguay.
Este hecho resulta más que patente en la afirmación de uno de los más connotados intelectuales paraguayos, Manuel Domínguez, quien en su obra “El alma de la raza” sostiene que “el pigmento negro no ensombrece nuestra piel”.
En resumidas cuentas, además de la falsa creencia de que en Paraguay no existió población negra, el origen guaranítico atribuido al término “kambá” es una asimilación lingüística que es producto de usos históricos.