Alrededor de 100 personas se acercaron a la vivienda del barrio Boquerón de Ciudad del Este, Alto Paraná, para acompañar a los padres y despedir al pequeño Brunito, quien falleció esperando un trasplante renal. “Brunito ganó muchas batallas, se apegaba mucho a la vida, nació con ese inconveniente en los riñones. Él luchaba mucho. Tuvo varias cirugías en su vida, hasta la última, que ya no aguantó más”, dijo Francisco Martínez, tío del pequeño.

El sepelio del “Amigo de Dios” fue en el camposanto San Marcos, en la ciudad de Presidente Franco, luego de partir en caravana desde su vivienda, a las 17:00 de ayer. Vecinos, amigos, conocidos, autoridades y todas las personas que fueron tocadas de alguna manera por la historia de Brunito acompañaron ayer a sus padres en su residencia de Ciudad del Este.