Mientras algunos sectores políticos y de comunicación adversos al Gobierno quieren desmerecer los avances económicos del país, el Banco Mundial resalta que el Paraguay tendrá un crecimiento positivo este año y que es un buen lugar para hacer negocios. No se trata de la propaganda política que hacen los partidarios de la administración gubernamental, sino las conclusiones de los análisis que realiza el ente financiero internacional sobre la situación del continente, que surgen de las cifras de lo que ocurre en el día a día. De ese modo, sobre el pesimismo derrotista de los perdedores de la política se imponen los datos ciertos de la realidad de una nación que trabaja y progresa con gran esfuerzo.
Haciendo un relevamiento de la situación económica regional para América Latina y el Caribe, el economista jefe del Banco Mundial, William Maloney, resaltó que “Paraguay está situado cómodamente al lado de las economías importantes como un buen lugar para hacer negocios”. Eso porque su desenvolvimiento económico es positivo y las condiciones que ofrece a los inversionistas son excelentes.
Resaltó lo que ya se había señalado anteriormente: que Paraguay tendrá este año un crecimiento del producto interno bruto (PIB) del 3,8 %, a lo que agregó que en los años siguientes crecerá en 3,6 %. Estos datos confirman que nuestro país podría continuar el camino positivo que viene transitando desde los últimos ejercicios. Si la gente del prestigioso organismo financiero mundial afirma que Paraguay está cómodamente instalado junto a los que tienen economías importantes no es para desconocerlo. Y menos si lo apuntan como un buen lugar para hacer negocios.
El Banco Mundial no se guía por simpatías políticas o ganas de quedarse bien con los gobernantes de turno. Simplemente comenta lo que se ve en la realidad, que no es invento del Gobierno, sino producto del trabajo del país y su gente.
Teniendo en cuenta los buenos conceptos que se tienen de nuestro país, el presidente del Banco Central del Paraguay (BCP), Carlos Carvallo, puso de resalto el que Paraguay sea valorado internacionalmente por sus resultados macroeconómicos sobresalientes. Y llamó la atención sobre las perspectivas favorables de que los buenos frutos de la macroeconomía puedan aterrizar a la microeconomía, es decir, al bolsillo del ciudadano común.
Los números recientemente divulgados por la banca central revelan que el crecimiento económico que se ha conseguido en los dos primeros meses de este año es del 5,9 %. Lo más importante no es que las cifras positivas sean solo de ahora, pues en los últimos doce meses el incremento del PIB ha sido del 6,8 %, lo que habla con mucha elocuencia de que el Paraguay se está desplazando por un excelente camino.
Todo esto no quiere decir que estemos en lo máximo y que ya se llegó a destino. Es simplemente el desenvolvimiento actual de la actividad productiva y comercial, cuyo crecimiento debe mantenerse e incluso mejorar. Pues solo con un desenvolvimiento estable y continuado se podría lograr una mejor condición de vida para los que habitamos en esta nación.
El titular del BCP destacó la necesidad de poner en marcha las reformas económicas estructurales que está preparando el Gobierno nacional. Explicó que con ellas se podrá impulsar la competitividad, lo que puede posibilitar un desarrollo sostenible que incluya a todos y no solo a ciertos sectores.
Todo lo que se haga para corregir las estructuras obsoletas de la vida nacional será bienvenido, porque nadie se puede oponer lógicamente a estar mejor que antes. Aunque, como es lógico, habrá oposición en ciertos sectores que solo piensan en sus intereses políticos y económicos de facción.
Para que el desarrollo sea sostenible es fundamental que vayan aumentando progresivamente las inversiones en los más diversos renglones de la actividad productiva. Para lo cual será fundamental que el país sea atractivo, a fin de que los dueños del capital de las naciones del mundo confíen en Paraguay y vengan a trabajar aquí. En ese sentido, lo que ha afirmado el técnico del Banco Mundial sobre nuestro país es de suma importancia, ya que sostuvo que es un buen lugar para hacer negocios. Una expresión de indudable valor publicitario que no se puede dejar pasar sin valorarla.