Hay genios que nos dicen que si creamos un “nuevo” Estado, no necesitamos endeudarnos para enfrentar la crisis (vida, salud y economía). Hay genios que nos dicen que si le ponemos tope a los sueldos de los funcionarios públicos, no necesitamos endeudarnos.

Hay genios que nos dicen que si cortamos gastos innecesarios y manejamos con austeridad los negocios del Estado, no necesitamos endeudarnos. Hay genios políticos –bueno, este término les queda grande; solo correlís– que piden casi con locura ajustar el Estado y eliminar despilfarros y corrupción, y nos dicen que no necesitamos endeudarnos. Los mismos que “borraron” accidentalmente el artículo 47 del proyecto de Ley de Emergencia que apuntaba por lo menos a disciplinar el Estado.

Y se oponen a redirigir los royalties de las municipalidades al fondo de emergencia de salud. Hacienda pide 45 millones de dólares de los 145 millones de dólares que los municipios recibieron el año pasado, sumando a las gobernaciones el total fue de 183 millones de dólares. Hay genios que nos dicen que si le ponemos un 5% de impuesto a las exportaciones de soja y subimos los impuestos a los ricos porque ganaron mucho, no necesitamos endeudarnos. La única comida real que tenemos este año es la cosecha de soja. ¿Poner un impuesto que los exportadores sacarán del bolsillo de los productores que cocinaron la única comida real? Por favor, díganme en qué manual del idiota económico está tal “consejo” en nuestra peor crisis.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Cuando el corazón ideológico, el odio y el fanatismo nublan el pensar hasta de los más sabios. “El precio de la soja está subiendo, tienen un dólar mejor y siempre tuvieron refinanciamiento (¿?)”, argumentan. ¿Dónde por favor? El precio estaba en casi 350 la tonelada y ha bajado a 323, y muchos ya negociaron a “precios malos”. Nuestro dólar es el que menos se encareció en toda la región en el año. Hay genios que nos dicen que al impuesto a la soja hay que sumarle al tabaco, bebidas alcohólicas, comidas chatarras, bancos y ya está, no necesitamos endeudarnos. Hay muchos otros genios. Pero por salud mental me detengo.

El dinero que estos genios consideran que se puede conseguir haciendo lo que piden va de 100 millones de dólares a 800 millones de dólares, y prácticamente “hoy”. Y hablo de los genios más cuerdos. No faltan aquellos que quieren resucitar al dictador Francia, a los López, a Eligio Ayala –¡por qué, si ya sufrió mucho!–, a Stroessner, porque “esto” se trata con mano dura. Impresionante cómo los francistas y lopistas coinciden con los estronistas y viceversa.

El alma autoritaria de la raza guaraní en toda su magnífica expresión. ¿Qué es en el fondo todo buen paraguayo, según el registro histórico? Autoritario, intolerante. Ama la palabra igualdad. Siempre en primer lugar. No le es para nada importante la palabra LIBERTAD y ha estado dispuesto a sacrificarla como simple trapo sucio. En conclusión: para enfrentar esta crisis, el Estado tiene que gastar más, el déficit fiscal debe subir y hay que endeudarse, con cuidado. Recomendación mundial. Sentido común. Necesitamos recursos seguros en la mano y no en los papeles, que aguantan cualquier cosa. ¿Beneficios a futuro por el “nuevo” Estado a crear? Ok. En el futuro. Para volver a la normalidad teníamos el artículo 47.

Y al final, lo que más me duele: el Estado no ha tenido la capacidad de ahorrar, nuestras políticas públicas en salud, educación, seguridad social, son pobrísimas. El Estado es un gran privilegiado con sus instituciones y sus empleados (más que funcionarios) que nos sacan todo el dinero que quieren. Con la profunda protección y bendición de los políticos. “El Estado servidor del hombre libre”, dijo Natalicio González, en su “abc” del coloradismo nacionalista y popular, como la solución mágica para progresar y tener un pueblo donde ningún colorado será pobre.

“El hombre esclavo, servidor del Estado político”, digo yo. La tragedia de Paraguay. ¿A qué le temen más nuestros partidos políticos? A los funcionarios públicos y a los poderosos medios de comunicación. Te definen una elección. Y a las pruebas me limito. Hoy, y más allá de la decisión de Marito el lunes pasado de achicar temporalmente los sueldos de los estatales muy ricos (binacionales) y otros, ¿qué único sector conserva la totalidad de sus ingresos, empleos, presentes y futuros? El de los funcionarios públicos. ¿Endeudarnos 180 millones de dólares por el puente “Chaco’i”? Socorro. De esto, o salimos juntos o no salimos. Duele decirlo, pero hay que decirlo. DDPHQD.

Dejanos tu comentario