Por: Aura Zelada

En los últimos días de clase, mi nene nos pidió plata para comprar de la cantina. ¡Oh! Nunca antes le habíamos dado dinero y recién en primer grado empezó con el tema de las sumas y restas. De todos modos, lo tomamos como un desafío y una oportunidad para enseñarle a él y su hermanita, un poco sobre cómo se maneja el sistema económico en el mundo real.

Naturalmente, enseguida quiso más y más dinero, así que me pareció una excelente oportunidad para hablar del valor del trabajo y de la importancia del ahorro. Al respecto, te comparto algunos consejos:
Antes de “contratarlos” para alguna actividad, debemos dejarles muy claro cuáles son trabajos extras -con los que se pueden beneficiar recibiendo remuneración-, y cuáles son sus obligaciones de por sí.
Ordenar sus juguetes, su ropa, su cuarto, son tareas que (aunque le pagarías millones para que lo hagan de una vez, en lugar de tener que gritarles todos los días) les corresponden hacer a ellos.
Hablales para que entiendan los beneficios de mantener sus cosas en orden y cómo, colaborando, cada uno en sus diferentes obligaciones, se puede vivir con mayor armonía.
Una vez aclarado esto, se pueden definir algunos trabajos y sus precios. Aquí te tiro algunas ideas:

Juntar mangos

Si no tenés mangos, pueden ser hojas o cualquier otro desorden natural que ocurra en tu patio. Si como yo, tenés un patio con la hermosa sombra de un árbol de mangos, pero sus excesivos frutos constantemente tiñen el suelo de amarillo, recogerlos puede ser un excelente trabajo para tus chicos. Podés pagarles un fijo por limpiar todo el patio y en este caso se pueden repartir el dinero entre los que participen del trabajo. También podés pagar un monto por cada mango que se junte; en esta opción entra un poco más la competencia, pero se premia el esfuerzo.

Limpiar autos

Este puede ser un trabajo para niños un poco más grandes; a partir de los 10 años aproximadamente pueden limpiar muy bien un auto. Fijate cuál es el precio del mercado en cuanto a la limpieza autos y negociá con tus chicos. En mi caso, mis peques tienen 7 y 5, así que no les da todavía para limpiar todo el auto (al menos como yo espero que quede), entonces les ofrezco que limpien los vidrios.

Limpiar vidrios de la casa

Y siguiendo con la limpieza de vidrios, podés determinar un precio por cada ventana que se limpie y alentarles a que hagan la limpieza periódicamente. Este sí es un trabajo que lo pueden hacer desde más chicos, desde los cinco años diría yo.

Regar las plantas

Los trabajos de jardinería en casa siempre pueden ser bien remunerados. Esto sí que es algo súper sencillo y realizable por chicos y grandes. Lo importante es que se comprometan y lo hagan regularmente. Aquí también se puede entrenar la responsabilidad, para que recuerden su tarea cada día. Podés ayudarles enseñándoles cómo configurar una alarma para que lo recuerden siempre a la misma hora, o fijar un horario que ellos puedan manejar (por ejemplo: todos los días después de merendar).

Cuando ya tienen su dinero

Lo primero que siempre pasa cuando un niño compra algo con “su dinero” es que se maravilla porque tras dar un sólo billete para adquirir algo, el vendedor -además de entregarle su compra- le entrega varios otros billetes más. ¡Se sienten millonarios!
Es todo un tema explicarles que los billetes tienen diferentes valores. Lo que podés hacer es sentarte con ellos y con varios billetes de diferentes denominaciones, jugar a la compra y venta. Poner precio, dar vuelto. Primero vos hacés de vendedora, ellos de cliente y luego viceversa.
Ya que tienen a la vista billetes de diferentes denominaciones, también es bueno que vayan conociendo los precios reales de mercado. Es muy simpático y tierno cómo no tienen la más pálida idea de cuánto cuestan las cosas. Les entregás dos mil guaraníes y piensan que se pueden comprar un auto de carreras.
Después de que le expliques cuántos mangos deben juntar y el tiempo que eso les va a llevar para comprarse lo que quieren, comienzan a tomar dimensión del valor de su trabajo. Aquí es donde puede entrar de maravillas el concepto de ahorro y cómo cada día es una oportunidad para trabajar. Más adelante voy a estar escribiendo sobre eso. Mientras tanto ¡a aprovechar la época de mangos!
Aura Zelada
Bloguera en www.frugalisima.com
frugalisima@gmail.com
Instagram y Twitter: @frugalisima
Facebook: Frugalísima

Dejanos tu comentario