Las movilizaciones sociales se dieron con mayor fuerza durante los últimos dos años de manera sectorial, recibiendo como respuesta represiones selectivas de parte del nuevo gobierno, sostuvo la politó­loga Mabel Villalba. A criterio de esta, el Ejecutivo, encabe­zado por Mario Abdo Bení­tez, aún no ha brindado a la gente respuestas a los recla­mos sociales.

Villalba señaló también que en Paraguay tenemos un Gini que se acerca del índice per­fecto de desigualdad social, que es medido a través de los ingresos, en el acceso a la salud y la calidad de vida. “El Ejecutivo aún no ha dado respuestas a los reclamos en el área social en general. Lo que ha hecho es continuar con una política más bien de represión hacia los movi­mientos sociales, no masivas, sino más bien de represiones selectivas”, comentó.

Mabel Villalba, politóloga y José Carlos Rodríguez, sociólogo.

Por su parte, el sociólogo José Carlos Rodríguez mencionó que la desigualdad social podría ser una “bomba de tiempo”, pero que actual­mente se encuentra aplacada. “En el Paraguay, en estos dos últimos años, ha habido un aumento de las movilizacio­nes sociales, quizás en rela­ción con años anteriores, pero son más sectoriales, tie­nen una duración más breve en relación con las protestas que se dan en otros países”, sostuvo.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Añadió que una de las movi­lizaciones más significativas en el presente año tuvo rela­ción con el acuerdo firmado con el Brasil sobre la contra­tación de energía de Itaipú, el cual fue calificado por los sectores sociales y políticos, especialmente por la opo­sición, como un “acuerdo entreguista”. Esto casi ha tumbado a la administración de Abdo Benítez a través de un enjuiciamiento político en el Congreso Nacional.

“Las demandas se hacen al Estado en algunos casos en protesta en torno a las deci­siones adoptadas por el Eje­cutivo; por ejemplo, el caso de Itaipú, el cual fue una de las más significativas. Tam­bién respecto a la actua­ción del Congreso, especial­mente en lo referente a casos de corrupción donde no han habido sanciones”, mani­festó.

BOMBA DE TIEMPO CONTROLADA POR VARIOS FACTORES

El sociólogo José Carlos Rodriguez refirió, además, que la desigualdad social puede ser una “bomba de tiempo” para el Gobierno, pero que hasta el momento viene siendo controlado por varios factores.

“Puede ser una bomba de tiempo, pero hasta ahora lo que se consiguió es crear un sistema de aplacar las pro­testas sociales, mediante los partidos clientelistas, con un poco de ayuda. Hay una discriminación muy fuerte, pero un poco disimulada”, expresó.

Rodríguez mencionó que a raíz de una gran falta de cir­culante no se pueden “crear las igualdades de oportu­nidades”. “Esto se refiere a la equidad sobre la salud, el seguro social por ejemplo. Acá no quieren pagar impuestos los que tienen y pueden. Si el día de mañana uno no tiene padre o madre, uno no podrá estudiar y si mañana uno se enferma y no tiene seguro social, te vas a un privado y te piden G. 20 millones, te morís”, sentenció.

ALTA DESIGUALDAD SOCIAL

Señaló también que la inequi­dad en Paraguay no es un tema nuevo, pero destacó que actualmente es muy alto. “Nosotros tenemos un Gini alto de 48%, pero el Gini de la tierra es de 98%, es altísimo. Paraguay tiene una desigual­dad muy alta. Los dos depar­tamentos más desiguales en Paraguay son Caazapá y Boquerón. (…). En el departa­mento Central y la ciudad de Asunción son sitios en donde menos se ve la desigualdad”, dijo.

Por otra parte, argumentó que en el país se tiene un “mal salario”. “Acá el 80% de la gente no gana el salario mínimo; el sala­rio mínimo legal no es el salario mínimo real, es todo lo contrario. Tene­mos también el problema de la seguridad social, tenemos acceso diferencial en cuanto a la salud, edu­cación, no tenemos medi­cina de alta complejidad”, afirmó.

Dejanos tu comentario