Al cierre del primer bimestre del año, la molienda total de oleaginosas alcanzó las 85.732 toneladas, una reduc­ción del 80% en comparación con el promedio de lo que se había conseguido en los últi­mos 3 años y durante este período, según la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro). Esta cifra refleja el peor arranque de año del que se tiene registro en cuanto a procesamiento de oleagi­nosas.

Esta situación se debe a los problemas generados por efectos climáticos adversos durante la campaña actual, que obligaron a retrasar la época de siembra para una importante área productiva del país, llevando al conse­cuente retraso de la cosecha.

En lo que queda del 2021, la retracción actual será difí­cil de recuperar, pues para revertir las más de 236 mil toneladas de reducción que se registraron hasta el momento en relación con el 2020, se necesitaría de una utilización muy cercana al 100%, cuestión muy com­plicada de lograr, consi­derando las deterioradas condiciones de competi­tividad en que se encuen­tra la industria de procesa­miento.

El nivel de procesamiento acumulado hasta febrero implica el uso de apenas el 10% de la capacidad dispo­nible en las agroindustrias, reducción muy significativa si se compara con el 42% que se había conseguido en el 1er. bimestre del 2020. Este por­centaje es el más bajo del que se tiene registro, incluso por debajo del 26% que se había conseguido en el 1er. bimes­tre del 2013.

Los malos resultados obte­nidos hasta el momento tie­nen que ver con el ya mencio­nado retraso en la campaña sojera, debido a los proble­mas climáticos que se dieron y que evitaron que la mate­ria prima esté disponible en las fábricas en la época habitual.

Al igual que con la esta­dística global de proce­samiento, va a ser difícil recuperar este indicador y acercarse a los valores de los últimos años, que rondaron el 80%, según la Cappro.

Con un total de 338.138 toneladas exportadas de granos, aceite, harina y cascarilla de soja hasta febrero, este 1er bimes­tre se consolida como el peor registrado en los últimos 12 años. La causa principal es el importante retraso de la cosecha de esta oleaginosa.

La estadística negativa debería ir modificándose en los próxi­mos meses, conforme el principal flujo de producción vaya lle­gando del campo a sus destinos locales. Estos destinos serían las agroindustrias, para su procesamiento y los puertos para su envío sin transformación a fábricas de otros países.

Los excedentes de los productos industrializados obtenidos en las industrias en 2020, pero que fueron exportados recién al inicio del 2021, permiten que este segmento se encuentre por encima de lo registrado en el 1er bimestre del año pasado a pesar de la caída en la molienda.