“Anoche” es el título del nuevo corte de difu­sión que presenta la agrupa­ción de rock nacional Paiko. Nuevos sonidos, nuevos pro­yectos y grandes desafíos se traza la banda que grabó su último material en México.

Afi Ferreiro, guitarrista y cantante del proyecto, habló con La Nación sobre el momento del grupo y el tra­bajo que vienen realizando. La agrupación está inte­grada, además, por Enrique Zayas, Sebastián Gulino y Carlo Borghetti.

–A casi dos décadas de arrancar como proyecto ¿Cómo les agarra inter­namente la producción del nuevo disco?

–Cada paso, cada año y cada canción que se publica nos vuelve el contador a cero, y nos emociona como la pri­mera vez. Nos gusta el viaje, vivir el hoy y siempre estar buscando el siguiente desafío.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

–¿Qué nuevos ritmos y colores aparecen en el corte “Anoche”? ¿Qué nuevas búsquedas viene haciendo la banda?

–Para este disco queríamos renovarnos, refrescarnos y sacarle más el jugo a esa característica de Paiko que es el de tener un abanico de estilos sobre una base de rock y experimentar más. Fue así que nos entregamos al pro­ductor mexicano Yuno For­quetina para esta canción, y él la llevó al extremo, incor­porando elementos que no habíamos explorado aún como cosas del trap o incluso hasta de reguetón, si se quiere. Cuando uno se libera de prejuicios, la música crece. Es interesante poder seguir encontrando nuevas versio­nes de nosotros mismos.

–¿Qué cambios encuen­tran en el mundo discográ­fico, los géneros musicales cercanos al rock y la escena misma en Paraguay?

–Todo avanza y cambia demasiado rápido, todos los conceptos mutaron, y sin dudas, la música en Paraguay ya es una industria con dece­nas de artistas profesionales compitiendo. Era lo que nos faltaba alcanzar para poder integrarnos al mundo musi­cal global.

–¿Qué lecciones o viven­cias aprendidas rescatan de estos últimos años, y cómo se verá eso en sus próximos trabajos?

–Siempre nos ponemos obje­tivos y metas muy elevados, y cada vez que elevamos la cara eso deja aprendizajes para avanzar. El mayor aprendi­zaje de esta etapa capaz fue el tener la paciencia y sabi­duría de esperar el momento correcto para soltar la pri­mera canción, y mostrar este Paiko renovado que sigue orgulloso de correr riesgos.

En lo musical, esta experien­cia en México con estos dos megaproductores, que son Manu Jalil, que trabajó con Mon Laferte; y Yuno Forque­tina, que trabajó con Nata­lia Lafourcade, nos mostró nuevas maneras de abordar nuestra música. Nos fuimos abiertos y sedientos de apren­der, eso sin dudas afectará la música que vendrá.

–¿Cuál es la respuestas de la gente dentro del mercado mexicano, donde estuvie­ron presentándose?

–México nos hechizó, y cree­mos que fue un amor a pri­mera vista, ya que en menos de dos años habíamos hecho 5 viajes, 3 giras y un disco. Sin dudas se encendió una chispa a la que con este disco vamos a echar leña.

Estuvimos girando por CDMX, Morelia, Monterrey, Guadala­jara, San Luis, y varias ciudades más. Habremos ya superado la docena de ciudades.

–¿Qué representa para el mundo hispanohablante el mercado mexicano de la música?

–México es un país sediento de novedad musical, es elec­trizante y un mercado muy activo. Es el eje de la música hispana y la comunidad his­pana mayoritaria en EEUU.

–¿El nuevo material lo vie­nen grabando ya? ¿Cuándo lo presentarían? ¿La pro­ducción será hecha afuera?

–Este disco ya está total­mente terminado. Lo gra­bamos a mediados del año pasado y lo fuimos mez­clando y masterizando sin apuros, ya que nuestro plan estaba armado. Fue grabado en 5 estudios de CDMX, por dos productores de alta gama, uno con dos nomi­naciones consecutivas al Grammy y otro ganador del mismo premio, masterizado en Texas. El álbum completo sale a inicios del 2020, ya para arrancar un año lleno de celebraciones por los 20 años de Paiko.

Dejanos tu comentario