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En mi camino por la expansión de consciencia, me he topado varias veces con innumerables mitos relacionados con la práctica de la meditación.
Erróneamente se piensa que meditar es poner la mente en blanco y suprimir cualquier pensamiento. Nada más alejado de la realidad.
Meditar es ir a los lugares más recónditos de nuestra alma para encontrar respuestas a las preguntas profundas que de forma cotidiana no nos hacemos pero que están allí haciéndonos ruido.
Otro mito muy arraigado y relacionado con la meditación es que esta va en contra de tus creencias religiosas, si las tienes.
Esto tampoco es cierto. Meditar no activa ni despierta nada que vaya en contra de ninguna religión, porque se trata de una actividad espiritual de reencuentro con nosotros mismos y si eres creyente de cualquier religión, comprenderás que no estás incumpliendo ningún precepto al embarcarte en una jornada de introspección.
Un tercer elemento no es ni siquiera un mito, sino más bien una excusa. Se trata de decir que no tienes tiempo para meditar. Si de verdad no tienes 10 minutos de tu día para dedicártelo a ti, ¡entonces estás realmente desenfocado o eres muy malo inventando excusas! Diez minutos bastan para meditar a diario con excelentes resultados.
En realidad, lo importante no es el tiempo que le dediques, sino la devoción al hacerlo.
En cuarto lugar, tenemos la creencia arraigada de que meditar es difícil. Debo decirte que meditar es un hábito y como tal, se puede aprender, cultivarse y perfeccionarse si así lo quieres.
Finalmente, hay personas que creen que meditar implica controlar los pensamientos. Nada más difícil e incluso utópico que esto. Meditar lo que busca es observar los pensamientos y las emociones, hacerte consciente de ellos y dejarlos ir pero nunca controlarlos.
Imagínate el carrusel de maletas del aeropuerto en donde ves pasar las maletas sin tomar ninguna. En otras palabras, observa cómo las maletas van y vienen, sin tener que controlar o hacerte cargo de alguna. Ocurre lo mismo con los pensamientos y emociones que aparezcan en el momento en el que estás meditando.
Es por eso que ya nos acercamos a una tercera edición de nuestro diplomado en meditación en el Cala Center, porque estamos convencidos de que el mundo será un mejor lugar si cada día más y más personas se suman a la tendencia de la meditación.
BIO
Estratega de vida y de negocios. Presenta y dirige el show de entrevistas CALA, que se transmite en canales de una veintena de países. Durante cinco años y medio presentó CALA, en el prime time de CNN en Español. Empresario y emprendedor social. Autor de ocho bestsellers en temas de liderazgo, emprendimiento y desarrollo personal, incluyendo “El poder de escuchar” y “Despierta con Cala”. Es presidente y fundador de Cala Enterprises Corporation y de la Fundación Ismael Cala.
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Mayor búsqueda del monstruo del lago Ness graba “sonidos extraños”
¿Y si finalmente fuera cierto que “Nessie” estuviera escondido en las turbias aguas del lago Ness? Investigadores y apasionados del tema iniciaron el 26 de agosto la mayor operación de búsqueda del monstruo escocés en 50 años. Sin embargo, todo parece indicar que el equipo no llegó a obtener pruebas concluyentes sobre la existencia del monstruo, aunque algunos de los micrófonos llegaron a grabar “sonidos extraños”, informó National Geographic
“Nuestro objetivo siempre ha sido grabar, estudiar y analizar toda suerte de comportamientos y fenómenos naturales difíciles de explicar”, declaró Alan McKenna, del equipo de búsqueda Loch Ness Exploration, formado por voluntarios y organizador de la “caza”. Los expedicionarios no han escatimado en medios, incluyendo drones equipados de escáneres térmicos, barcos con cámaras infrarrojas o un hidrófono, para intentar desentrañar el misterio.
“No sé qué es. Solo sé que hay algo grande en el lago Ness. He visto escaneos de sónar de objetos del tamaño de camionetas moviéndose debajo del agua”, aseguró a la AFP Paul Nixon, director general del Centro del Lago Ness. “Puede ser un mito, puede ser real... Me gusta pensar que es algo entre lo uno y lo otro”, afirmó Tatiana Yeboah, turista francesa de 21 años cuya visita al lago coincidió con la operación de búsqueda. Los investigadores creen que los escáneres térmicos podrían ayudar a identificar cualquier anomalía, en tanto el hidrófono detectará cualquier grito inusual en las aguas del lago, de 56 km2 y 240 metros de profundidad.
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Un millar de observaciones
La presencia de un monstruo en el ‘Loch Ness’ es una leyenda que se remonta a la antigüedad: existen piedras talladas, realizadas por los pictos (tribus celtas) que vivían entonces en la región, en las que hay representada una misteriosa bestia con aletas. La primera huella escrita sobre la criatura data del año 565 d.C., en una biografía del monje irlandés San Columba, evangelizador de Escocia en el siglo VI, que explicaba haberle ordenado al monstruo que se batiera en retirada.
De la primera observación moderna de Nessie dio cuenta un diario local en mayo de 1933. Un empresario de la zona y su esposa circulaban a orillas del lago cuando se vieron sorprendidos por “una enorme ola”. En diciembre de 1933, el diario británico The Daily Mail contrató a un cazador sudafricano, Marmaduke Wetherell, para localizar a la criatura. El hombre dijo haber encontrado unas grandes huellas, pero se demostró que eran falsas.
En 1934, el médico inglés Robert Wilson tomó lo que más tarde se conocería como “la foto del cirujano”, una imagen en la que se ve lo que parecen ser el largo cuello y la cabeza de Nessie emergiendo del agua. Aunque resultó ser un montaje, propulsó la popularidad del lago Ness en todo el mundo. Según el Loch Ness Centre, hasta ahora se han notificado más de 1.100 observaciones oficiales de Nessie, y el monstruo reporta cada año millones de libras esterlinas a la economía escocesa gracias al turismo.
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¿Un reptil marino?
A lo largo de los años, científicos y aficionados han intentado encontrar pruebas de la presencia de un gran pez en las profundidades del lago, y hay quien ha sugerido que el monstruo podría ser un reptil marino, como un plesiosaurio. En 1972, el Loch Ness Investigation Bureau emprendió una de las mayores búsquedas en el lago hasta la fecha, en vano.
Y quince años después, durante la operación Deepscan, se desplegó un sónar por todo el lago. Sus organizadores aseguran que encontraron un “objeto no identificado de un tamaño y una fuerza inusuales” en lo más hondo. En 2018, un grupo de investigadores realizó un estudio de ADN en el lago Ness para determinar qué organismos viven en sus aguas. Aparte de numerosas anguilas, no hallaron mucho más.
“Este fin de semana nos da la oportunidad de registrar las aguas de forma inédita y estamos impacientes por ver qué vamos a encontrar”, explicó Paul Nixon, director general del Loch Ness Centre. Los impulsores de la iniciativa buscaron voluntarios para vigilar cualquier movimiento en el agua o cualquier otro hecho inexplicable durante este fin de semana, pero a causa de la “demanda aplastante” por parte de los aficionados, el grupo ya no acepta más candidatos.
Fuente: AFP.
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Sarabia: “La altura no es un mito”
Pedro Sarabia, entrenador de Nacional, se refirió al juego del sábado ante General Caballero y lamentó la derrota por Copa Libertadores en la agonía del compromiso ante el Sport Huancayo. “Voy a evaluar qué equipo ponemos el sábado”, mencionó el técnico, de acuerdo a la recuperación de sus jugadores.
“No importa quiénes juegan, nosotros siempre salimos a proponer una idea y buscamos ganar”, agregó.
En cuanto al compromiso en Perú, manifestó. “Nos hubiera gustado como mínimo un empate, la altura se sintió, no es un mito”, explicó.
Por otra parte, Jordan Santacruz, uno de los que se retiró ahogado en aquel encuentro, sostuvo: “El mito de la altura es que sentís los primeros 15 minutos del segundo tiempo y los últimos 15 minutos del segundo tiempo. Estamos confiados, con nuestras armas podemos revertir la serie y lograr la clasificación”, señaló el volante.
Acerca del planteamiento, remarcó. “Hicimos un partido inteligente, pero lastimosamente se nos escapó el resultado. El perder no le gusta a nadie y menos en la forma en cómo perdimos, dejamos la serie abierta. Con nuestras armas vamos a sacar un resultado positivo en Paraguay”.
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El mito
- POR EDUARDO “PIPÓ” DIOS
- Columnista
Existe, desde el 2008, una especie de mito o leyenda urbana en la que Lugo “ganó con los votos que le dio Castiglioni” para “castigarle a Nicanor por haberle robado las internas”.
Partiendo de esa premisa, falsa por los motivos que expondremos más abajo, la oposición, más bien Efraín, se ha candidatado ya dos veces y va por la tercera, imponiendo la idea de que “la oposición unida” (obviamente detrás del “mesías” Alegre) volvería a derrotar a la ANR. Por ello, cualquier mortal que osare ir por su lado, sin alinearse al “Führer de las tilapias”, es catalogado de funcional al coloradismo, o al cartismo, que es la obsesión del amigo de las facturas apócrifas y su pandilla de vividores del dinero público.
Primero, si uno analiza la coyuntura de ese 2007/2008, encontramos una candidatura impuesta por Nicanor en el oficialismo colorado, que tenía, principalmente, dos “problemas”, falta de liderazgo de la candidata y que fuera una mujer, era mucho desafío a la vieja estructura, y además Blanca Ovelar adolecía, y adolece, de la falta de carisma necesario para entusiasmar a la masa colorada.
Sumémosle a eso el pirevai político que generaba la prepotencia y la arrogancia de un Nicanor todopoderoso y que no escuchaba razones.
Esto llevó a que la interna fuera sangrienta y demasiado pareja para no generar, al menos, serias dudas sobre la legitimidad de la elección.
Si bien no hubo apoyo de los derrotados a la candidata colorada, tampoco hubo una campaña abierta de estos a favor de Lugo, sino más bien una suerte de brazos caídos.
Ahora entremos a los números que demuestran que jamás los votos colorados fueron a Lugo Méndez (ser el sobrino de Epifanio es otro de los cuentos que sostienen este mito, sin olvidar que si en el 2008 quedaba algún epifanista melancólico vivo, habrá estado muy viejo para ir a votar).
El resultado final fue de 765.000 votos para Lugo contra unos 574.000 para Blanca. Ahí arranca el mito. El resultado de la sangrienta interna había arrojado un total aproximado de 660.000 votos (335 mil de Blanca y 325 mil de Castiglioni), por lo que la “fuga de votos” castiglionistas rondaría los 85.000. Lo que los “analistas” “probolsa de gatos” no recuerdan ni quieren recordar son los 411.000 votos de Lino Oviedo, escindido de la ANR, cuyos votantes no eran precisamente “progres” ni “anticolorados”. Para reforzar esta tesis, simplemente vayamos a los votos que había sumado la oposición 5 años antes, en el 2003, en que “Yoyito” Franco y Fadul habían obtenido un total de 700 mil votos sumando ambas candidaturas y en que el oviedismo (sin Oviedo en la chapa) había sacado solo 200 mil. Entonces, Lugo obtiene solo un 41% de los votos uniendo la oposición casi en su totalidad, más los de Fadul que solo obtiene 44 mil votos (2%) y en el 2003 separados habían tenido arriba del 45%.
Es decir, la supuesta fuga de votos de Castiglioni fue claramente a favor de Oviedo, un colorado de pura cepa, mesiánico y populista que simplemente aprovechó la coyuntura y duplicó sus votos.
Sumémosle a esto la pésima experiencia de los colorados durante el gobierno opositor de Lugo-Franco, con despidos masivos, persecusiones políticas, y la cereza de la torta, la falta total de carisma, simpatía y confianza que genera Efraín Alegre, no solo en los colorados, sino entre sus propios correligionarios, y el cuentito no cierra.
Resumen: Hoy tenemos un candidato colorado con una fuertísima legitimidad de origen, con carisma y que genera confianza y simpatía, no solo en sus correligionarios, sino en muchísimos no afiliados, y con una preparación a toda prueba. El caso de Alegre es totalmente inverso, viene de una interna llena de episodios de fraude que han generado enojos y fracturas en su propio movimiento interno, una Concertación pegada con saliva, que no genera la menor confianza y una falta de preparación para el cargo, que se evidencia en su falta absoluta de propuestas concretas para un país en crisis.
Ni “Santi” es Blanca, ni Efraín es Lugo, ni Marito es Lino Oviedo, ni tiene fuerza propia para pedirle nada a nadie, ya que es un lastre más que una ayuda. Lugo fue un hábil articulador que logró el apoyo pleno de la dirigencia liberal, mientras que Efraín demuestra su desprecio público por sus “enemigos internos” y traiciona a sus eventuales aliados de la izquierda una vez más eligiendo a una candidata a vicepresidenta rechazada por estos. No bastan las visitas al hospital, ni los tuits con fotos y alabanzas a un Lugo convaleciente al que destituyó con entusiasmo en el 2012. No basta con tildar de “cartista” a quien discuta al dictadorzuelo azul. El problema de la oposición no es la oposición, es Efraín.
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Una comunión entre la naturaleza y el mito
Un equipo de Nación Media visitó el Castillo de Saguazú, ubicado a escasos tres kilómetros del centro de Yaguarón, para conocer más sobre esta pintoresca construcción que el imaginario popular ha asociado a la memoria de una hechicera de nombre Micaela Yaharí, que según investigadores efectivamente existió, aunque los testimonios sobre su vida se confunden con la leyenda.
- Por Paulo César López
- paulo.lopez@nacionmedia.com
- Fotos Nadia Monges
Enclavado en un predio de casi una hectárea atravesado por el curso de dos límpidos arroyos, a apenas tres kilómetros del centro de Yaguarón, se alza una pintoresca y llamativa construcción que evoca un castillo medieval entre gótico y románico con sus torres, almenas y ventanas pequeñas, que ha despertado la curiosidad y la fascinación de los amantes del misterio, que se han encargado de difundir historias que traspasan el terreno de la realidad para confundirse con el mito.
En la primera curva de la ruta que conduce a Pirayú seguimos de largo por un camino de tierra sin nombre durante unos dos kilómetros hasta llegar al Castillo de Saguazú, en la compañía del mismo nombre, cuya fama se ha cargado de elementos fantásticos a la luz de la fecunda superstición popular.
A fin de conocer más sobre la historia de esta peculiaridad arquitectónica, estrechamente vinculada en el imaginario folclórico a la bruja Micaela Yaharí, un equipo de Nación Media visitó el sitio para desentrañar la leyenda que se fue tejiendo en torno a este concurrido sitio que forma parte del circuito turístico de la ciudad conocida como la cuna de la mitología guaraní.
EL ORIGEN
Al llegar nos recibe Rosalba con una amplia sonrisa y nos hace ingresar por el portón lateral. Nos damos los saludos de rigor, bebemos agua e inmediatamente iniciamos la charla mientras recorremos el sitio.
“Acá no vivió ninguna bruja”, aclara mientras extiende los brazos como mostrándonos que no se vale de ninguna escoba para transportarse. Sobre el origen del castillo, nos cuenta que fue construido en 1985 bajo la guía de sus padres tomando como inspiración la fotografía de una fortaleza de estilo mediterráneo que vieron en una revista que había sido traída por el marinero holandés WIebe Korpershoeck, quien se casó con su tía.
Su madre, doña Dora Arzamendia de Vera, vio la fotografía y quedó encantada, por lo que le manifestó a su esposo, el señor Ángel Ramón Vera, el deseo de contar con una casa de ese estilo, un proyecto que a la larga pudo concretarse.
Hace cerca de una década, a raíz de los problemas de salud de la madre de los actuales moradores, la entonces casa de fin de semana de la familia Vera Arzamendia quedó abandonada. Además del saqueo que sufrió, el aspecto lúgubre que adquiría la edificación en medio del matorral fue un factor propicio para que la fábula se difundiera a través de la siempre receptiva mente de un pueblo muy aficionado a los asuntos de ultratumba y afines.
Si bien Micaela nunca vivió en el castillo, puesto que falleció unos setenta años antes de su construcción, se sabe que ella fue de la zona y por ello la leyenda reza que su espíritu ronda los alrededores. Además, dentro de la propiedad convergen los cauces de dos arroyos, lo cual, según los amantes de las artes mágicas, forma un vértice energético de donde se nutría su poder.
“Cuando mamá estuvo enferma quedó un poco dejado y nos saqueron todo. La gente venía también a hacer sus ritos. Encontramos las paredes todas pintadas. Ya cuando volvimos incluso hace unos años encontramos un gallo muerto con caña y cigarro a su lado allá en el punto donde se unen los tres caminos”, dice señalando hacia la esquina norte de la propiedad.
Con el cierre de las fronteras por la cuarenta decretada por la pandemia, se les ocurrió hacer mejoras en el sitio y hasta construir una piscina con el fin de abrir una posada y explotar turísticamente la gran curiosidad que despierta el lugar.
PRESENCIA EXTRAÑA
Hay testimonios de eventos que se manifiestan a quienes se hospedan en el lugar como golpes en la puerta y otras presencias extrañas, aunque Rosalba asegura que todo está en la mente y que a ella nunca le ocurrió nada raro. Sin embargo, momentos después, ya con mayor confianza, en una suerte de descuido narra que durante una cena que compartieron con unos visitantes tras uno de los circuitos repentinamente el espejo colgado en la pared posterior del castillo empezó a agitarse como un péndulo a pesar de que en ese momento no soplaba viento alguno.
Además, durante otra de las actividades una de las tres hileras de pinos de pronto se sacudió vehementemente como si soplara un fuerte ventarrón, aunque fuera de ese punto dominaba la quietud más absoluta.
En efecto, en la habitación del ala derecha, cuya ventana apunta al ya mencionado punto norte, circula una corriente de aire inusual que no se siente en el resto de la residencia en una suerte de microclima muy singular.
QUIÉN FUE MICAELA YAHARÍ
El docente y gestor cultural Daniel Pino, autor del libro “Yaguarón. Historia, mitos y leyendas”, refiere que Micaela Yaharí existió y que hay registros de que su muerte ocurrió en 1917. Pero más allá de ese dato duro, todo lo que se dice de ella se mezcla con el mito.
Pino añade que hasta hace muy poco Micaela inspiraba mucho miedo y respeto en los pobladores de Saguazú. Sobre los detalles de su vida, cuenta que según las crónicas que circulan en torno a ella, de muy joven se inició en las ciencias ocultas con un chamán indígena de nombre Ventura Guari, que vivía en la ribera del arroyo Ñondó. De acuerdo a los relatos, desde un primer momento se destacó como la más apta entre las discípulas del payesero.
El investigador de las tradiciones populares de su ciudad relata que hasta la cuarta generación el clan familiar de Micaela estuvo marcado por el signo de la desgracia. Si bien, como ya se mencionó, ella nunca vivió en el castillo, a unos 700 metros de allí, en un punto donde los caminos se bifurcan, se señala su lugar de nacimiento, el Paraje Hugua Chipa de Saguazú, donde tenía su choza de estilo culata jovái de estaqueo con techo de paja. Frente a su humilde morada había un ykua, donde vivía una serpiente que era su guardiana. Además de un ataúd, tenía una calavera a la que le prendía velas de cera puestas al revés como elementos propiciadores de sus dotes mágicos.
TEMIDA Y QUERIDA
El recuerdo que queda sobre Micaela es ambiguo, pues al tiempo de que era benefactora si recibía un trato recíproco, era una terrible enemiga con quienes le manifestaban algún tipo de animadversión por mínimo que esta sea.
Las principales historias que se conocen sobre ella se deben a la revista Ysoindy, editada entre 1921 a 1966, año del fallecimiento de su responsable, el profesor e investigador Ramón Bogarín.
Una de las narraciones que se conservan refiere que en una ocasión una princesa indígena muy presumida por su belleza, de nombre Kuretû, se burló de ella, por lo que Caela, como también se la conocía, en represalia hizo que le creciera un órgano sexual masculino.
La muchacha, muy arrepentida, tuvo que pedir perdón por su ofensa a Micaela, quien aceptó las disculpas, pero pidiendo algo a cambio para reparar el desaire. Esta ofrenda consistió en una cierta cantidad de animales, que la hechicera faenó para convidar al pueblo, reforzándose de esta manera su fama de temida y querida.
MBURUVICHA GUASU
Se sabe con datos ciertos que el doctor José Gaspar Rodríguez de Francia cuando menos pasó algunas temporadas en la época de su niñez en la ciudad de Yaguarón, donde su padre, el capitán y comerciante portugués José Engracia de Francia, tenía una casa, donde desde el año 1968 funciona el museo Dr. Francia.
De acuerdo a los testimonios, Micaela tenía el poder de arrancarse la cabeza, la cual valiéndose de su larga y trenzada cabellera podía flotar y trasladarse largas distancias para observar las cosas desde arriba causando alboroto tanto en los animales domésticos como salvajes. Se cuenta que en una ocasión, el niño José Gaspar la observó mientras realizaba esta práctica. Lejos de asustarse, el impávido y curioso infante se acercó a la hechicera para preguntarle cómo podía hacer eso. Micaela observó al temerario niño directo a los ojos y se limitó a responderle con una premonición: “Ndehegui oikóta mburuvicha guasu” (vos te vas a convertir en un gran líder).
Micaela utilizaba este poder para poder responder a las consultas de las personas que acudían a ella deseosas de saber algo de sus parientes que vivían en zonas lejanas, pues en aquella época las telecomunicaciones y el transporte eran casi inexistentes en la zona.
Así, cuando alguien deseaba saber de otra persona que vivía en ciudades retiradas e incluso otros países, Micaela utilizaba esta capacidad para sortear las distancias y, de regreso, mediante un espejo mostraba cómo se encontraban los seres queridos de quienes recurrían a ella en busca de novedades.
Aunque no se sabe cuándo nació ni cuántos años vivió, la muerte de Micaela está fechada en el año 1917. El día de su fallecimiento, el sacerdote del pueblo no permitió el ingreso de sus restos a la iglesia por su fama de ser practicante de las artes del demonio. Refieren que en esa ocasión su féretro no pudo ser levantado ni por diez hombres, por lo que tuvo que ser arrastrado con una carreta hasta el cementerio. Aseguran quienes creen en su leyenda que cuando las nubes cubren la bóveda celeste, tal como el día en que exhaló su último aliento, su espíritu deambula por los corredores de la iglesia de San Buenaventura, donde una vez se le negó el ingreso, por lo que su alma aún vaga entre los vivos en búsqueda de la paz que le permita descansar.
CUNA DE MITOS Y LEYENDAS
Ubicada a 48 kilómetros al sureste de Asunción, la ciudad de Yaguarón es un destino por excelencia del turismo cultural. Una de sus principales atracciones es el cerro del mismo nombre, donde llegar a la cúspide es todo un desafío que se corona con una espectacular panorámica de la cadena de serranías que atraviesa el departamento de Paraguarí. Según nos explica el guía de turismo Guillermo Zayas, la mitología atribuye a esta formación rocosa el lugar donde vivía Kerana, madre de las siete criaturas fantásticas de nuestra mitología, a saber el Jasy Jatere, el Teju Jagua, Aoao, Kurupi, Luisõ, Moñái y Mbói Tu’î. En la cúspide del cerro hay una naciente de agua conocida como Ykua Kerana, donde según la leyenda esta cayó dolida al recibir la noticia de que sus hijos fueron quemados, por lo que de sus lágrimas brotó la naciente.
Al pie del cerro, además de una enorme representación del Teju Jagua, es posible observar esculturas más pequeñas de los siete duendes ya citados. Así también, el Paseo de los Mitos, ubicado en una de las calles adyacentes, ofrece a lo largo de unas dos cuadras representaciones pictóricas de estas entidades.
Otro lugar vinculado a la tradición mitológica de la ciudad es el Moñái Kuare, que está ubicado a unos 8 kilómetros al noroeste del cerro, donde bajo engaño fueron conducidos los siete hijos de Tau y Kerana para ser incinerados, la única forma en que podían morir. Moñái fue seducido por Porãsy, hermana de Tume Arandu, que era una mujer mortal de extraordinaria belleza, quien prometió casarse con el horrible monstruo.
Este llevó a sus hermanos al lugar de la ceremonia nupcial, donde se montó un horno de trampa para quemar durante siete días y siete noches a los duendes malignos. Al llegar la última noche, si bien desaparecieron físicamente de la tierra, de los restos de estos seres se formaron unas estelas de luz que subieron hasta el firmamento para conformar la constelación de las siete cabrillas, que quedaron como testimonio de la existencia de estas criaturas que atormentaban al pueblo.