La Cámara de Alimentos y Bebidas del Paraguay (CABE) manifiesta su acuerdo respecto a la incorporación del etiquetado frontal en los productos, pero insta a que el mismo se haga de manera unificada para todos los países del Mercado Común del Sur (Mercosur).
Esto (el etiquetado frontal) es tratado actualmente a nivel regional a través de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios del Mercosur (CIPAM) tras la declaración constitucional de la Corte Suprema de Justicia de México respecto a la exigencia sobre la incorporación del etiquetado en la parte frontal del producto para ser más visible.
El director ejecutivo de la CABE, Roberto Urbieta, mencionó que el Paraguay insiste en que el etiquetado sea unificado a nivel del Mercosur para evitar dañar al comercio entre los países de la región.
“Cada país está interpretando a su manera y está tratando de hacer un modelo propio del etiquetado. El problema de tener un modelo propio es muy grave porque si tuviésemos que exportar un producto, por ejemplo de Paraguay a la Argentina u otro país, automáticamente la etiqueta debe estar regida por las exigencias de especificaciones utilizadas en el país donde será vendido el producto”, explicó.
Agregó que un modelo propio de etiquetado frontal para cada país encarecerá el costo de producción y hará perder competitividad al exportador, que además de eso también se expondrá al ingreso ilegal de mercaderías, afectando su venta a nivel local.
En ese contexto, hay que señalar que representantes de la CABE participaron de la reunión de la Comisión de Salud del Parlasur, que se realizó en Montevideo, Uruguay, en la que se trató el tema de etiquetado frontal de alimentos envasados; además, participaron del Seminario Internacional de Etiquetado de Alimentos.
REFORMA TRIBUTARIA
En lo que respecta al planteamiento de reforma tributaria por parte del Poder Ejecutivo, específicamente la suba de las tasas máximas del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC), Urbieta manifestó que el sector industrial pronunció su conformidad con la suba gradual de las tasas. Sin embargo, expresó que no es el momento adecuado para plantear una modernización del sistema tributario.
“En línea generales, no podemos estar en desacuerdo en que las normas tributarias tienen que ir siendo actualizadas, pero lo que la industria y el comercio en general manifiestan es que es un momento inadecuado para plantear un cambio tributario por la retracción económica y la disminución de las ventas”, dijo el director de la CABE.