Mientras gana peso para poder recibir un riñón, Brunito, de 4 años, próximamente será sometido a una cirugía menor, de una hernia, informó su madre, Griselda Giménez. El niño nació con un solo riñón y además, este órgano no funciona normalmente, por lo que debe ser sometido a diálisis diaria.
Enterados de esta situación, varias personas se ofrecieron a donarle un riñón; no obstante, además del obstáculo legal que prohíbe la donación de órganos por parte de terceros, el niño también necesita ganar peso para estar en condiciones de afrontar la cirugía.
De acuerdo a la normativa vigente, la Ley Nº 1.246 solo permite donantes vivos a familiares hasta el cuarto grado de consanguinidad.
La ley se estableció como un modo de frenar el tráfico de órganos, por lo que solo padres y familiares directos pueden ser los donantes vivos.
La madre del niño dijo que una vez superado el momento crítico, ellos también se someterán a estudios a fin de constatar si son compatibles. No obstante, una vez que Brunito tenga el peso correspondiente ya puede ingresar a la lista de espera y beneficiarse con donantes cadavéricos.
El doctor Gustavo Melgarejo, director del Instituto Nacional de Ablación y Trasplante, explicó que cuando hay donantes vivos se tienen que pasar por una serie de filtros, como por ejemplo, el mismo grupo sanguíneo, además de estudiar el período de durabilidad del órgano, entre otras cosas.