En los últimos años, el Ministerio Público inició varios procesos penales contra profesionales médicos por supuestos hechos de negligencia que tuvieron derivación fatal. Varias causas siguieron su curso, mientras que otras se estancaron a raíz de la presentación de chicanas por parte de los imputados, para evitar que las pesquisas avancen. A nivel país existen pocas condenas a doctores por casos de homicidio culposo tras una “mala praxis” de los mismos.
Uno de los casos en los que el Ministerio Público inició una investigación, imputó y acusó fue el que se registró en el Sanatorio Santo Domingo, donde falleció el pequeño Alexander Benítez en el 2016. El niño, de 4 años, fue intervenido quirúrgicamente de las amígdalas, considerada una operación menor y de rutina, por el médico Miguel Ángel Cabarcos Vieyto. Al día siguiente, el doctor dio de alta a Alexander a pesar de que presentaba malestares. Tres días después, el pequeño falleció a causa de un shock séptico secundario producto de una neumonía aguda.
A raíz de ello, la fiscala Nohl acusó a Cabarcos por homicidio culposo.
En otro caso, tres médicos fueron imputados por homicidio culposo tras el fallecimiento de un recién nacido por presunta mala praxis. El hecho se registró en el Hospital Regional de Paraguarí, donde un recién nacido sufrió un cuadro de hipoxia perinatal grave y a consecuencia de la mala atención falleció. Entonces, la fiscala Yrides Ávila imputó a los galenos Rubén Mendoza Pérez, Alba Jazmín Arzamendia y Auria Celeste Villalba.
A estos casos se suma el proceso penal iniciado contra tres profesionales de la salud por el fiscal de Caacupé, Gustavo Sosa, quien formuló imputación contra Carla Espínola, cirujana principal; Diana Céspedes, cirujana ayudante, y el anestesista del Instituto de Previsión Social (IPS), Luis Aguilar, por el fallecimiento de una menor de 12 años. La niña ingresó a IPS con sus padres el 26 de setiembre del 2014 y fue atendida por la médica de guardia, quien determinó que la misma padecía de una gastroenteritis y le aplicó una vacuna para luego retirarse a su casa. Ese día resintió el dolor y volvieron al IPS, donde se le diagnosticó peritonitis y se programo la cirugía para el 27. La niña fue operada y dos días después falleció tras soportar tres paros respiratorios.
CONDENA
Luego de una larga lucha de parte de la familia de Andrea Fernández, la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia ratificó la condena de 2 años de cárcel por negligencia médica, con suspensión de la pena, para Édgar López Samaniego, uno de los médicos del Sanatorio AMSA de Promed, que atendió a la joven que falleció por complicaciones derivadas de dengue hemorrágico el 18 de enero de 2007.
Los ministros Sindulfo Blanco, Víctor Núñez y Luis Benítez Riera declararon inadmisible, por haberse presentado fuera de plazo, el recurso de casación planteado por la defensa de López Samaniego. Los jueces Elio Ovelar, Lici Sánchez y Víctor Medina también condenaron a Roberto Cino, otro galeno; sin embargo, absolvieron al coprocesado Domingo Argüello. Este fallo fue ratificado el 29 de diciembre de 2011 por el Tribunal de Apelación en lo Penal, Tercera Sala. Justamente, contra este fallo López Samaniego planteó el recurso extraordinario de casación, que según los ministros fue presentado fuera de plazo.